Mauricio Macri cumplió dos años en la presidencia del país. A través de un “balance” publicado en su cuenta de Facebook, se refirió a este período como una “aventura fenomenal”. “Lo que hicimos es extraordinario y lo que nos espera es espectacular”, “sigamos adelante”, concluyó.
La fraseología marketinera es algo que marcó, desde los inicios, el discurso de Cambiemos. Pero detrás de ella se encuentran las políticas concretas, nada “motivacionales” para millones de trabajadores, mujeres y jóvenes.
El sitio Chequeado.com analizó veinte promesas de campaña que el mandatario repitió incansablemente en 2015. Según el sitio, sólo dos habrían sido cumplidas. Una de ellas, fue a pedido de los poderosos: la llamada “ley del arrepentido” votada en el Congreso, que propone reducción de penas para quienes hayan robado fondos públicos pero den información en las causas.
Otra de las promesas “chequeadas” sería la de “extender la Asignación Universal por Hijo e incluir a los hijos de monotributistas”. Sin embargo, un informe elaborado por el Centro de Economía Política Argentina estimó que, entre enero y marzo de este año, se redujeron en un 6% los beneficiarios de la AUH y que la asignación perdió poder adquisitivo desde la asunción de Macri.
“Pobreza 0”, “inflación de un dígito”, “frenar la devaluación”, “Fútbol para todos”, “implacabilidad en la corrupción”, “ningún adulto mayor en la pobreza”, son otras de las promesas que, a todas luces, la administración cambiemita no llevó adelante.
La orientación del Gobierno de favorecer a los empresarios y cargar el ajuste sobre los trabajadores y los pobres, es clara. Se expresó apenas asumió, con la quita de retenciones a las mineras y al campo, y ahora con el paquete de contrarreformas laboral, previsional y tributaria.
A través de Twitter, el sitio realizó una encuesta a la comunidad sobre su visión respecto a estos temas. “Incumplidos” fue la respuesta mayoritaria. | 
