Uno de los ganadores de la jornada de ayer fue el derechista Centro Democrático (CD), comandado por el expresidente Álvaro Uribe, en la medida que solo perdió una banca en el Senado de la República con relación al 2014. Justamente el exmandatario colombiano Álvaro Uribe consiguió ser reelegido como senador con más de 864.000 votos, transformándose en el legislador de la Cámara Alta que obtiene la votación más alta en unas elecciones.
El CD obtuvo una importante elección para Senadores, en las que el partido obtuvo la mayor votación (cerca de 2,5 millones de votos), y para Cámara de Representantes, en la que se ubicó segundo, con 2,35 millones, superado solo por el Partido Liberal (2,42 millones).
Otro de los grandes ganadores fue el partido Cambio Radical (CR) del exvicepresidente y ahora candidato presidencial Germán Vargas Lleras. Hace cuatro años habían obtenido 9 representantes, este domingo lograron pasar a 16 escaños en el Senado tras obtener más de 2,1 millones de votos.
Tanto el CD de Uribe como el partido CR, han sido las principales fuerzas políticas que se opusieron por derecha a los acuerdos de paz entre el gobierno colombiano y las FARC.
Los partidos colombianos de mayor tradición, el Conservador y el Liberal, lograron mostrar este domingo que mantienen una importante fuerza, aunque las encuestas previas no les auguraban buenos resultados. El Partido Conservador obtuvo 15 escaños en la cámara alta –con una votación de 1.901.204–, mientras que el Liberal logró 14 sillas con 1.877.997sufragios a su favor.
Entre los “perdedores” se ubica el partido del actual presidente, Juan Manuel Santos. El descenso del Partido de la U, se expresó en que este domingo consiguió 14 senadores, siete menos de los que había obtenido en 2014 cuando fue la primera fuerza en la Cámara Alta.
Duro revés para las FARC
Escrutado el 98 % de los votos, la lista del partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común, las antiguas FARC, obtuvo al Senado unos 52.112 sufragios, lo que supone el 0,34 %, y a la Cámara de los Representantes (Diputados) le fue peor, ya que consiguió unos 32.429 votos (0,22 %).
Foto: Marcos Calarcá, candidato por el partido FARC
El intento de transformación de la antigua fuerza guerrillera para dar paso a un partido de tinte centro izquierdista con alguna expectativa electoral, no dio resultado. Aunque producto de los acuerdos de paz con el gobierno colombiano, esta nueva fuerza política contará en la próxima legislatura con cinco senadores y cinco representantes a la Cámara baja.
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Luego de las elecciones internas quedaron definidos los candidatos presidenciales.
Junto a las elecciones para Senado y Cámara de Representantes se realizaron las elecciones internas para definir los candidatos presidenciales de las fuerzas que aparecen como favoritas de cara a los próximos comicios. Las mismas estuvieron marcadas por las denuncias de irregularidades por parte del uribismo y de Petro.
Uno de los aspirantes a la presidencia Gustavo Petro, que ganó la consulta para encabezar una alianza autodenominada de izquierda, aseguró que puede ganar la jefatura del Estado en las elecciones del próximo 27 de mayo.
Petro, que fue miembro del Movimiento 19 de Abril (M-19), obtenía 2.693.347 votos (84,70 %), superando ampliamente a su único rival, el exalcalde de Santa Marta Carlos Caicedo, que sumaba 486.168 (15,29 %).
Mientras que en la interna de la coalición de derecha, el uribista Iván Duque obtenía 4.017.989 votos, equivalentes al 67,72 % del total, frente a las 1.531.84 papeletas de la ex ministra conservadora Marta Lucía Ramírez (25,81 %), y los 383.130 sufragios (6,45 %) del exprocurador Alejandro Ordóñez.
Con estos resultados se conformó la lista de los ocho candidatos presidenciales que son Germán Vargas Lleras (de 56 años de edad), Gustavo Petro (58), Humberto de la Calle (71), Iván Duque (41), Juan Carlos Pinzón (46), Piedad Córdoba (63), Sergio Fajardo (61) y Viviane Morales (56).
Tanto el uribista Iván Duque y como el exalcalde de Bogotá, Gustavo Petro, aparecen como los principales candidatos de cara a la primera vuelta que será el 27 de mayo.
Si bien en las consultas internas la elección del candidato de la derecha supera por un amplio margen a los votos recolectados por a Petro, aún no se puede definir una victoria asegurada para el uribismo y la derecha.
Desde el Centro Democrático se entusiasman con los resultados electorales y apuestan a, sumado los votos que pueden aportar Ramírez y Ordóñez como parte de la alianza, ganar en la primera vuelta con unos seis millones de votos, consolidando los votos mediante los cuales se impuso el NO en 2016 por estrecho margen en el plebiscito del acuerdo de paz.
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Pero el optimismo de la derecha puede ser exagerado. En los análisis previos a la elección se aseguraba que los candidatos de la derecha iban a barrer y que se quedarían con las mayorías del Congreso. Cuestión que finalmente no sucedió y le deja un gusto agridulce a la victoria.
Si bien la diferencia de los votos obtenidos en la elección interna, de Duque por un lado y de Petro por otro, no está asegurado que la derecha evite una segunda vuelta donde la polarización electoral cambiaría el escenario actual. | 
