El viernes 10 vecinos de la villa Rodrigo Bueno se movilizaron a la Jefatura de Gobierno y a la Legislatura porteña para exigir justicia por la muerte de Gastón y la urbanización del barrio.
Sábado 11 de abril de 2015
Hace un mes, un joven de 13 años cayó a un pozo ciego y falleció. La terrible muerte, además de conmover a los vecinos, desnudó aquello que venían denunciando hace años; la precariedad que recae sobre un barrio que se fue poblando a ritmos acelerados por la necesidad profunda de vivienda de tantos trabajadores y jóvenes de la ciudad. A pocos metros el despampanante Puerto Madero con sus lujosas viviendas deshabitadas, los vecinos focalizaron su bronca en nueva fuerza y realizaron la movilización “en búsqueda de respuestas por parte de los responsables políticos”, como declararon en su comunicado.
La urbanización de la Rodrigo Bueno, así como de tantas otras villas, viene siendo negada por el gobierno de la Ciudad, a pesar de que varias de ellas ya han sido votadas. Aquel responde en cambio con represión y desalojos, en conjunto con el gobierno nacional, como hemos visto recientemente en el barrio Papa Francisco, además de con proyectos superpuestos que benefician a grupos empresariales.
En la movilización sostuvieron: “¡Con urbanización hoy estaría Gastón!”, acompañando a la familia del niño y a los vecinos y vecinas del barrio que reclaman por viviendas dignas. La exigencia es la urbanización inmediata del barrio Rodrigo Bueno y de todas las villas de la ciudad, para que no haya que lamentar nunca más muertes evitables como la de Gastón.