ENTREVISTA // BANDAS. Acorazado Potemkin es un homenaje a la libertad, a la creación colectiva

Foto: Vicky Schwindt / facebook Acorazado Potemkin

Ellos están por fuera de las falsas poses de estrella del rock. Y si bien son músicos que ya tienen un camino recorrido, no hacen alarde de eso. Al contrario esa trayectoria la utilizan para no hacer lo que hacen los que se vanaglorian de su pasado. Ellos miran al futuro.

Acorazado Potemkin son: Federico Ghazarossian en bajo, Luciano Esain en batería y voz, Juan Pablo Fernández en guitarra y voz

LID: ¿Cómo se presentan ustedes y qué tienen para decir a los que les gusta la música?

Juan P: Nosotros somos Acorazado Potemkin, tenemos cinco años de trabajo y estamos entusiasmados porque este año salió nuestro segundo disco que se llama “Remolino”. Somos un grupo independiente, es nuestra forma de trabajo. Todos en la banda tenemos mucho recorrido desde distintas bandas. Armamos algo que no era original, pero que terminó siendo un distintivo de la banda, que nuestros discos puedan descargarse libremente de la web. Entonces nuestro primer disco salió en formato digital, gratuito y en formato mp3 o wav de alta calidad. Lo mismo hicimos con el disco nuevo y para nosotros es casi una declaración de principios. Somos un grupo que necesita de su público, que hacemos todo lo posible por evitar los intermediarios entre nuestra música y el que la quiera escuchar. Trabajamos con un sello que por suerte nos acompañó y se llama “Oui Oui Records”.
Encontramos una forma de difundir nuestra música aprovechando las redes sociales haciendo de eso una obra concreta. Hasta ahora nos va muy bien, ya con seis mil descargas en cuatro meses. Para otros es una cifra chica, pero para el mundo del rock, que cuesta editar un disco, termina siendo casi mágico. Es algo sencillo y habitual, pero no nos deja de sorprender sobre todo por lo que significa el mercado de la cultura, de la música, de los discos. Trabajamos mucho una cosa linda del rock de tocar el show en vivo, pero también tratamos de reflexionar mucho lo que hacemos, el por qué lo hacemos y dónde lo hacemos.

LID: Ustedes ya tienen una trayectoria dentro del rock. ¿Eso les permite tener una idea más formada de cómo pensar en la música?

Luciano: Puede ser, a veces con el recorrido que uno tiene aprende qué cosas no quiere. También las cosas buenas que pasaron en algún momento, y las aplicás otra vez. La experiencia de tocar muchos años te lleva a pensar las cosas y las acciones con respecto a la banda.

LID: En relación al último disco que editaron, cuando escucho el tema “Miserere” lo relaciono con la tragedia de Once. ¿Es así?

Juan P: No directamente. La escribimos en el 2009, pero evidentemente hay algo urbano fuerte y trágico, en esa furia contenida. Esa cosa de la calle, de la plaza Once, que terminan siendo metáforas. En general nos gusta escribir sobre lo que vemos o vivimos. Lamentablemente la tragedia de Once ni siquiera hemos sido nosotros los que decíamos que esto iba a pasar. Todos esos carteles de los mismos trabajadores venían anunciando que ocurriría la tragedia.

LID: Me gustó mucho el tema “El Pan del Facho”. Creo que se destaca mucho en el disco.

Juan P: Salió lindo ese tema, y como decía Tomas Eloy Martínez “Al Fascismo hay que matarlo todos los días”. Es algo que amasamos día a día todos nosotros y tenemos que verlo, cuestionarlo. También en qué cosas somos nosotros como personas, como padres. Qué cosas abonamos de las cosas que no nos gustan, y ser conscientes de corrernos de ese lugar. La canción es toda música y poesía.
Nunca sabemos qué motiva a qué. Es más fácil hablar de las palabras, de los pensamientos que están en las letras porque es la forma más racional de cómo explicar la canción.
El día anterior a la grabación estábamos yendo al estudio de grabación y vimos un atentado de los quema coches. Eso relacionaba a los quema coches con los viejos panaderos anarquistas, y ¿cómo relacionar esas dos épocas?. ¿Quién fue el vencedor, quién es el que nos amasa el pan de hoy en día? ¿Dónde fueron a parar los panaderos anarquistas? Por suerte la música permite tirar líneas hacia el pasado. Entonces cuando las ideas van hacia delante, cuando la política va hacia delante, hay que saber volver.

Federico: Son reflexiones posteriores. Trabajás por intuición y después hacés una bajada de reflexión. Yo creo que hay un setenta porciento de intuición de la banda, y lo que genera cuando te colgás el instrumento.

Luciano: De hecho la canción cuando se grabó, la letra surgió el mismo día. Mezclamos el tema y notamos que la letra tenía un peso súper importante y dispara al tipo de sonido, con la batería distorsionada, con el bajo distorsionado, bien rabioso. Este tema pedía un sonido distorsionado por lo que dice la letra.

LID: Hablando del rock, y desde el lugar que consiguieron ustedes como banda independiente. ¿Cómo ven el mercado, las productoras, el tratar de vender?

Federico: En otro momento si vos no entrabas en una discográfica o una productora que sacara tu disco, que ponga dinero para que pasen tu música en las radios, la verdad que estabas frito. Yo creo que desde el año 2000 en adelante Internet benefició mucho. Las bandas pequeñas pudieron crecer mucho con esa impronta. Antes vos necesitabas un sello para grabar, era mucho dinero, veinte horas de grabación en un estudio, conseguir cintas etc. Hoy podés buscar la manera de grabar y difundir lo tuyo. Hay un semillero muy grande, cada vez hay cosas más interesantes.

Luciano: La cuestión es dónde estás parado. Como aquella vez en que a Massacre le dieron el premio Revelación. Pero Massacre hace veinte años que viene tocando. Si estás parado en el mainstream, no ves lo que pasa en el under. A nosotros cuando éramos chicos no nos gustaba la música que pasaban en la radio. En realidad son muchas más las bandas que pululan en las cuevas, que las bandas que tienen difusión o rotación en las radios. Esa distancia es tan grande que los que están de un lado les hacen ver que abajo no hay nada. Pero en realidad hay un montón de cosas y todas buenas. El punto es cómo hacer llegar ese montón de cosas buenas a la mayor cantidad de gente. Que no se vea que lo que no está en los grandes medios no existe o no tiene valor.

LID: Ustedes participaron del disco homenaje a Mariano Ferreyra, el disco se llama “Cuerpo”. ¿Cómo fue esa experiencia?

Juan P: Sí. Nos llamaron para participar en una convocatoria donde teníamos que tener una composición original para el disco. Con una lógica muy transparente, los fondos recaudados eran para la CORREPI, lo organizaba el primo de Mariano Ferreyra y la gente de la FM La Tribu. Es gente que conocemos, que nos inspira mucha confianza en el sentido artístico de la propuesta. Para mí todo lo que era en el sentido de amplificar el pedido de justicia era necesario en ese momento. Luego Pedraza es condenado, la investigación siguió, y sería bueno que haya más condenas por los encubrimientos y una serie de cosas que hubo durante el proceso de investigación del crimen.
Era una forma nuestra de estar cerca de la familia, cerca del reclamo y todo lo que pudiéramos hacer desde nuestro lugar que es el rock. Como pasó con la cuestión de la tragedia de Once, en este caso también hay que saber ser permeables, el grupo tiene que ser independiente de la puerta de la sala de ensayo para adentro con la idea de mantener un ideal artístico personal. Pero también cuando te interrumpen porque están pidiendo ayuda o colaboración, hay que saber decir que sí y acompañar el reclamo.

Luciano: Nos habíamos enterado de que Mariano Ferreyra había empezado a escuchar los primeros demos de nuestra banda, aunque no llegó a conocer nuestro primer disco. Eso nos contó su hermano Pablo Ferreyra.

Federico: Nos contó además que era fanático de mi banda anterior “Pequeña Orquesta de Reincidentes”.
Para mí estuvo buenísimo tocar, donde convocamos a Paula Maffia y también cantó un tema en el disco.

LID: Ustedes también en los recitales planteaban justicia por Mariano Ferreyra.

Juan P: Es lo que hay que hacer. Digo para nosotros el hecho artístico pasa a ser otra cosa. Hace poco tocamos en el festival donde se le puso el nombre a la calle de Mariano. Tocamos en la estación de Kosteki y Santillán. Es gente que ya no está y en definitiva siguen matando a los militantes, a los chicos jóvenes, como dijimos en un momento a los mejores, los que ponen el cuerpo por nosotros, los que reclaman por nosotros. Entonces el artista muchas veces puede escudarse en la duda, en la reflexión, en la miseria, pero el militante tiene que seguir, no puede permitirse ese quiebre. Es una mierda que sigan pasando estas cosas, las amenazas a los militantes, todo eso sigue pasando.

LID: ¿Tienen alguna banda que los influencie o sean parte del mismo camino que hacen ustedes?

Luciano: Venimos juntando un montón de cosas y de la licuadora salen esas cosas que fuimos escuchando. Si preguntás por bandas, no hay algo puntual que te pueda decir.

Federico: Es tan amplio el espectro que uno va viviendo, que te alimentás de todo. De alguna manera cuando uno está componiendo, cuando nos juntamos y cada uno trae algo. Uno lo que trata es de no repetirse como banda

Juan P: La experiencia nos sirve para que toda esa influencia puedas sintetizarla. Somos muy permeables a todo lo que pasa. Mientras tanto nosotros tratamos de recrear alguna forma de trabajo personal. Lo que es cierto es que cuando uno es más grande se deja influenciar por bandas que no son lineales. Federico toca en una orquesta de tango y el tango tiene muchas formas de tocarse. El rock también tiene muchas formas de tocarse, no hay un solo rock, no hay un solo Indie, no hay un solo pop. Reconocemos que tomamos cosas del Post Punk, y lo apropiamos para plantear algo nuevo, con una nueva idea de belleza.

LID: Se van a cumplir diez años de la tragedia de Cromagnon. ¿Les parece que luego de la tragedia fue más difícil tocar para las bandas del under?

Federico: Siempre fue complicado tocar, inclusive antes de Cromagnon. Obvio que después de la tragedia hubo ciertos tipos de arreglos y seguridad. Y hubo empresarios que se aprovecharon de ciertos lugares y empezaron a meter hasta cuatros shows en una misma fecha y si vos ibas a un show, te desalojaban al empezar otro. El gobierno de la ciudad te viene persiguiendo por cada cosa que hacés.

Luciano: Pasa que si necesitás poner un lugar en condiciones como la acústica, la prevención, la seguridad es una inversión que está por arriba de la capacidad o el entusiasmo de la gente que pone el lugar. Vos podés hacer un show y llenar el lugar. Pero si está mal el sonido vas a tener problemas con los vecinos, y si estás mal de papeles vas a tener problemas con el gobierno de la ciudad. Si bien hay un montón de bandas, todo sigue siendo una especie de precariedad continua. Los lugares duran cinco años y los clausuran, se abre otro y va rotando. Cromagnon puso a la luz todo eso. Entonces los funcionarios cerraron todo y basta de rock. Hubo que rebuscársela de nuevo. Ahora aparecen más lugares para tocar, pero de repente aparecen esas viejas razzias con papeles en vez de palos.

LID: Tienen ustedes una visión muy positiva de la música

Juan P: Asumimos nuestra función de músicos y vamos contra viento y marea, es parte de nuestra alegría.

Luciano: Es la distancia más corta entre la intuición y la energía que tenés para dar. Más si te gusta el punk rock y tenés cosas para decir. El rock sigue siendo un camino para esto y está buenísimo. Hay algunos que dicen que el rock se murió y sin embargo hay gente que sigue tocando en algún garaje, con ganas de decir una gran cantidad de cosas.

LID: ¿Por qué eligieron el nombre Acorazado Potemkin?

Juan P: Es un lindo homenaje a la libertad, a la creación colectiva, a la chispa que enciende la revolución, los fuegos de Octubre. Creo que el grupo encontró una forma propia, respecto a otras propuestas. Se nota, empieza a parecer como que es algo que interesa, tenemos muchas lindas respuestas. No es algo revolucionario lo que hacemos, es como que estamos retomando algo. Hay gente que nos decía “ustedes vieron la película que revolucionó la manera de hacer montaje“, y es así, como que de tres personas distintas sale algo nuevo.

Luciano: Hay gente que está viendo que lo que hacés es algo nuevo. Cuando te vuelve eso de la gente, te genera una satisfacción enorme.

El disco "Remolino" se está presentando en distintas ciudades del país, Paraná, Rosario, Río Cuarto, La Plata y para cerrar el año los dos últimos shows son:

- 4 de diciembre en El Uniclub en Capital Federal

 12 de Diciembre en la ciudad de Córdoba.

Los discos “Mugre” y “Remolino” se pueden descargar de la página web