Según los peritos que investigan el caso las balas que asesinaron a la concejala de Río de Janeiro pertenecían a un lote vendido a la Policía Federal de Brasilia en 2006.
Viernes 16 de marzo de 2018 14:53
Las balas con las que asesinaron a la concejala de Río de Janeiro, Marielle Franco, eran parte de un lote de municiones vendidos a la Policía Federal de Brasilia en 2006, de acuerdo con la pericia de la División de Homicidios, informó este viernes el canal de televisión RJTV.
De acuerdo con el informe, la investigación que realizaron el jueves los peritos señala que la Policía Federal de Brasilia compró estas municiones a la empresa brasileña CBC el 29 de diciembre de 2006, con las facturas número 220-821 y 220-822.
Según el portal OGlobo municiones de uno de los lotes que coinciden con el asesinato de Marielle, ya habían sido usadas en lo que fue la mayor matanza de San Pablo, en agosto de 2015, donde murieron 23 personas.
Mas temprano este viernes el fiscal José María Panoeiro, coordinador criminal del Ministerio Público Federal en Río de Janeiro, había dicho que los elementos de investigación sobre la muerte de la concejala Marielle Franco apuntan a un crimen realizado por policías o "agentes milicianos", siendo que las milicias pueden ser formadas por policías militares, civiles, bomberos o integrantes de las fuerzas armadas.
Para el fiscal la forma en la que se dio la persecución y el hecho de que cuatro de los disparos hayan dado exacto en la cabeza de la concejal, hace improbable que el crimen haya sido cometido por traficantes o asaltantes, aunque el fiscal dice que no se pueden descartar otras posibilidades.
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Marielle Franco había denunciado los excesos de la policía en las favelas días antes de morir y se había pronunciado abiertamente en contra de la intervención del Ejército en la seguridad en Río de Janeiro, que cumple un mes.
Su muerte conmocionó al país y cientos de miles de personas salieron a las calles de las principales ciudades para pedir justicia y reclamar el fin de la intervención militar en Río decretada por el golpista Michel Temer.
El Gobierno insistió el jueves en que mantendrá al Ejército en Río mientras organismos internacionales, como Naciones Unidas, exigieron una investigación "completa, transparente e independiente" sobre las circunstancias de la muerte de Franco.
No parece que se pueda confiar en que la justicia vaya hasta el final en la investigación del caso, sobre todo si se reconocen motivaciones políticas y la policía está involucrada en el hecho. La fuerza parece estar entonces en las calles, como en las multitudinarias movilizaciones que recorrieron las calles de las principales ciudades el jueves. Se debería multiplicar el grito en memoria de Marielle que se escuchó en todo Brasil en lugar de callarlo, como querían sus asesinos.