A un año del asesinato de una manifestante antiracista en la localidad de Charlottesvile, en el Estado de Virginia, por parte de grupos de extrema derecha, éstos se organizan para realizar una concentración en el parque Lafayette frente a la sede de Gobierno.
Lunes 13 de agosto de 2018 03:17
En agosto de 2017 en la ciudad de Charlottesvile un joven neonazi perteneciente grupo de manifestantes de extrema derecha que, bajo la consigna de “Unir a la Derecha” (Unite the Right), se concentraron en contra de la remoción de una estatua de Robert E. Lee, general a favor del gobierno esclavista durante la guerra civil estadounidense, arrolló a una mujer que se encontraba en una concentración en contra del racismo y la xenofobia.
En esa ocasión el xenófobo presidente Donald Trump sostuvo que él creía que “la culpa la tienen las dos partes” por lo cual fue duramente criticado en redes sociales, por la oposición demócrata e incluso por miembros de su gabinete. Y es que precisamente el discurso racistas de Trump, junto con su lema de América Primero abrieron la puerta al envalentonamiento de estos grupos de la ultraderecha. Así lo confirma David Duke, dirigente del Ku Klux Klan quien afirmó que los manifestantes estaban cumpliendo “una promesa de Trump: recuperar el país”.
A un año del ataque, los líderes del movimiento Unite The Right han convocado una concentración frente a la Casa Blanca, sin embargo para no ser asociados al nazismo los organizadores prohibieron el uso de estas banderas, permitiendo solo la de los EEUU y la de la Confederación, gobierno esclavista que perdió la guerra civil. Por otro lado fue convocada una contra manifestación por parte de la Answer Coalition, quienes convocaron a una “acción masiva contra los racistas, fascistas y neonazis”.
Es interesante remarcar cómo la instalación de un gobierno de derecha pro empresarial abre las puertas a grupos de ultra y extrema derecha. Sobretodo si pensamos que luego de la elección de Piñera han ganado protagonismo estos grupos aquí en Chile: Por un lado Kast y su movimiento Acción Republicana defensor de los militares violadores de derechos humanos o el grupo Social Patriota quienes el último 25 de Julio armaron barricadas contra el derecho al aborto legal, libre, seguro y gratuito.
Si hoy la extrema derecha sale a las calles es porque le temen a que las inmensas mayorías, trabajadoras, trabajadores y estudiantes nos organicemos para conquistar nuestros derechos. Pero no podrán amedrentarnos, por eso las organizaciones políticas de izquierda deben repudiar enérgica y categóricamente las acciones de estos grupos, apuntando a continuar y potenciar las manifestaciones por el aborto legal, libre, seguro y gratuito porque con la fuerza de las mujeres trabajadoras y estudiantes, junto a sus compañeros varones, la extrema derecha, los empresarios y la iglesia ¡No pasarán!
