El hermano de Agustín Rossi, ex legislador y funcionario, devenido en millonario empresario de transporte, anunció inesperadamente su candidatura a intendente de la ciudad de Santa Fe.
Lunes 25 de febrero de 2019 17:56
Hace unos días se conoció la decisión de Unidad Ciudadana (UC) de no presentar lista en la interna a gobernador del peronismo santafesino y encolumnarse atrás de Omar Perotti en la interna contra María Eugenia Bielsa , una decisión que afianza el acercamiento entre Cristina y el peronismo federal en pos de “construir la unidad” a nivel nacional, pero que no cayó bien a un sector de militantes y votantes kirchneristas.
En este marco, el viernes pasado Alejandro Rossi, hermano del ex Ministro de Defensa Agustín Rossi, dio a conocer su candidatura a intendente de Santa Fe por UC, hablando, entre otras cosas, de la interna Perotti/Bielsa, avalándola y elogiando a los dos candidatos, asegurando para quien gane “el acompañamiento de todos”.
¿Quién es el candidato de Alejandro Rossi?
La carrera política de Alejandro Rossi como funcionario empieza como Subsecretario de Justicia durante el gobierno de Obeid, el aplicador de la ofensiva privatizadora que comenzó en los 90 en la provincia, y que alcanzó a Aguas Santafesinas y el Banco de Santa Fe.
Luego de esto, en 1999 Rossi pasa a ser secretario de Servicios Públicos en la Municipalidad de Santa Fe, en esa época bajo la intendencia de Marcelo Álvarez, quien terminó procesado por el crímen hídrico provocado por las inundaciones de 2003.
A partir de 2003 Rossi asume como Secretario de Seguridad en el segundo gobierno de Obeid en hasta 2005, cuando tiene que renunciar por haber sido acusado de apuntar con un arma en la cabeza a un taxista luego de un accidente de tránsito. En 2007 es electo diputado nacional y termina siendo fuertemente cuestionado por sus actividades empresariales en 2010.
De funcionario a magnate del transporte en 10 años
A partir de 2004 Alejandro Rossi, junto con el abogado Gerardo Ingaramo comienzan a desarrollar la empresa Autobuses Santa Fe S.R.L., la que hoy en día maneja líneas de colectivos en más de 15 ciudades y en el Gran Buenos Aires, y posee más de una decena de empresas subsidiarias, lo que la convierte en el quinto holding empresarial más importante del transporte en Argentina.
Mientras ocupaba el cargo de Secretario de Justicia, Rossi se convirtió en el nexo entre las empresas de colectivos y la Secretaría de Transporte de la Nación, a cargo del procesado por causas de corrupción y responsable del crimen de Once, Ricardo Jaime; en ese momento ya contaba con la empresa Autobuses Santa Fe. En 2006 Agustín Rossi aseguró que lograría que los millonarios subsidios al transporte público repartidos entre Capital Federal y Buenos Aires, lleguen a la provincia de Santa Fe, lo que omitió es que estarían destinados a la empresa de su hermano, que durante los siguientes años creció enormemente.
El “modus operandi” de Alejandro Rossi consistió en comprar empresas de colectivos que entraban en quiebra generalmente luego de conflictos gremiales y por falta de subsidios, y de resultar electa por diferentes intendentes para prestar servicios en las ciudades, sin previa licitación, monopolizando el servicio. Cuando Autobuses Santa Fe se hacía cargo del transporte no sólo no mejoraban las condiciones del servicio sino que muchas veces empeoraban, con colectivos en mal estado, obligando a los usuarios a viajar en condiciones precarias, lo que habla de una complicidad entre el empresario Rossi y las burocracias sindicales del transporte, las mismas que no tienen reparos en patotear a los trabajadores para evitar que se organicen, y de negociados con intendentes de todos los colores políticos.
Durante su mandato como diputado Rossi protagonizó un escándalo al comprar en 2009 el 30% de la empresa Río Paraná Cargas S.A. y no declararlo. En 2014 el diputado provincial por el peronismo Luis Rubeo creó un “fondo de compensación al transporte” de 200 millones, y redujo en 50% el impuesto de patente única para transporte de cargas, aumentando así el enriquecimiento del empresario del transporte. En 2018 Alejandro Rossi volvió a ser cuestionado y acusado de enriquecimiento ilícito.
Los negocios de Rossi en la ciudad de la mano de Corral
Autobuses Santa Fe posee el control de la mayoría de las líneas de la ciudad de Santa Fe y algunas ciudades cercanas, esto no habría sido posible sin las estrechas relaciones que mantiene Alejandro Rossi con el intendente José Corral, quien le otorgó la licitación del Tren Urbano, tristemente famoso por su mal funcionamiento y por haber protagonizado accidentes las primeras veces que funcionó. Fue un negocio de 20 millones de dólares que poco aportó a la vida de los miles trabajadores y estudiantes que utilizan el transporte público diariamente en la ciudad; Corral también intentó en 2017 vetar la licitación de la terminal de ómnibus y los terrenos que la rodean y darle el negocio a Rossi, lo que no se concretó por la negativa del Concejo.
La “unidad” de Cristina con empresarios al frente
Desde que asumió Macri el kirchnerismo tuvo la política de garantizar la gobernabilidad para el ajuste, aplicándolo en las provincias que gobiernan, votando las leyes macristas y desmovilizando cualquier lucha llamando a “enfrentar a Macri en las urnas en 2019”. Ahora en 2019 nos están demostrando con sus candidatos de la derecha peronista, herederos de Reutemann y Obeid, que su plan no puede ser muy diferente al de Macri. Incluso, con declaraciones y la última reunión de Kicillof con el FMI mostraron que pretenden seguir manteniendo relaciones fluidas con este organismo que cada vez más condena a las y los trabajadores a la miseria y la precarización , todo lo contrario a enfrentarlo.
Si algo nos dice la candidatura de Alejandro Rossi es que no podemos frenar el ajuste de la derecha empresarial de la mano de los empresarios ajustadores; Rossi es uno de los responsables de que hoy en día en nuestra ciudad gran parte del salario se vaya en boletos de colectivo, de que jóvenes dejen sus estudios, y de que se saque ganancias extraordinarias de un servicio público. Y ya vimos en la provincia cómo terminan años de vaciamiento y desinversión, con tragedias como las de Monticas.
Para darle una salida a los negocios en los servicios públicos que especulan con la vida del pueblo trabajador, la unidad que necesitamos no es con empresarios sino, todo lo contrario, con la independencia total de ellos. Para dar vuelta la historia, tenemos que plantear la estatización de las empresas de servicios públicos, controlados por sus trabajadores y usuarios, como plantea el Frente de Izquierda, para tener un servicio de transporte a favor de las grandes mayorías, y no de empresarios que se enriquecen a costa nuestra.