El caso de Miranda, alumna de CCH Oriente secuestrada y asesinada, es uno de los siete feminicidios que ocurren diariamente en el país.
La Izquierda Diario México @LaIzqDiarioMX
Lunes 3 de septiembre de 2018
Conversamos con Joselyn Espinosa, integrante de la agrupación de mujeres Pan y Rosas, en torno al crimen cometido contra Miranda Mendoza, estudiante del Colegio de Ciencias y Humanidades Plantel Oriente de la UNAM. Nos pone en contexto y plantea algunas salidas ante los feminicidios.
La Izquierda Diario: ¿Qué implicaciones tiene este crimen?
Joselyn: Debemos partir de que la ola de violencia en el último periodo ha ido en aumento. Los dos últimos años del gobierno de Enrique Peña Nieto (EPN), se han presentado como los más violentos en la era moderna de México, incluso en este periodo de transición entre el gobierno saliente y el entrante.
En el caso de la Ciudad de México, la zona oriente ha tenido un peso característico en la ola de violencia que, si bien ha crecido en el conjunto del conglomerado urbano, es justamente en esta parte en donde se concentra el índice mayor de sucesos delictivos y manifestaciones de violencia. La delegación Iztapalapa es una de las más trastocadas por el fenómeno de la descomposición social.
El caso de Miranda Mendoza no es ajeno a estos temas que te comento, tenemos que decir que este crimen es uno más en las cifras de feminicidios que ocurren diariamente en nuestro país. La manera en que ocurrió el crimen, así como la forma en que fue presentado por los medios de comunicación y autoridades universitarias se corresponde también con la línea de invisibilización y naturalización que busca deslindar de responsabilidad al Estado.
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LID: ¿Cuál es el papel de los estudiantes frente a los feminicidios?
J: En medio de la indignación debemos entender que no es un caso aislado. Las causas y orígenes de casos como el de Miranda se encuentran profundamente ligados a la estructura en la que vivimos, una sociedad basada en la cosificación de la mujer como una mercancía más. Después hay que responder, hay que actuar frente a este y todo caso de abuso o violencia. Para esto la organización es fundamental para pensar en las salidas y alternativas que proponga la comunidad estudiantil y universitaria.
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En los días recientes han quedado claras varias cosas. Una de ellas es que las autoridades nunca van a responder a la altura de una situación así, todo lo contrario. Se cruzan de brazos o se hacen de la vista gorda hasta que la comunidad les pida rendición de cuentas. En consecuencia con lo anterior, como estudiantes organizados en la Agrupación Juvenil Anticapitalista y en Pan y Rosas sabemos que debemos plantear nuestras propias alternativas de manera independiente. En este sentido los compañeros del CCH Azcapotzalco han mostrado una experiencia que sirve como ejemplo, levantando asambleas para discutir y resolver medidas a tomar.
El coraje del crimen no sólo perturbó a la comunidad del plantel Oriente sino al conjunto de los CCH´s, incluido Azcapotzalco, quien prepara un próximo homenaje a la compañera.
La cita para movilizarnos es este lunes a las 13:00 horas en el parque de la Bombilla, al sur de la Ciudad de México, con destino al edificio de Rectoría de la UNAM, en Ciudad Universitaria. Al finalizar la movilización realizaremos un homenaje a Miranda. No pueden dejar de hacerse oír los gritos de justicia para ella y todas las víctimas de la violencia en nuestro país.
