Salvador Olmos García, locutor de una radio comunitaria Tuu Ñuu Savi fue hallado muerto en Huajuapan de León, en Oaxaca. Familiares y colegas aseguran que se dirigía a reforzar la guardia en su centro de trabajo ante la posibilidad de un desalojo, cuando fue “detenido, torturado y atropellado” por elementos de la Policía municipal local.
Lunes 27 de junio de 2016
La mañana del domingo, fue hallado el cuerpo de Salvador Olmos García, locutor de una radio comunitaria en el municipio de Huajuapan de León, en Oaxaca. Según atestiguan familiares y compañeros de trabajo, por la madrugada había habido un llamado de alerta en la radio en donde el joven laboraba, ante la presencia de camionetas de policía cerca de donde se sostienen algunas barricadas por el magisterio y la población.
Ante el peligro de un intento de desalojo, Salvador acudió y, según sus compañeros, fue detenido en el camino.
Otra vez la policía asesina
Familiares de Salvador aseguran que hay fotografías y videos en donde, tras detenerlo, elementos de la policía municipal de Huajuapan golpean al joven. Así mismo, presumen que fue torturado, debido a que cerca del cuerpo fueron halladas rastas, mismas que el comunicador usaba en el cabello y las cuales, según esta versión, habrían sido cortadas por los policías.
Este ataque se suma a la cadena de agresiones no sólo contra periodistas y reporteros gráficos, sino también en contra de proyectos independientes al poder, como las radios comunitarias y diversos medios libres. En Oaxaca, la toma de los medios de comunicación y el uso de frecuencias radiales en 2006, durante el proceso de la APPO, fue crucial. Además de fungir como altavoz para reproducir noticias y llamados, sirvió para ofrecer al pueblo oaxaqueño en lucha una forma de responder a la campaña de miedo, desprestigio y criminalización que el gobierno emprendió, haciendo uso de sus lacayos en televisión, prensa escrita y radio.
Desde La Izquierda Diario México repudiamos este ataque y exigimos se esclarezca el crimen que acabó con la vida de Salvador Olmos, así como castigo a los responsables y cese al hostigamiento en contra de trabajadores de la comunicación y medios independientes.
