×
×
Red Internacional
lid bot

IMPERIO INDITEX. Amancio Ortega “dona” 300 millones después de “eludir” 600 millones en impuestos: un negocio redondo

El hombre más rico de España dona, una vez más, 300 millones de euros para equipamiento contra el cáncer. Pero su donación es puro cuento.

Carlos Muro

Carlos Muro @muro_87

Martes 21 de mayo de 2019

La candidata de Podemos a la Comunidad de Madrid, Isabel Serra, cuestionó la “generosidad” de uno de los mayores explotadores del Estado vía Twitter: “la sanidad pública no puede aceptar donaciones de Amancio Ortega. Se debe financiar con impuestos. Los mismos que esquiva y elude Inditex. 600 millones en tres años”.
El Partido Popular y Ciudadanos saltaron contra la candidata de Podemos. Albert Rivera le achacaba “que su sectarismo ideológico no le permite aceptar estas donaciones”. Cínicas palabras cuando son los partidos ultras de la defensa de la sanidad privada.

Este debate no es nuevo. En 2017 distintas asociaciones de médicos y médicas aragonesas, vascas, andaluzas, canarias o gallegas mostraron su rechazo. Además, la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP), el colectivo estatal que agrupa a todas estas asociaciones, lo dejaba claro al afirmar que “no queremos vivir de limosnas. Otra médica destacada de esta asociación ha recalcado que “parece poco serio, en un país desarrollado, que una persona rica financie la sanidad. Nosotros preferimos que se paguen los impuestos y no vivir de limosnas”.

El imperio de Amancio Ortega

Cada año la Fundación de Amancio Ortega dona como “alma caritativa” algunas migajas de su hiper fortuna. Forbes valora su fortuna en unos 71.356 millones de euros, frente a los 71.912 millones de Bill Gates.

A través de sus dos sociedades (Gartler y Partler) posee alrededor del 59,3% de Inditex, una poderosa multinacional de fabricación, distribución y venta de ropa con marcas tan famosas como Zara, Stradivarius, Massimo Dutti, Pull&Bear, Bershka o Oysho, más de 6700 tiendas distribuidas por 88 países y una plantilla directa de 140.000 trabajadores.

Inditex realiza la mayor parte de su producción en países semicoloniales a través de proveedores y subcontratas que utilizan a trabajadoras y a niños en condiciones infrahumanas. Por ejemplo, el salario medio de un obrero textil en Bangladesh (uno de los centros que utiliza Inditex) es de 31 euros al mes, con extenuantes jornadas de 12 y 14 horas diarias y nulas condiciones de seguridad.

Pero este modelo, que no es exclusivo de Inditex, se aplica también en el estado español. Talleres de decenas o centenares de costureras o trabajadoras que tienen que planchar las prendas, algunas con jornadas nocturnas y extenuantes al ritmo del just in time que les exige la multinacional, con contratos de temporada, diferentes escalas salariales o directamente en una empresa con triples tipos de ETT´s.

Empleados de los centros logísticos con diferentes tablas salariales, acoso y mobbing contra las dependientas de las tiendas de Inditex que se quedan embarazadas, contratos parciales que al final se convierten con las horas complementarias en jornadas completas por un mísero sueldo, externalización y penosas condiciones laborales de los trabajadores subcontratados que descargan los camiones que llegan a los centros logísticos, y un largo etcétera.

Según la web de la Fundación de Amancio Ortega, este trata de contribuir a “la construcción de una sociedad mejor”, pero su intención no es otra que “contribuir a una sociedad de ricos más justa”.

Amancio Ortega, a través de diferentes maniobras fiscales, ha eludido el pago de 600 millones de Euros. Ahora anuncia esta donación por 300 millones, de los cuales su Fundación podrá desgravar y recuperar hasta un tercio de ese monto por exenciones fiscales. Un negocio redondo, nada de “filantropía”.


Carlos Muro

Nació en la Zaragoza en 1987. Es estudiante de Historia en la UNIZAR. Escribe en Izquierda Diario y milita en la Corriente Revolucionaria de Trabajadores y Trabajadoras (CRT) del Estado Español.

X