Tras ser asaltada, Rosa Analí Aparicio Vega fue asesinada el pasado miércoles en Tultitlán, Estado de México, mientras se dirigía al hospital en el que realizaba su internado.
Agrupación Juvenil Anticapitalista @AgJuvAnticapMx
Jueves 27 de julio de 2017
Analí era estudiante de Medicina en la FES Iztacala. En un comunicado la UNAM condenó los hechos y exigió el esclarecimiento de lo acontecido.
Esto se suma a los múltiples casos de violencia, que han dejado lamentables cifras de asesinatos a estudiantes de la UNAM de diferentes escuelas y facultades, y que además se enmarca en una creciente escalada de violencia y homicidios –más de 12 mil en el primer semestre de 2017, según el Semáforo Delictivo– en el conjunto del país.
Las autoridades de la FES demandaron “reforzamiento de la seguridad” en las calles y el transporte. Sin embargo, preocupa este llamado dado que este tipo de medidas como el aumento de policías o la militarización no han solucionado el tema de violencia; por el contrario han agravado el problema, en especial en el Estado de México siendo una de las entidades con mayor cifras de feminicidios.
Muy probablemente las autoridades utilizarán esto para aumentar las medidas securitaristas, con instalación de cámaras, mayor presencia de Vigilancia UNAM, o de elementos de la policía en la zona. Todo con miras a mantener vigilados a los sectores de trabajadores, estudiantes y académicos que se organizan.
De cara al inicio de un nuevo periodo escolar, es fundamental abrazar la organización y hacer un amplio llamado a la comunidad universitaria para discutir una salida que ponga fin a esta situación. Es necesario que los tres sectores que componen la universidad nos organicemos para garantizar nuestra seguridad de manera independiente a las autoridades.
Graue y el gobierno de Peña Nieto harán lo posible para perpetuar la actual situación en la que se encuentra sumida la universidad y el país, donde la violencia se cobra la vida de estudiantes, mujeres, jóvenes y trabajadores a diario.
Enfrentar dichas medidas, recuperando la tradición histórica del movimiento estudiantil, así como defender la educación pública y gratuita sigue siendo una tarea indispensable en el actual contexto nacional.