El próximo día 28 de enero es el denominado Día Nacional de Luchas, convocado por seis centrales sindicales ligadas al gobierno o la patronal, como CUT, CGT, UGT, CSB, NCST y Força Sindical. La convocatoria pone en el centro la lucha contra dos medidas que son parte de los ajustes del gobierno Dilma (Medidas Provisorias 664 y 665). Esos dos decretos buscan atacar a los trabajadores con la quita o disminución de una serie de derechos laborales, y ocurren mientras el gobierno no toca ni un milímetro de las voluptuosas ganancias empresarias. La Central Sindical e Popular (CSP)-Conlutas adhirió al llamado del 28 y también estará en las manifestaciones.

Entrevistado por La Izquierda Diario sobre la convocatoria, Pablito Santos, dirigente del Sindicato de Trabajadores de la Universidad de San Pablo (Sintusp) señaló que “El comienzo del segundo mandato de Dilma ya muestra a qué vino. Con un escenario económico turbulento, Dilma intentó ocultar en su discurso de posesión los ataques que ya estaban ocurriendo e intenta dejar el trabajo sucio en las manos del ministro Joaquim Levy. Las Medidas Provisorias (decretos) afectarán principalmente a los trabajadores tercerizados y en las areas de mayor rotatividad, como la construcción civil y el telemarketing. Es un ataque duro al conjunto de la clase trabajadora y no podemos aceptarlo”.

Santos completó: “El Sintusp enfatizó en una declaración de hoy la necesidad de construir un fuerte plan de lucha para derrotar los ajustes del gobierno, así como la necesidad de exigir a las centrales sindicales un día de paro nacional, organizando así de forma más contundente una manifestación real desde la base, ya que el acto del 28/1 en San Pablo convocado para las 10h en el hall del MASP (Museo de Arte de SP) no podrá tener un peso fuerte de varios sectores de trabajadores que estarán en su gran mayoría trabajando”. Santos puntualizó también que eso es solo una muestra de que mientras no hay por ahora una organización de una lucha seria, porque estas mismas centrales sindicales que correctamente convocan a una manifestación contra las MP están enganchadas a los gobiernos y patrones, y buscan implementar por ejemplo el Plan de Protección del Empleo, que a pesar del bonito nombre se trata de una mini reforma laboral para beneficio de los patrones. Para Santos, “En la Volkswagen de San Bernardo do Campo vimos el camino para derrotar los ajustes de los patrones, con los trabajadores unidos y movilizados parando la producción y los servicios, ya que solo rondas de negociación con el gobierno y los patrones como quieren esas centrales no podrán borrar los ajustes de Dilma y revocar las MP”.

Este día de lucha, según Pablito Santos, también debería buscar la unidad con la juventud que lucha contra el tarifazo en el transporte y con la población que lucha contra el racionamiento de agua: “Son demandas fundamentales, y como en las jornadas de junio, los trabajadores necesitan aliarse a la juventud y a la población para enfrentar todos los ajustes, que se van expresando no solo en la quita de derechos laborales sino también en los tarifazos y aumentos de impuestos. Sería necesario tener impuestos progresivos para los ricos, que financien viviendas, salud, educación y transporte estatizado y bajo control de los trabajadores y de la población”.

El Día Nacional de Luchas deberá comenzar por la mañana con volanteos en las fábricas y otros lugares de trabajo, y según Santos, el Movimento Nossa Classe también estará divulgando una declaración sobre la tarea de los trabajadores en esta situación nacional. “Creemos que es importante comenzar a organizarnos desde ahora para el Congreso de la CSP-Conlutas, que ocurrirá en junio de este año y para esto nos parece fundamental lo que vinimos planteando desde el Sintusp de organizar plenarios estaduales de la CSP-Conlutas para preparar un plan de lucha”.