Atacantes mataron a un cura e hirieron de gravedad a un rehén en una Iglesia en Francia. Desde el Gobierno ya hablan de “atentado” y Hollande declaró que fue cometido “por dos terroristas del ISIS”
Martes 26 de julio de 2016 10:20
Dos atacantes mataron a un cura con una arma blanca e hirieron de gravedad a otro rehén el martes en una iglesia en Normandía, al norte de Francia, antes de ser asesinados por la Policía.
El ataque ocurrió durante la misa matutina en la parroquia de Saint-Etienne, ubicada al sur de Ruan. Cinco personas fueron tomadas de rehén.
Hollande se desplazó a la localidad de Saint-Etienne-du-Rouvray junto al ministro del Interior, Bernard Cazeneuve. El mandatario habló abiertamente de “atentado” y declaró que fue cometido “por dos terroristas que decían ser de ISIS”.
Según el diario Le Parisien, los dos asaltantes llegaron a la iglesia de Saint Etienne du Rouvray poco antes de las diez. Entraron por la puerta trasera durante la misa y a continuación cerraron la puerta. Una vez allí, retuvieron durante cerca de una hora al párroco, dos monjas y dos personas que asistían a la misa. Una tercera monja logró escapar y avisar a las autoridades.
Los dos atacantes, según la agencia Amaq, vinculada al ISIS, eran “soldados del Estado Islámico”.
Declaraciones del Vaticano
El Papa, según el portavoz de la Santa Sede, expresó “la condena más absoluta de toda forma de odio y reza por las personas agredidas”. Según Lombardi, Jorge Mario Bergoglio y sus colaboradores están especialmente consternados porque “el bárbaro asesinato del sacerdote y la agresión a los fieles” se ha producido “en una Iglesia, un lugar sagrado en el que se anuncia el amor de Dios”.
Atentados en Europa, y después…
Este ataque se da a dos semanas del atentado en Niza durante los festejos del día de la Bastilla, luego de los atentados en Alemania y casi en simultáneo con el ataque, todavía no muy claro, en un hospital de Berlín en la madrugada del martes.
Después del atentado en Niza, Hollande había escalado en las medidas “securitarias” y había ampliado el Estado de Emergencia. Ahora, luego de estos ataques seguramente profundizará su discurso racista y de confrontación con el mundo musulmán para reforzar el clima de “unidad nacional” y seguir avanzando contra las libertades democráticas del pueblo francés y reforzar acciones militares en Siria e Irak.
De esta manera alimenta una espiral de violencia que refuerza el odio antinmigrante de las variantes de derecha europea. Y a su vez refuerza la violencia de los fenómenos aberrantes como el Estado Islámico. Así, la política de Hollande lleva al desastre.
