Este lunes 8, Javier Corral, actual gobernador de Chihuahua, denunció en conferencia de prensa que la federación le niega recursos por “luchar contra la corrupción”.
Participaron de la misma integrantes del Grupo Encuentro Chihuahua como el ex canciller Jorge Castañeda Gutman, el Senador Ernesto Ruffo Appel, el actor Daniel Giménez Cacho, la académica Denise Dresser, el panista Santiago Creel, el perredista Agustín Basave Benitez, así como por integrantes del Consejo Ciudadano del Sistema Nacional Anticorrupción, con Jaqueline Peschard a la cabeza.
Javier Corral, gobernador de Chihuahua, en la conferencia de prensa brindada este lunes 8 de enero
El panista afirmó que la Secretaría de Hacienda no transfirió en diciembre los recursos por 700 millones de pesos acordados en convenio.
“Chihuahua está haciendo lo que le corresponde. No nos van a doblegar. No vamos a negociar esta investigación, porque a la larga todo México pierde. Hemos roto el pacto de impunidad y quieren hacernos pagar las consecuencias. No voy a ceder ante las represalias y los amagos. Estoy listo para dar esta batalla hasta sus últimas consecuencias”, sostuvo Corral.
Denunció “Hay un intento de estrangular económicamente al Gobierno de Chihuahua. El tema no es menor, es gravísimo confirmar a la Secretaría de Hacienda como un instrumento de persecución política”.
A su vez, el gobernador de Chihuahua aseguró que Manlio Fabio Beltrones, ex líder nacional del PRI, presentó un amparo para no ser encarcelado, para no ser citado y para poder acceder al expediente.
“Los recursos para el saneamiento financiero convenidos en diciembre no fueron radicados en ese mes, como se establece en el acuerdo que tenemos firmado. Se adujeron razones de disponibilidad financiera, siendo Chihuahua la única entidad que no se le transfirieron recursos”, declaró Corral y afirmó que esto afectó el pago de salarios y aguinaldos.
Según el panista, ésta es la represalia por procesar a Alejandro Gutiérrez Gutiérrez, un alto dirigente del PRI, y por ir contra el ex Gobernador César Duarte Jáquez por la acusación de corrupción por un desvío de fondos millonario que fue a financiar la campaña electoral del PRI de 2017. Un escándalo en el que están involucrados otros exgobernadores, como Javier Duarte, de Veraruz, y Roberto Borge, de Quintana Roo, ambos detenidos.
Apenas en noviembre pasado, Javier Corral había declarado su apoyo al gobierno de Peña y confiaba en que éste actuaría contra el exgobernador César Duarte. Corral esperaba la detención del exgobernador priista como golpe de efecto. No llegó la solicitud de extradición.
Cabe destacar que minutos antes de la conferencia de prensa, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) señaló en un comunicado que todos los recursos correspondientes a las transferencias de recursos a las entidades federativas “son transferidos en tiempo y forma con mecanismos transparentes”. Negó así las acusaciones.
Intrigas y ambición de los de arriba
Pero, más allá de los jaloneos entre el PRI y el PAN, lo cierto es que ninguno de los dos partidos, que representan los intereses empresariales, están exentos de corrupción.
Hace pocos días se dieron a conocer vínculos de funcionarios panistas con el narcotráfico evidenciados en la investigación por el crimen de Miroslava Breach. Un hecho que desmiente a todas luces la pose de Corral como campeón y mártir de la “lucha contra la corrupción”.
Mala sazón la del caldo en el que se cocinan los poderosos. Según el análisis de Raymundo Riva Palacio, columnista de El Financiero, el acuerdo temporal entre Corral y el gobierno de Peña Nieto estaría próximo a su fin.
De acuerdo con Riva Palacio en el entorno de César Duarte se afirma que Javier Corral tuvo apoyo de la secretaría de Gobernación para hundir al exgobernador priista. Un intento de control de daños de un PRI muy golpeado por los escándalos de corrupción de varios de sus gobernadores.
Peña Nieto con el exgobernador César Duarte, cuando éste era aun uno de sus favoritos
Por su parte, Duarte niega todo. Pero podría tratarse de un golpe de Chong contra el grupo que lo dejó fuera de la sucesión presidencial, y golpea a Manlio Fabio Beltrones, con quien estaba enfrentado, Luis Videgaray, entonces secretario de Hacienda, que ahora encabeza del equipo de donde salió la candidatura presidencial de Meade.
De la podredumbre y la decadencia de la “casta política” que gobierna al servicio de las trasnacionales y empresarios nativos, y cuyos vínculos con el crimen organizado se han evidenciado en reiteradas ocasiones nada pueden esperar los trabajadores y los sectores populares. Ahora se van a sacar los ojos por quedarse con la rebanada más grande del pastel.
Hace falta que los de abajo forjemos una herramienta política propia, que luche por los derechos de los trabajadores, las mujeres y la juventud. A esto quiere abonar la aspiración a una candidatura independiente de Sulem Estrada, maestra de secundaria, y Miriam Hernández, trabajadora de la UNAM, por la Plataforma Anticapitalistas al Congreso de la CDMX. |