Miércoles 21 de marzo de 2018 13:59
Entre 2003 y 2004 se crea la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto, una coalición federal heterogénea que reunía, en ese entonces, a más de 300 agrupaciones feministas, organizaciones políticas y personalidades a favor del derecho al aborto seguro y gratuito. Su consigna fundante es "Educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar, aborto legal para no morir". Esta coalición elabora un proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo que fue presentado en el Congreso, por primera vez, en 2007.
Se presentó el Día Internacional de Acción por la Salud de las Mujeres y a poco de conocerse la muerte de Ana María Acevedo, una joven santafesina que padecía cáncer y a la que le negaron un aborto terapéutico, lo que le impidió continuar con su tratamiento.
El proyecto no fue tratado y perdió estado parlamentario.
Con Cristina en la Casa Rosada
En el 2009, se vuelve a presentar el proyecto que, a pesar dela adhesión de 22 diputadas y diputados, fue "cajoneado" y sin haberse discutido en comisión alguna volvió a perder estado parlamentario.
En 2011, el proyecto cuenta con el apoyo de 50 integrantes de la Cámara de Diputados. La Comisión de Legislación Penal pospone una audiencia planificada para el 27 de septiembre, con el propósito de evitar que este debate ocurra en plena campaña electoral presidencial. Finalmente, la comisión se reúne el 1º de noviembre, con un resultado incierto y escandaloso: primero se dijo que había quórum y se emitió dictamen; pero a las pocas horas, se anunció que el quórum había sido fallido.
Diez días más tarde CFK recibió a José María Arancedo, titular de la Conferencia Episcopal Argentina en una reunión de suma cordialidad en la que ratificó su posición contraria al aborto.
El fallo de la Corte Suprema
A principios de marzo de 2012, la Corte Suprema resolvió, en el histórico fallo FAL, que "no resulta punible la interrupción del embarazo proveniente de toda clase de violación y que cualquier caso de aborto no punible no está supeditado a un trámite judicial". Exhortando, además, al Poder Ejecutivo a implementar protocolos hospitalarios para atender esos casos.
Una semana después, la Campaña presenta por cuarta vez, su proyecto, con el aval de 60 congresistas. Pero vuelve a ser cajoneado, sin tratarse en las respectivas comisiones.
Más plenarios fallidos
En noviembre de 2014 se presenta con el apoyo de 70 bancas. La Comisión de Legislación Penal puso en agenda el tratamiento del proyecto. Pero Patricia Bullrich, presidenta de esa comisión, ejecutó una maniobra desopilante con el aval del kirchnerismo que terminó, nuevamente, con una sospechosa imposibilidad de quórum a último momento.
Esta maniobra fue denunciada por el diputado Nicolás del Caño, del PTS/Frente de Izquierda. La diputada kirchnerista Diana Conti le respondió que si intentaban poner el tema del derecho al aborto en la agenda, "nos ponemos de acuerdo y no venimos".
Los últimos pasos
En 2016, se realiza una nueva presentación. Para este período el proyecto contó con 70 firmas de legisladores que lo avalaron. Sin embargo, fue el propio Mauricio Macri quien señaló que durante su gestión no se impulsaría ningún proyecto sobre interrupción del embarazo: "hay que defender la vida" sentenció.
El 6 de marzo de este año fue presentado por séptima vez consecutiva, con 72 firmas de los distintos bloques. Acompañado por los "pañuelazos" y la enorme movilización del 8M en el Paro Internacional de Mujeres, se instaló el debate a nivel nacional. Ya nadie puede negar que las mujeres, al conquistar las calles, somos un factor determinante en la política.
El plenario de comisiones del Congreso ya se reunió para establecer los marcos del debate. “Corremos el riesgo de caer en una dilación”, sostuvo al respecto la diputada Nathalia González Seligra, del PTS/Frente de Izquierda. “Llegamos a esta instancia gracias a la lucha del movimiento de mujeres”, y advirtió que “en la sociedad el debate ya está saldado. Ya se demostró que es una cuestión de salud pública, y por eso estamos tratando todos proyectos que atienden, con sus matices, con sus diferencias, a este derecho. No estamos discutiendo si ‘aborto sí’ o ‘aborto no’. Hay que entender que hay muertes de mujeres pobres y que hay que legislar a favor de que no mueran más mujeres”, afirmó, a la vez que llamó la atención sobre la intromisión en el debate de la jerarquía de la iglesia.
De nuestra movilización dependerá cuál es el futuro de este proyecto de ley, respaldado por una historia de lucha del movimiento de mujeres.
