Este martes el Gobierno anunció la disolución de Trenes Argentinos Desarrollo Humano (DECAHF) con la baja de 1.388 empleados. Técnicos ferroviarios y agrupaciones antiburocráticas expresaron preocupación y rechazo a la medida.
Martes 1ro de octubre 23:45
Ferroviarios realizando un curso de soldadura aluminotérmica en el CENACAF (Centro Nacional de Capacitación Ferroviaria), uno de los importantes sectores afectados por el cierre y los despidos. Foto: sitio Crónica Ferroviaria.
El inicio del mes de octubre trajo un frío anuncio del Ministerio de Economía: con un comunicado maliciosamente titulado “Cerramos la empresa estatal DECAHF ahorrando 42.000 millones de pesos por año” esta cartera del Gobierno de Javier Milei formalizó el anuncio del cierre de un área del ferrocarril que redunda en despidos masivos de personal, porque afecta a 1.388 empleados. En momentos en los que el transporte ferroviario está atravesando una situación de desfinanciamiento, aumentos de tarifas impopulares, y recortes que traen como consecuencias fallas como las que provocaron el choque de trenes en el puente de la estación Palermo de la línea San Martín, cuando una forma de comenzar a recuperar y poner en condiciones este transporte plantea suministrar herramientas y materiales y proveer de personal de sectores con carencia de recursos, el Gobierno se jacta de profundizar el ajuste como parte de una gestión racional.
En conferencia de prensa, el secretario de Transporte Franco Mogetta anunció que “hemos tomado la determinación de cerrar DECAHF, una empresa ferroviaria que no operaba trenes y tenía funciones duplicadas en las demás empresas”. Sin embargo, personal técnico ferroviario especializado consultado por La Izquierda Diario lo desmiente: “Para dar un ejemplo, de DECAHF depende el gerenciamiento del Taller Junín donde se emplea a casi 70 personas y que, por suerte, hoy labura a pleno para varios operadores (entre ellos algunos privados) que hacen ingresar dinero a la empresa”. Y detallando algunas áreas afectadas con esta determinación arbitraria del Gobierno, explica que “Además del museo, el tren itinerante, el archivo, el CENACAF de Temperley que es un importante centro de capacitación de todo el personal ferroviario, los simuladores de manejo, todo esto queda a la deriva. Son recursos muy necesarios”, aportando como conclusión que “Si es cierto que la gestión anterior ensució mucho a la empresa con la parte política partidaria y es probable que se hayan gastado recursos en pavadas, pero la culpa no es de la gente”.
Aunque se presume que un sector del personal cesanteado sería reubicado en Ferrocarriles Argentinos Sociedad del Estado (FASE), la noticia generó preocupación en todo el ámbito ferroviario y un importante repudio de sectores opositores a la conducción de los principales gremios del sector (que no expresaron ninguna disconformidad con los despidos). El Cuerpo de Delegados de la línea Sarmiento y la seccional GBA Oeste de la Unión Ferroviaria que encabeza Rubén Pollo Sobrero emitió un comunicado rechazando los despidos a la vez que sentencian categóricamente que “NO SOBRAN FERROVIARIOS, FALTAN TRENES”.
Por su parte, la agrupación ferroviaria Naranja hizo circular el siguiente comunicado:
NO A LOS DESPIDOS EN EL FERROCARRIL
Hoy los medios replicaron el anuncio de voceros y ministros del gobierno que salieron a informar como un triunfo el despidos de miles de trabajadores y trabajadoras ferroviarias. Hace pocas semanas atrás el gobierno había llevado adelante cientos de despidos en Trenes Argentinos Capital Humano (Decahf), ahora el ataque se profundiza disponiendo directamente el cierre de dicha empresa despidiendo a 1388 empleados más, mientras que según algunos medios otros 400 trabajadores serán relocalizados en Ferrocarriles Argentinos Sociedad del Estado, nada se sabe sobre el futuro del resto de las familias que hoy quedarían en la calle.
Claramente la motosierra de Milei se profundiza, pero lo hace con el aval implícito de los gremios ferroviarios que ni siquiera aún se han pronunciado contra los mismos.
En el ferrocarril no sobran trabajadores, faltan trenes y mejor calidad de servicio y condiciones laborales. Hoy fue Decahf pero luego sabemos que intentará aplicar el plan motosierra en el resto de los ferrocarriles con más despidos, tarifazos y privatizaciones.
Por eso desde la Naranja Ferroviaria insistimos en impulsar la mayor unidad y coordinación con todos lxs trabajadorxs y usuarixs y planteamos que no podemos permitir ningún despido.
Ante este enorme ataque a las y los ferroviarios exigimos asambleas para discutir y organizar cómo enfrentamos el ajuste de Milei, que plan de lucha y movilización es necesaria para pararle la mano.