Gracias a un acuerdo entre Cambiemos y el Frente Renovador, ayer se logró dictamen en las comisiones de Diputados. Fuertes críticas desde el Frente de Izquierda.
Viernes 30 de septiembre de 2016
Fotografía: DyN
Ayer el Gobierno nacional logró avanzar en el proyecto de reforma electoral que viene impulsando desde hace varios meses.
Lo logró gracias a un acuerdo con el Frente Renovador. Esto le permitió obtener un dictamen en el plenario de comisiones que se desarrolló ayer en el edificio anexo de la Cámara de Diputados de la nación. Ese dictamen será elevado para su discusión en la cámara.
El acuerdo resultaba tan evidente que no habían terminado las intervenciones cuando ya había empezado a circular el dictamen para su firma entre los diputados presentes.
El Gobierno nacional viene presentando el proyecto como el inicio de un proceso de modernización, proceso que tiene como principal objetivo la implementación del sistema de boleta única electrónica para la elección.
Sin embargo, esto se halla muy lejos de ser así. Esto pudo verse en las críticas que se hicieron desde la izquierda y otros sectores en la reunión de ayer.
Restricciones al elector
Cambiemos, con apoyo del Frente Renovador, logró imponer en el dictamen que solo se podrá elegir a una fuerza política en las PASO. Esto, en los hechos, liquida el llamado “corte de boleta”.
Myriam Bregman, del PTS-Frente de Izquierda, criticó esta restricción porque empeora el sistema actual, denunciando que “esto significa un cercenamiento en regla a los derechos democráticos del elector. Las PASO no son unas primarias voluntarias, donde en una interna votan los afiliados y simpatizantes de cada agrupación, sino que son elecciones obligatorias, que políticamente ya se han constituido como una suerte de primera vuelta electoral”.
La diputada señaló que así “se priva al elector que quiere votar a una categoría legislativa a una agrupación para que pase ese umbral en esa categoría (voto democrático) ya no lo va a poder hacer”.
No fueron estas las únicas críticas desde la izquierda. Bregman también denunció la continuidad del piso proscriptivo del 1.5%; el hecho de que el sistema de pantalla que se propone solo permitiría que figuren el nombre de solo los tres primeros candidatos a diputados o diputados Mercosur (un escandaloso sistema que empeora las listas sábanas); los límites del sistema de votación con boleta electrónico que no han sido previstos por quienes impulsan el proyecto, entre otras cosas.
Bregman también fue crítica del hecho de que la reforma que se propone no incluya la posibilidad de que los y las inmigrantes puedan sufragar. “No incorporar el voto de los inmigrantes se trata de un claro hecho de discriminación, y por eso insistimos en el tratamiento de nuestro proyecto para que el que viva y trabaje en la Argentina pueda votar, no importando su origen” afirmó la legisladora de izquierda.
Paridad de género en cuestión
“Es una lástima que el tema de la paridad o el cupo femenino lo hayan metido en este engendro de proyecto. Nos hubiera gustado discutirla por separado, como lo planteamos en numerosas reuniones” lanzó Bregman.
Desde esa banca se impulsan un proyecto que contemple que las listas tengan que ser conformadas por el 50% de mujeres, como mínimo. Esto no es un detalle menor, sino esencial en el proyecto planteado por el PTS-Frente de Izquierda.
Redacción
Redacción central La Izquierda Diario