Ciudad Juárez es la de mayor composición obrera del país. 500 mil trabajadores de distintos estados del país constituyen el logro de la maquila: la clave para las trasnacionales, chinas, norteamericanas, alemanas, etc., es la super explotación del trabajo. El salario ronda en unos 80 pesos al día mientras que el costo de producción de dichos componentes podría costar el triple o más en las zonas del centro del capitalismo.
Que sea, además, la ciudad más violenta del país, con la guerra contra el narco, no es un problema para la explotación. Al contrario, es un elemento a favor de las empresas. La mano de obra, barata, además, está atemorizada y dócil y difícilmente se organiza en un clima de militarización, feminicidios, ejecuciones y desaparición.
El último gran movimiento de obreros y obreras maquiladoras, antes del de Lexmark, fue el de RCA en 1995. Las últimas resistencias obreras en la fronteriza Ciudad Juárez se desarrollaron en medio de la ofensiva neoliberal: 1995. En pleno vigor de Tratado de Libre Comercio.
Te puede interesar: La huelga de 1995 en la RCA de Ciudad Juárez: albores de resistencia.
La huelga de 1995 fue todo un hito en la ciudad fronteriza a un año de la rebelión del EZLN. 5, 600 obreros maquiladores de la RCA cruzaron El Paso, Texas, para exigir aumento salarial cuyo poder adquisitivo bajó drásticamente a la mitad. Todo ello producto de la devaluación.
13.000 trabajadores, que representaban a las 12 plantas de la zona de la maquila en Ciudad Juárez a través de la frontera de El Paso fueron golpeados. La policía de Texas junto a la policía de Chihuahua reprimió la protesta de marzo.
Plantones obreros y la resistencia en Lexmark
En 2016 un movimiento comenzó en EATON Bussman. Se trasladó el 13 de agosto, a la planta de Scientific Atlanta. En septiembre sucedió lo mismo, el día 30, en adc ComScope; el 4 de noviembre, en la maquila Lexmark. El movimiento se unificó el 12 cuando se llevó a cabo una marcha de los 4 movimientos ante la junta de conciliación. Unos 2 mil obreros en marcha plantearon: reinstalación a los despedidos, derecho a la libre sindicalización, aumento salarial.
El movimiento continuó, y del 7 al 10 de diciembre se realizó por 4 días consecutivos un paro de labores en la maquila Lexmark y plantones fuera de cada fábrica mientras las temperaturas llegaban a 18 grados Celsius bajo cero y la capa de nieve alcanzó 30 centímetros.
El movimiento, en febrero, decidió impulsar a Antonia Hinojos como candidata independiente a la alcaldía de Juárez: el objetivo era destacar las demandas obreras en las elecciones municipales, denunciar la explotación en la industria maquiladora y enfrentar a los partidos de los empresarios. Aunque los obreros no consiguieron el registro realizaron una fuerte campaña política de denuncia contra la explotación capitalista.
Esto los llevó a impulsar a la primera candidatura con rasgos de independencia de clase (independiente del PRI, el PAN, el PRD y Morena) y de la unión de la lucha social con la lucha política. Antonia Hinojos se convirtió en una representante genuina de las y los maquiladores en lucha. Los sectores más oprimidos se pusieron al frente: mujeres de la maquila, en la ciudad más violenta del país.
Te puede interesar: Quíen es Antonia Hinojos Hernandez, “Toñita”
El movimiento de 2016 plantea la vigencia y actualidad de la lucha sindical y política. Primeramente, la necesidad de impulsar un sindicalismo democrático, clasista, combativo, solidario y al servicio de los trabajadores para derrotar a la CTM; política opuesta a la de la abogada Susana Prieto Terrazas, que cumplió un papel legalista en los movimientos, que buscó impulsar el movimiento para conseguir sólo liquidaciones justas y jugó un papel burocrático y antidemocrático dentro del movimiento.
El movimiento no fue derrotado por la represión, sino por el desgaste y por la política burocrática de Susana Prieto que llevó a los maquiladores a negociar liquidaciones frente a la necesidad de coordinar la lucha por un sindicato independiente de rama e inter-fabril.
La importancia de la democracia obrera es decisiva para la lucha del futuro y es una lección política del movimiento de las maquilas: por un sindicalismo democrático, clasista, combativo en toda la industria maquiladora.
También te puede interesar: Luchas obreras en Ciudad Juárez. |