Tras el brutal asesinato de Sophia, lactante de un año y once meses de la comuna de Alerce, Puerto Montt, se abrió el debate respecto a las condenas para quienes cometan este tipo de crímenes, y también sobre la pena de muerte en Chile; medida exigida, incluso, por sectores de la derecha.

El crimen contra la menor provocó una serie de movilizaciones y manifestaciones en contra del maltrato y abuso a niños y niñas, y también la creación de la Ley Sophia, iniciativa que busca aumentar las penas para quienes cometen este tipo de crímenes contra menores, y que se aplique nuevamente la pena de muerte en Chile.

Noemi Muñoz, vocera del movimiento Justicia por Sophia de Antofagasta, manifestó hace unos días que "estamos cansados de ver cómo todos los días aparecen casos de niños abusados. Como sociedad pedimos la vuelta de la pena de muerte en nuestro país", afirmó.

En este sentido, la dirigenta nacional de la agrupación de mujeres Pan y Rosas, y ex vicepresidenta de la FeCh, Bárbara Brito, difundió un video donde explica las razones de por qué no apoyar la medida que exige reponer la pena de muerte en el país.

Brito denuncia que detrás de la exigencia de realizar un plebiscito para reponer la pena de muerte en el país hay sectores de la derecha que en otras ocasiones se han opuesto férreamente a dicho mecanismo cuando se trata de la demanda de No + AFP o educación gratuita universal.

"Son los mismos parlamentarios que ahora quieren decidir quiénes viven y quiénes no; los mismos que se opusieron al derecho a decidir de las mujeres (...) Son esos diputados que mientras ganan millones y millones de pesos empujan a una gran mayoría a la miseria; a niños al Sename, viviendo y muriendo en condiciones miserables", inicia la joven en el video.

A diferencia de quienes consideran una solución la reposición de la pena de muerte ante los brutales femicidios o parricidios, Brito apunta a los pilares de esta sociedad como responsable de los crímenes ocurridos: "son las condiciones sociales que generan para los femicidios y parricidios".

"El odio y repudio lo tenemos que dirigir hacia soluciones efectivas (...) que no sea una solución cuando el hecho ya está consumado, sino que sea una solución preventiva, que pueda efectivamente reducir nuevos femicidios y parricidios", continúa la dirigenta de Pan y Rosas.

La joven cuestiona duramente la posición a favor de la pena de muerte: "¿puede servir la pena de muerte para calmar el dolor, significa más justicia, traerá paz y tranquilidad?, pregunta Brito en el video. "Es imposible sostener que con un nuevo homicidio y asesinato, esta vez por parte del Estado, se logrará establecer paz y tranquilidad, y menos alcanzar transformaciones en adelante que impidan la ejecución de nuevos femicidios y parricidios".

"Afirman que la pena de muerte generará un efecto disuasivo, pero esto no se ha podido determinar. En países como Estados Unidos, donde la pena de muerte se encuentra vigente en algunos estados, no ha repercutido en la disminución del asesinato; todo lo contrario, el machismo, la misoginia, la xenofobia y homofobia, entre otras miserias que derivan en horribles crímenes, son el últimos eslabón de toda una cadena de violencia que genera el Estado", denuncia Brito.

"Es esta sociedad la que forma individuos miserables, y nuestra apuesta tiene que ser por la transformación radical de esta sociedad capitalista", sostiene la joven.

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