La liberación de detenidos palestinos durante la tregua negociada en los últimos días dejó en evidencia el mecanismo que utiliza Israel para disciplinar y castigar. 98 de los 150 palestinos y palestinas liberadas nunca habían sido acusados. La detención administrativa que utiliza Israel le permite encarcelarlos indefinidamente y sin causas.
Martes 28 de noviembre de 2023 12:53
98 de los 150 palestinos liberados en los últimos días nunca fueron acusados. Ese es el dato duro que deja al desnudo el mecanismo que utiliza el Estado de Israel como disciplinador para aplicar su política colonialista y de apartheid en Cisjordania y Jerusalén este.
La mayoría de los palestinos liberados por las autoridades israelíes en los últimos días como parte de un acuerdo de intercambio de prisioneros nunca fueron acusados, según un informe de CNN del martes.
De los 150 prisioneros palestinos liberados, 119 eran niños, mientras que los 31 restantes eran mujeres.
Israel utiliza permanentemente la detención administrativa contra los palestinos, un procedimiento que permite a las autoridades israelíes retener a los prisioneros indefinidamente sin presentar cargos contra ellos ni permitirles ser juzgados.
Según el grupo israelí de derechos humanos B’Tselem, hay alrededor de 1.300 palestinos en detención administrativa, incluidos niños de entre 16 y 18 años. Pero a este número hay que sumar los encarcelados en lás últimas semanas, un número que se multiplicó mientras que Israel bombardeaba en Gaza y reprimía, perseguía y encarcelaba palestinos en Cisjordania.
Como señaló recientemente en un comnunicado Heba Morayef, directora regional de Amnistía Internacional para Medio Oriente y el Norte de África "La detención administrativa es una de las herramientas clave a través de las cuales Israel ha impuesto su sistema de apartheid contra los palestinos".
Así lo explica B’Tselem en su sitio: "Israel utiliza habitualmente la detención administrativa y, a lo largo de los años, ha puesto tras las rejas a miles de palestinos durante períodos que van desde varios meses hasta varios años, sin presentar cargos contra ellos, sin decirles de qué se les acusa y sin revelarles las supuestas pruebas. o a sus abogados".
Mediante la detención administrativa se mantiene a una persona sin juicio sin haber cometido un delito, con el argumento de que planea infringir la ley en el futuro. Como esta medida tiene carácter preventivo, no tiene límite de tiempo. La persona es detenida sin procedimiento judicial, por orden del comandante militar regional, con base en pruebas reservadas que no le son reveladas. Esto deja a los detenidos indefensos: enfrentando acusaciones desconocidas sin forma de refutarlas, sin saber cuándo serán liberados y sin ser acusados, juzgados o condenados.
Este tipo de detenciones creció exponencialmente los últimos años y particularmente el último período, coincidiendo con la llegada al poder de la coalición de Gobierno más de derecha de la historial israelí de la mano de Benjamin Netanyahu.
Desde ese momento se multiplicaron también los ataques de parte de los colonos israelíes en Cisjordania que llevan a acabo pogromos sobre poblados palestinos con el objetibo de aterrorizar y expulsar a su población. Estas acciones se llevan a cabo bajo la mirada y a veces en común con el Ejército israelí, e incluyen persecusiones, abusos, torturas y detenciones masivas, además del asesinato de palestinos.
Durante la primera y la segunda intifada, Israel mantuvo a cientos de palestinos en detención administrativa, y la cifra superó la marca de 1.000 varias veces en 2003 (durante la segunda intifada). Sin embargo, el uso generalizado de esta medida extrema no se limita a esos períodos: desde marzo de 2002, no ha pasado un solo mes sin que Israel mantenga al menos a 100 palestinos en detención administrativa.
La detención administrativa se convierte así en una más de las herramientas de castigo colectivo que aplica Israel para mantener su políitca colonial y de apartheid sobre el pueblo palestino.