×
×
Red Internacional
lid bot

Derecho al aborto. #8M: Con una misa en Luján, la cúpula de la iglesia relanza su cruzada contra las mujeres

En el Día internacional de la Mujer y en rechazo a la legalización del aborto, celebrarán una misa "a favor" de "la protección de la vida humana desde la concepción hasta la muerte natural”. Será a las 11horas en la Basílica de Luján.

Sol Bajar

Sol Bajar @Sol_Bajar

Domingo 8 de marzo de 2020 08:45

Con una misa en la Basílica de Luján, la jerarquía de la Iglesia Católica, que encabeza la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), se lanza este domingo en su cruzada contra las mujeres.

El día y el contexto elegido no es casual. Con un claro pronunciamiento contra el derecho de las personas gestantes a decidir sobre su cuerpo, justo cuando la marea verde vuelve a poner en debate, producto de una larga lucha, la legalización del aborto, la cúpula aliada al papa Bergoglio llama a congregarse en su santuario principal, nada menos que en el Día Internacional de las Mujeres.

Con el lema "Si a las mujeres, si a la vida", tras las movilizaciones convocadas por la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto el pasado 19F y el discurso del presidente Alberto Fernández en la apertura de sesiones legislativas, anunciando el envío de un proyecto alternativo, los obispos congregarán en Luján desde las 11 horas, en una misa que será encabezada por el presidente del Episcopado, monseñor Oscar Ojea. Según anuncian desde la institución, la misa tendrá su réplica en catedrales y templos de todo el país.

Como en 2018, el referente de los llamados "curas villeros", José María “Pepe” Di Paola contó que participará de la misa y subrayó, como Ojea, que la cúpula de la Iglesia llama a movilizar en defensa de la vida."Vamos a celebrar el día de la mujer que da la vida", dijo el padre Pepe. "Vamos a cuidar y defender la vida", reiteró al convocar "a todos los fieles de la villa La Cárcova", donde desarrolla su actividad pastoral, a asistir a Luján.

Podés leer: Los curas villeros contra las mujeres

Al lanzamiento de la cruzada contra las mujeres, que apunta a “mejorar” la campaña que realizaron desde el Vaticano en aquel año, cuando la enorme marea verde irrumpió en las calles para reclamar su derecho, se sumará luego el de las jerarquías de las iglesias y templos evangélicos, que llaman a manifestarse en todo el país, el próximo 22 de marzo, con una convocatoria lanzada desde la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas (ACIERA), donde se congrega la mayoría de las comunidades protestantes.

Podés leer: Pastores y barones: peronismo e integración de las Iglesias evangélicas al Estado

"El domingo 22 de marzo convocamos a los creyentes, en cada parroquia y templo, junto a todos los que aman la vida inocente no nacida, a unirnos en oración y en un único sentimiento en toda la Argentina", señalaron en un comunicado difundido esta semana.

Ya con posiciones conquistadas dentro del propio Estado (como puede advertirse en la Secretaría de Culto de La Matanza, que creó especialmente para ellos la vicegobernadora Verónica Magario), desde ACIERA anuncian también que su objetivo será volver a coordinar estrategias de lobby parlamentario con la cúpula católica.

Reeditando también sus movilizaciones de 2018, los grupos antiderechos vinculados a las iglesias -las llamadas “ONGs provida”-, convocan a una marcha desde Plaza Italia hasta la facultad de Derecho de la UBA el próximo sábado 28, donde se proponen conmemorar “el Día del Niño por Nacer”, que un decreto de Carlos Menem💩 estableció en 1995.

Interrogantes en el discurso oficial

Aunque lo anunció tras su gira por Europa y su encuentro con Bergoglio, en medio de las negociaciones con el FMI y los bonistas, Alberto Fernández reiteró el pasado 1M, durante su discurso en la apertura de sesiones legislativas, que "en unos diez días" enviaría al Congreso su proyecto de ley. Según sostuvo, apunta a una iniciativa “que legalice el aborto en el tiempo inicial del embarazo y permita a las mujeres acceder al sistema de salud cuando toman la decisión de abortar”.

Junto al proyecto de legalización de la práctica, que reclama hace décadas el movimiento feminista, Fernández anunció que su propósito "es también llegar a las mujeres de nuestro país en situación de vulnerabilidad social en la etapa que más necesitan la presencia del Estado: durante el embarazo, nacimiento, puerperio y primeros años de crianza”.

A esos fines, agregó, enviará junto a su proyecto de legalización de la práctica, una iniciativa para crear “el Plan de los 1000 días”, orientado a garantizar con "ayuda económica" desde el Estado "la atención y el cuidado integral de la vida y de la salud de la mujer embarazada y de sus hijos o hijas en los primeros (dos) años de vida".

Podés leer: Myriam Bregman: "Hay que derrotar la presión de las Iglesias contra nuestros derechos"

Non confrontarum...

Qué dicen en concreto ambos proyectos, todavía es una intriga, pero como indican numerosas y numerosos analistas, la especulación política y los acuerdos con las Iglesias no dejan ni dejarán de sobrevolar en el tablero que comienza a diseñarse o, más bien, que se diseña hace tiempo.

La estrategia del oficialismo, en este sentido, es clara. Mientras promueve la "no confrontación" con la cúpula de las Iglesias, llevándola al grado de disciplinar al feminismo nacional y popular, para que obturar la posibilidad de una movilización nacional de las mujeres en su día de lucha, promueve una "agenda positiva" ligada a la asistencia a los obispos y a la "ayuda social", otorgándole más poder territorial desde las instituciones del Estado, clave también para la política del gobierno ante la crisis que se profundiza.

Podés leer: Financiamiento de la Iglesia: los decretos de la dictadura que siguen vigentes

Como dato, cabe advertir al respecto que el ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, y el secretario de Culto, Guillermo Oliveri, de fuertes vínculos con Ojea, desarrollan a la par sus lazos con las autoridades de Cáritas y de la Pastoral Social. Todo indica que en esa misma línea trabajan con otros credos. De hecho, hace pocos días, el pasado 6 de marzo, Arroyo y Oliveri firmaron un convenio con varias iglesias del país para garantizar, precisamente, el envío de fondos para asistir a "barrios vulnerables", así como la entrega de alimentos.

Por el aborto legal y la inmediata separación de las Iglesias del Estado

Todos los gobiernos, peronistas, radicales, cambiemitas, han sostenido los decretos (mayoritariamente provenientes de la dictadura cívico militar) para financiar desde el Estado, con sumas millonarias, a las cúpulas religiosas. De manera explícita e implícita, garantizan de este modo su injerencia en las políticas públicas, que van desde los derechos que tiene que garantizar el Estado, como la salud, la educación, el acceso al trabajo y la vivienda, hasta su capacidad de incidir en las decisiones judiciales, en el parlamento y los votos de diputades y senadores, y por supuesto también en los sindicatos, como ya se vio en 2018, durante el debate de aborto, o el propio 8M pasado, cuando en medio del año electoral ese mismo debate se mantuvo prácticamente silenciado hasta bien entrado el año .

Podés leer: La CGT se suma a la cruzada contra el derecho al aborto

Hoy, esa injerencia tiene su expresión, también, en los debates que atraviesa el movimiento feminista y de la diversidad sexual en Argentina, en la negativa de las organizaciones alineadas con el Frente de Todos a marchar este 8 de marzo, Día Internacional de las Mujeres, y en el debate sobre la estrategia a desarrollar para conquistar finalmente la legalización del aborto y la separación inmediata de las Iglesias del Estado.

Podés leer: 8M: a ganar las calles para que sea ley y por nuestras vidas

Hoy, con un pañuelazo en Plaza de Mayo, frente a la Catedral porteña, muchas organizaciones se manifiestan en rechazo a la provocación de la cúpula clerical. En muchas provincias del país habrá acciones similares. Mañana lunes, desde la Plaza de Mayo hasta el Congreso, se espera que la marea verde, con miles y miles de personas en su apoyo, vuelva a manifestarse frente al Congreso Nacional.

La mirada atenta sobre las maniobras que ya vimos en 2018, con especulaciones y negociaciones entre los gobiernos, los partidos empresariales, las cúpulas de las Iglesias y los gobernadores antiderechos, que ya conocemos por nuestra experiencia de lucha, tiene que agudizarse.

Entre las muchas lecciones que dejó esa batalla, así como la derrota a manos de los dinosarurios del Senado, hay una que es central: la fuerza para conquistar el aborto legal y la inmediata separación de las Iglesias del Estado se encuentra en la organización y en la movilización callejera, no en los pasillos del Palacio. Mañana 9 de marzo, sin dudas, será un día clave para comenzar a demostrarlo.

Podés leer: 8 y 9M: por el pan y por las rosas, salimos a la calle en todo el país