Decenas de miles de personas acompañaron a Mas, Ortega y Rigau en esta semana del proceso judicial. Amplio apoyo al referéndum.
Lunes 6 de febrero de 2017
Foto: EFE
Desde antes de las 8 de la mañana ya habían llegado al lugar de la concentración varios miles de personas. Más de 50.000 personas se apuntaron para ir a la manifestación. El Passeig Lluís Companys se llenó como nunca, no había lugar ni en las calles de los aledaños. Se entonaban gritos de independencia, "Els segadors" y otras canciones. Ondeban ante un fuerte viento muchísimas estelades. Carteles pidiendo urnas y votar.
Asistieron representantes del Govern catalán con Puigdemont a la cabeza, obviamente. Los acusados salieron junto al President, la Presidenta del Parlament desde el Palau de la Generalitat e hicieron el camino hacia los Tribunales para enfrentar el juicio. Por detrás de ellos les arropaban los actuales consellers y los de aquel entonces. En la misma Plaça Sant Jaume fueron saludados con gritos de independencia.
Varios centenares de personas realizaron el camino enfilando por la calle Jaume I. Alternaron aplausos y gritos de independencia y President durante la caminata. La comitiva de varios centenares fue aumentando rápidamente durante el trayecto. Más de una hora por las calles del Barrio Gòtic y el Born.
Mientras pasaban al costado de la Iglesia de Santa María del Mar entonaron Els segadors y más gritos de independencia. Estaban en el Fossar de les Moreres. Gritos de Visca Catalunya e Independencia sirvieron para continuar el camino.
Hicieron un camino muy simbólico, pasaron por el Centre Cultural del Born, donde están los restos de aquella Catalunya que enfrentó a los Borbones. Aquí entonaron la popular canción de Lluís Llach, La estaca. En el Arc de Triomf también han hecho otra parada para las fotos. De ahí el paseo que ya tenían delimitado para entrar al Palau de Justícia.
El grito de “Ni un pas enrere” (ni un paso atrás) inició la caminata por el Passeig Lluís Companys. Senyeres y estelades ambientaban todo el paseo y la comitiva que acompañó a los acusados. Tampoco faltó el clamor de “Independencia”. Los autobuses llenos de personas, seguía llegando a lo largo de la mañana.
La última parada antes de entrar al Tribunal Superior de Justícia. Delante de la palabra “DEMOCRACIA”. Había un mensaje grabado que nadie escuchaba. La multitud insistía “Ni un pas enrere”. La estampa del paseo lleno, que no cabía ni un alfiler o como dicen los catalanes “ple de gom a gom”. A capela la gente comenzó a cantar La estaca, como se hiciera en la lucha antifranquista. Los tres imputados saludaron desde las escalinatas aplaudiendo a la multitud.
El Estado español niega o ningunea la movilización de centenares y centenares de miles durante estos años por el derecho de autodeterminación.
Un Referéndum convocado teniendo en contra el Estado español y sus instituciones sólo podrá realizarse basado en la más amplia movilización social. Algo para lo que no se prepara Junts Pel Sí. El Referéndum no pasará de ser una convocatoria, si no es garantizado por los trabajadores y el pueblo catalán, aliados a los trabajadores y pueblos del resto del Estado.
