Fue sin dudas uno de los conflictos más importantes del año. Los trabajadores y trabajadoras de Pepsico conmovieron al país cuando fueron desalojados de la planta de Florida por un gigantesco operativo represivo de la policía bonaerense enviada por la gobernadora María Eugenia Vidal. Ese día también fueron golpeados periodistas y camarógrafos. En la TV Pública, los trabajadores de prensa dieron la discusión cuando los gerentes no querían que se hablé de represión, mientras las balas de goma, los bastonazos y los gases irrumpían en la fábrica de snacks, cuando los obreros y obreras valientemente defendían sus puestos de trabajo.
La solidaridad entre trabajadores también tuvo su expresión en este fin de año. Ayer trabajadores de prensa junto a su comisión gremial interna del Sindicato de Prensa de Buenos Aires (Sipreba) entregaron 80 cajas navideñas como parte de la colecta solidaria que están realizando los trabajadores y trabajadoras de Pepsico para poder pasar una navidad digna junto a sus familias.
Un gesto que vale la pena destacar, que afianza la unidad entre los trabajadores que comenzaron a ponerse de pie para enfrentar las contrarreformas y el ajuste con represión que lleva adelante el gobierno de Cambiemos.
Un canto recorrió las calles de Buenos Aires en estos días de diciembre agitado y caliente. Incluso retumbó en los cacerolazos que se hicieron sentir en los barrios de la capital y el gran buenos aires: "unidad de los trabajadores y al que no le gusta ... se jode, se jode".
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