El levantamiento de Stonewall fue un hito en la lucha por los derechos de la diversidad sexual. El 28 de Junio de 1969 la policía irrumpió en el bar Neoyorkino The Stonewall Inn en una nueva redada, bar que resultó ser el refugio de gays, lesbianas, bisexuales y travestis, quienes decidieron enfrentarla en una revuelta que duró tres noches en respuesta a años de represión y acoso sistemático de las fuerzas policiales en complicidad con el Estado, la iglesia y los grupos religiosos
Sábado 20 de mayo de 2023
Así es, el día que dió origen a esta fecha de conmemoración (28 de junio) fué una respuesta a la represión del Estado mediante el enfrentamiento a la policía y la revindicacion de espacios sociales públicos para la comunidad LGBTTIQA+.
Hoy, en distintos países donde en esta fecha se toma en cuenta la historia de las diversidades sexo-genéricas, se ha transformado principalmente en una celebración, un carnaval. Sin embargo ¿Qué tenemos que celebrar?
En el mundo durante el siglo XXI los grupos de extrema derecha junto a sectores religiosos de la sociedad han demostrado su repudio a la comunidad LGBTTIQ+ y las mujeres. Con campañas en contra del matrimonio igualitario, contra los derechos sexuales y reproductivos y contra la educación sexual integral.
En Chile podemos ver el odio a las personas trans, lesbianas, gays, no binaries y de la comunidad todos los días, es cosa de ver las noticias y la ridiculización que realiza la prensa a la toma de estudiantes del Instituto Nacional, burlándose de que piden baños sin género, para que nadie se sienta incómodx de utilizarlos.
También podemos ver, que el proceso constituyente con el Partido Republicanos a la cabeza, ha emanado un ante proyecto que invisibiliza a la comunidad LGBTTIQ+ y nuestros derechos. Mientras el oficialismo se disculpa con ésta misma derecha, por haber incluído derechos sexuales y reproductivos en la propuesta anterior, atribuyendo a esta decisión el fracaso de la convención.
En definitiva, el último siglo nuestra lucha ha acabado por ser capitalizada y utilizada como propaganda política para campañas de gobiernos capitalistas o por las propias empresas multinacionales que intentan convertirnos en un mero objeto de mercado más. Lo que ha propiciado el espacio para hechos como el que las fuerzas represivas del estado, esto es Carabineros, utilicen la bandera de la diversidad sexual para decorar sus patrullas, mientras actúan en función a los intereses de la derecha y los grandes empresarios que son quienes arrojan a la comunidad LGBTTIQA+ a la precariedad, explotación y discriminación.
Confiemos en nuestra organización y nuestras fuerzas, para discutir nuestras verdaderas necesidades y como conquistarlas mediante la organización en cada lugar de trabajo y estudio, sin confianza e independiente del gobierno, que apuesta por cambios simbólicos mientras mantiene el régimen neoliberal heredado de la dictadura. El acoso en las calles, escuelas o lugares de trabajo, la violencia y discriminación, los crímenes de odio no se solucionarán con un mero cambio sociocultural ni constitucional, en el marco de la sociedad capitalista, sino que enfrentando a la derecha, la iglesia y la clase dominante en las calles con métodos de movilización históricos del movimiento LGBTTIQA+, de mujeres y la clase trabajadora y poniendo fin a este modelo que se encarga de reproducir esta discriminación y sostenerlo.
