Tras cuatro años de persecuciones fueron absueltos los dos referentes sociales de la Villa 20. A pesar de ya haber sido absueltos en dos oportunidades, el macrismo por intermedio del fiscal Luis Cevasco, mantuvo una insólita causa que no pudieron sostener. Críticas a la Justicia por la impunidad que aun sobrevuela los asesinatos de la toma del Indoamericano y a los gobiernos de la Ciudad y Nación que no invirtieron un solo peso de los que se habían comprometido.
Martes 4 de noviembre de 2014
En la octava jornada del juicio, la jueza Penal y Contravencional porteña, Cristina Lara, absolvió a Diosnel Pérez y al “Tano” Nardulli ante la debilidad de las pruebas y testigos presentados por el fiscal Luis Cevasco. De hecho, ninguno los reconoció como los organizadores de la toma del predio de diciembre de 2010. Por su parte, los referentes de la Villa 20 contaron con el apoyo de testigos como Nora Cortiñas, el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, Enrique Fukman, el legislador del FIT Marcelo Ramal, el cura José María "Pepe" Di Paola, y Jorgelina Salgueiro, hermana de Bernardo, uno de los asesinados durante la represión, entre otros.
La magistrada resolvió absolverlos de la acusación de usurpación al considerar que durante el juicio “no se pudo acreditar la materialidad de los hechos por los cuales fueron imputados”. Con esto tiró por tierra la teoría del fiscal Luis Cevasco quien había pedido dos años de prisión en suspenso para Diosnel y el “Tano” por haber sido los instigadores de la toma, negando la enorme crisis habitacional que existe en el sur de la Ciudad de Buenos Aires. El fallo de la jueza agregó en este sentido que “existe una falta de políticas públicas que garanticen este derecho, que debe ser atendido, debatido y resuelto por las áreas de Gobierno que corresponda como forma de prevención”.
El “Tano” Nardulli declaró una vez terminado el juicio, que fue bancado por organizaciones solidarias que esperaban bajo la lluvia de este lunes, que el fallo era “un triunfo parcial porque todavía siguen impunes los asesinatos de los compañeros del Indoamericano”. En el mismo sentido, Diosnel Pérez cuestionó que “nadie esté en el banquillo por no cumplir con la ley que obliga al gobierno porteño a urbanizar la Villa 20”, mientras "los chicos siguen contaminados”, así como también siguen libres “esos que entraron pistola en la mano” durante la toma del Indoamericano asesinado a tres personas, Bernardo Salgueiro, Rosemary Churapuña y Emilio Canaviri Álvarez.
Patricio del Corro (PTS), presente en la sala durante la lectura del fallo, afirmó a La Izquierda Diario que “la actuación del fiscal Luis Cevasco fue vergonzosa” y que “se notó desde el principio que era una causa armada para intentar disciplinar a quienes reclamen sus derechos en la Ciudad”. Recalcó además la “enorme crisis habitacional que se vive en la zona sur de la Ciudad donde mientras estamos acá, hay varios barrios inundados como el Rodrigo Bueno o la Villa 21-24”.
La abogada Myriam Bregman, precandidata a Jefa de Gobierno por el Frente de Izquierda por el PTS, cuestionó por su parte la actuación de la justicia porteña que es “muy rápida para acusar a los referentes sociales mientras aun no hay ningún responsable por el incumplimiento de las leyes de urbanización ni por los asesinatos del Indoamericano”. Agregó además que “ni un peso de los que se comprometieron ha llegado al barrio de parte de los gobiernos de la Ciudad ni de la Nación”.
Diosnel Pérez y el “Tano” Nardulli fueron los únicos que llegaron a juicio por haberse negado a aceptar realizar tareas comunitarias mediante una mediación penal. Este acuerdo ya había sido aceptado por Alejandro "Pitu" Salvatierra, delegado de Villa Soldati y referente kirchnerista, y Noemí Ruejas, del barrio Los Piletones.