La investigación sobre el avión de la aerolínea alemana Germanwings que se estrelló el martes en los Alpes franceses va a ser larga y la recuperación de los cuerpos de las 150 víctimas se presenta "extremadamente difícil" según informaron autoridades. La empresa Lufthansa todavía no ha dado explicaciones sobre las causas del accidente.
Jueves 26 de marzo de 2015
Foto: EFE / Federico Bambarini
El avión quedó "pulverizado" y el trabajo de los médicos forenses será "extremadamente largo y difícil", sostuvo el ministro francés, Manuel Valls.
"La operación va a durar varios días, porque hay que tener en cuenta las condiciones extremas de la topología de la cumbre en la que se estrelló", apuntó.
En el lugar del siniestro el coordinador del dispositivo de helicópteros, Xabier Roy, dijo que se descarta "casi por completo" poder recuperar los cuerpos de los fallecidos este miércoles.
Roy explicó que las condiciones en el lugar eran "más difíciles" que el día anterior a causa de la lluvia que ha caído, lo que convierte el escarpado terreno en resbaladizo.
"La prioridad ahora es la búsqueda de indicios y, en ese sentido, es importante encontrar la segunda caja negra", señaló.
La Fiscalía de Marsella está al frente de la investigación y se espera que el hallazgo que se hizo de la caja negra que registra las conversaciones en cabina permita aportar elementos para averiguarlo.
El fiscal de Marsella encargado del caso, Brice Robin, explicó que "quizá tengamos un primer resultado del análisis de la caja negra al final de esta tarde, pero los exámenes complementarios tardarán varios días".
Tras recordar que la segunda caja negra aún no se ha encontrado, el fiscal indicó que se ha abierto una investigación por "homicidio involuntario" y que en ella se ha movilizado a diez magistrados de Marsella y otros cuatro de Aix-en-Provence, así como a 200 investigadores de la Gendarmería.
"Más allá de las condiciones extremas, este tipo de investigaciones son largas", recalcó el jefe del Ejecutivo francés, quien destacó que, aunque parece descartado que se produjera una explosión en vuelo, las autoridades trabajan “sobre todas las hipótesis”.
En este sentido, el ministro alemán de Interior, Thomas de Maizière, dijo que en estos momentos "no hay ningún indicio sólido" que apunte a que la catástrofe aérea "haya sido causada a propósito por terceros", aunque reiteró que se investiga en todas las direcciones.
Las autoridades consideran que no hay casi posibilidades de encontrar con vida a alguna de las 150 personas (144 pasajeros y 6 miembros de la tripulación) que viajaban en el avión, que cubría el trayecto entre la ciudad española de Barcelona y la alemana de Düsseldorf.
Respecto a la nacionalidad de las víctimas, aún hay diferentes versiones.
El presidente de la aerolínea Germanwings, Thomas Winkelmann, afirmó que de las 150 personas a bordo del A320, 72 eran de nacionalidad alemana y 35 españoles.
En Madrid, las autoridades españolas cifraron en 49 el número de sus nacionales muertos, según cifras del secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, que dijo que era "provisional".
El presidente de Lufthansa, Carsten Spohr, calificó al accidente "es inexplicable" y dijo que el aparato estaba técnicamente bien, además hizo hincapié en que los dos pilotos tenían suficiente experiencia.
Entre las diferentes hipótesis que durante estas horas se han escuchado, el secretario del Sepla y director técnico de la Asociación Europea de Pilotos, Álvaro Gammicchia, señaló que en los últimos años los accidentes de aviación se producen cada vez más en la fase de crucero, y ya no tanto en la del despegue y aterrizaje, como ocurría anteriormente. Por lo que sugirió que debe estudiarse si se presentan problemas de seguridad no contemplados por las empresas para estas fases del vuelo, o que exista falta de entrenamiento de los pilotos para responder de forma manual ante incidentes.
Los pilotos de Lufthansa vienen de realizar varias jornadas de huelga durante la semana pasada. La campaña de los pilotos se centra en la defensa de su sistema de jubilaciones anticipadas, pero además está enmarcada en la resistencia interna de la plantilla contra los planes de su dirección, determinada a reforzar sus filiales de bajo coste Germanwings y Eurowings.
A su vez, se conoció un informe sobre condiciones laborales en la aviación, que fue presentado en febrero pero se debatirá este jueves en el Parlamento europeo. Según informa Eldiario.es, el informe denuncia la “precarización” de los pilotos, las “presiones” que sufren y las consecuencias que esto trae para la seguridad aérea. “Un alarmante número de pilotos está trabajando sin relación directa con la aerolínea para la que pilotan, especialmente en el sector low-cost”, señala el informe.