La compañía asegura que hasta el momento permitía los alquileres en esa zona amparándose en la legislación estadounidense.
Martes 20 de noviembre de 2018 17:29
La aplicación de alquiler de casas y habitaciones entre particulares, Airbnb, anunció que sacará de su listado de ofertas los alojamientos que se encuentran en las colonias israelíes asentadas ilegalmente en el territorio palestino ocupado de Cisjordania, según informó la página web.
Según detalla un comunicado "Hay opiniones encontradas sobre si las compañías deberían hacer negocios en territorios ocupados que son sujetos de disputas históricas entre israelíes y palestinos", expuso hoy la empresa y explicó que han revisado su política al respecto, que hasta el momento permitía el alquiler de las viviendas israelíes en los territorios ocupados.
Organizaciones de derechos humanos denunciaron que los turistas desconocían que su destino estaba en territorio ocupado porque Airbnb lo registraba como Israel y que, además, de este modo se ayudaba al crecimiento económico de los asentamientos que funcionan como parte de la avanzada israelí expandir su territorio a costa de las tierras históricas de los palestinos.
Desde el gobierno de Israel la respuesta no tardó en llegar. El titular de Turismo, Yariv Levin, pidió que la compañía dé marcha atrás en esta decisión "discriminatoria" según un comunicado citado por el diario "Times of Israel". Una cínica declaración por parte de Levin si tan solo se tiene en cuenta la situación que vive la población palestina de esa zona: puntos de control del Ejército israelí, requisas, discriminación en el transporte y otras situaciones que recuerdan al Apartheid.
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Por su parte el ministro de Asuntos Estratégicos, Guilad Erdan, aseguro que es una decisión "equivocada que supone rendirse a las organizaciones antisemitas del BDS (Boicot, Desinversión y Sanciones)", en referencia a la campaña internacional que solicita a los gobiernos y empresas que boicoteen los productos israelíes en tanto continué la ocupación y ataques contra el pueblo palestino.
Airbnb se apoyaba en la legislación estadounidense, un país aliado histórico de Israel, que permite a empresas hacer negocios en estos territorios, excusándose de esa forma cuando salió a la luz que incluían en su plataforma ofertas de alojamiento en asentamientos judíos en Cisjordania, que son ilegales según el derecho internacional.
La empresa ahora asegura que tras recabar diversas opiniones llegó "a la conclusión" de que debía "eliminar los listados de los asentamientos israelíes en Cisjordania que están en el centro de la disputa entre israelíes y palestinos", según informa la nota.
Más allá de sus explicaciones, es evidente que el cambio anunciado por la compañía no se puede leer por fuera de la ofensiva militar de Israel sobre la Franja de Gaza y las medidas cada día más represivas contra la población palestina en Cisjordania.
Está situación escaló especialmente cuando a fines del año pasado, en un acto de absoluta provocación el presidente de Estados Unidos, Donald Trump anunció que trasladaría su embajada de la ciudad de Tel Aviv a Jerusalén, reconociendo en los hechos a esa ciudad como capital de Israel. Si bien el reconocimiento estadounidense es un fuerte espaldarazo a las aspiraciones del gobierno israelí de que esa ciudad sea su capital "única e indivisible", choca con el resto del mundo que no la reconoce de esa manera, especialmente por las imágenes que de una punta a otra del planeta muestran la criminal política colonialista israelí.