Luego de la masacre de Florida, la discusión sobre el control de armas volvió a encenderse en Estados Unidos generando una polemica particular la propuesta del propio presidente norteamericano Trump, quien propone que los profesores estén armados como forma de enfrentar los tiroteos.
Viernes 23 de febrero de 2018
Trump hizo la propuesta al recibir en la Casa Blanca a un grupo de afectados por tiroteos en centros educativos en Estados Unidos, entre ellos seis estudiantes del instituto de Parkland (Florida) donde hace una semana murieron 17 personas en un ataque armado
Según Trump "Hay algo que se llama portar armas de forma oculta, y que solo funciona cuando tienes a gente entrenada para ello", y agregó que "Los profesores tendrían un permiso especial, y (la escuela) ya no sería una zona libre de armas" de la que puedan aprovecharse los "maníacos"
Trump opinó que, dado el tiempo que puede tardar la Policía en llegar a una escuela al recibir una alerta de tiroteo, los profesores debidamente entrenados podrían detener estos sucesos "muy rápidamente". También planteó que podría enviarse a las escuelas a "profesionales, que podrían ser marines", y que eso "podría resolver el problema".
Trump escuchó duros testimonios de los supervivientes o familiares de víctimas de varios tiroteos, y su propuesta de armar a los profesores recibió críticas de algunos de los asistentes.
"Mi esposa es profesora y ella le diría que los maestros ya tienen suficientes responsabilidades como para además tener la enorme responsabilidad de la fuerza letal que puede acabar con una vida", dijo Mark Barden, cuyo hijo de 5 años Daniel fue asesinado en el tiroteo de Newtown (Connecticut) en 2012.
El negocio de la venta de armas
Lo que mas sorprende de Trump, es que su propuesta no toca lo que a todas luces es el contenido de fondo del problema, la venta de armas.
Bajo la ley federal de EE.UU., la edad mínima para comprar un arma de fuego son 21 años si es una pistola y 18 si es un rifle, aunque algunos vendedores sin licencia las pueden suministrar a personas aún más jóvenes. El autor del tiroteo en Florida, Nikolas Cruz, tiene 19.
Y ante este debate, la solución de Trump es mantener este lucrativo negocio e incluso promoverlo a un área donde no había llegado como lo son las escuelas armando a los profesores, una propuesta que tiene sentido considerando que Trump también tiene vínculo con la Asociación Nacional del Rifle y el negocio de 50 billones de dólares anuales que mueven.
Sin embargo Trump sólo es una cara visible de un vasto negocio que tiene muchos más representantes en el Estado como quedó demostrado en el reciente debate (miércoles 21) realizado por CNN donde participaron familiares de personas asesinadas en la masacre de Florida, junto con maestros y estudiantes sobrevivientes que interpelaron a distintos senadores, y donde el momento más intenso se dio cuando uno de los jóvenes le pidió a Marco Rubio, senador republicano por Florida, que dijera públicamente que no aceptará “una sola donación de la Asociación Nacional del Rifle (NRA por sus siglas en inglés)”, a lo que Rubio respondió cínicamente “Haré lo que pienso que es justo”.
El estudiante fue ovacionado y se mantuvo firme: “¿En memoria de las 17 víctimas no puede pedirle al NRA que mantenga su dinero fuera de su campaña?”, insistió el estudiante, a lo que Rubio respondió: “No, no”.
Las armas de las masacres en los Estados Unidos se fabrican en las mismas plantas industriales que producen las armas cuya venta avalan las autoridades de ese país tanto a los ejércitos mexicano y centroamericanos como al crimen organizado, siendo una de las mayores industrias en términos de ganancias, quienes se han opuesto sistemáticamente una y otra vez al control que reaparece cada vez que ocurre una masacre.