Los trabajadores mendocinos vuelven a tener quincenas atrasadas. Ya van 3 acumuladas y en lo que va desde los primeros días de marzo hasta hoy se cuentan 17 despidos.
Miércoles 20 de abril de 2016
La situación de inestabilidad laboral que sufren los trabajadores es producto de la crisis que aduce la empresa desde el 2010 y como siempre lo primero que recortan son los salarios.
La firma el año pasado recibió un subsidio de 150 millones desde el Fondear, pero solo cubrieron parte de lo adeudado a los trabajadores quienes hoy se preguntan ¿a dónde fue a parar esa plata? porque la excusa que da la empresa para no pagarles es que no tiene dinero mientras ha seguido sacando producción y vendiendo, pero la plata no aparece.
El Grupo Canale cuenta con 5 plantas de producción de alimentos ubicadas en las localidades Tupungato, Tunuyán, y Real del Padre de la provincia de Mendoza las cuales se dedican a las conservas de tomates, frutas y mermeladas. En la provincia de Catamarca, localidad de Sumalao, se encuentra la planta de producción de legumbres y tomate dónde hoy sus trabajadores la han paralizado con bloqueo de los portones por el mismo motivo que los obreros de Mendoza desde el 5 de abril.
La quinta planta productiva está ubicada en Río Negro, en la localidad de Lamarque, donde se elabora pasta de tomate pero desde el 31 de marzo los trabajadores se encontraron con la noticia del cierre de la fábrica sumándose a esto que la empresa se niega a depositar la quincena y las indemnizaciones.
En las plantas de Tupungato y Tunuyán los trabajadores están con medidas de fuerza produciendo al 50 % o al 30 % hasta que le depositen lo adeudado, ante lo que la patronal viene con amenazas y aprietes: " trabajen al 100% y si no les gusta que se vayan".
Los temporarios no han recibido tampoco el fin de temporada por lo que los imposibilita a tomar otro trabajo y si o si se tienen que presentar en la empresa apenas lo llaman de lo contrario los hechan por abandono de tareas. "Somos rehenes de la fábrica" comenta un trabajador a La Izquierda Diario.
Otro mal que se le suma a la odisea de los trabajadores es la quita transporte y las viandas para el comedor porque la empresa no les paga a estos prestadores. Con la obra social pasa los mismo, no pueden acceder o se complica la autorización de ordenes si necesitan un estudio costoso o atenderse con ciertos especialistas.
El año pasado los trabajadores de las dos plantas del Valle de Uco tuvieron que salir a pelear para el pago de salarios adeudados con marchas en las calles del centro de Tunuyán, bloqueo de portones y presentaciones en la Subsecretaria de Trabajo conquistando así la regularización de quincenas. En esos momentos las medidas fueron acompañadas y tuvieron gran solidaridad por parte de los pobladores locales, estudiantes y otros sectores de trabajadores.
Hoy la situación vuelve a ser crítica, la falta de pago de salarios y la inestabilidad laboral de los obreros necesita de la unidad y la solidaridad de todo el pueblo del Valle de Uco. Desde La Izquierda Diario seguiremos acompañando a los trabajadores en conflicto.
