Fue en la tarde del martes en varias ciudades del país. Reclamaron por la prórroga de las becas y mejores condiciones de trabajo durante la pandemia.
Miércoles 1ro de julio de 2020 10:21
En una asamblea virtual desarrollada el 22 de junio, confluyeron becarios de sectores muy diversos como Conicet, CIC, UTN, universidades nacionales (entre ellas La Plata y Buenos Aires), Jóvenes científicxs precarizadxs (JCP) y la Red de Afectades, entre otros. Allí decidieron manifestartse el día martes en varias ciudades a lo largo del país para visibilizar sus reclamos más urgentes y fundamentales, transversales en todos los organismos.
Entre ellos exigen la prórroga de las becas que finalizan en un mes que, de no ser así implicaría despidos en un momento laboral especialmente difícil. También exigen la prórroga automática por un año de las becas, empezando por las que finalizan en 2021. Esto se relaciona con que muchos no pueden desarrollar sus actividades normalmente por la pandemia.
Acompañaron la movilización con una campaña en las redes sociales reclamando:
ningún despido en Conicet, UNLP u otros organismos descentralizados de Ciencia y Tecnología; suspensión momentánea/sujeta a negociación de las convocatorias a becas e ingreso a carrera de investigador científico sin afectar los cupos correspondientes a 2020. Que en ningún caso las prórrogas impliquen una reducción en el número de becas previstas para el año 2021; licencias por cuidados, maternidad y enfermedad para todes les becaries que las requieran y que las mismas se traduzcan posteriormente en prórrogas automáticas para esos becaries; urgente recomposición salarial para todos los escalafones del sistema científico; aumento de la cantidad de becas de Finalización de Doctorado de Conicet y derechos laborales para todes les becaries de investigación.
En la ciudad de La Plata, la movilización partió desde el CCT Conicet La Plata hacia la presidencia de la Universidad, denunciando la falta de respuestas de la UNLP a la exigencia de prórrogas, sumado al recorte del 25% en las becas otorgadas este año.
Si bien estos son reclamos más urgentes, se suman a la precariedad estructural que ya padecen los y las becarias en su trayectoria académica.
En comunicación con La izquierda Diario una becaria de la agrupación “Becaries UNLP” nos contó: “Los organismos que te emplean no tienen responsabilidad sobre tu continuidad laboral, que en este contexto es mucho más grave. La investigación te lleva a hiperespecializarte y esto implica un gran riesgo de desempleo. Cuando se te termina una beca, si no quedás por fuera, seguís produciendo y formándote para mejorar el CV y poder entrar al año siguiente, desarrollando un trabajo paralelo o contando con ayuda familiar. No te echan del laboratorio, del equipo o el instituto; simplemente dejás de tener un salario. Seguís aportando a tu patronal, que es cada institución. Publicás como parte de un equipo de investigación y de esta manera haces crecer a la institución, que aumenta su prestigio.”
"El trabajo de investigación acción o investigación comprometida con poblaciones con sus derechos vulnerados conlleva riesgos psicosociales para les becaries, riesgos que no están contemplados por las instituciones que nos emplean. En un contexto de pandemia, estos riesgos se incrementan, por nombrar un ejemplo: la preocupación constante por el bienestar y la supervivencia de las poblaciones con las cuales trabajamos de manera colaborativa tiene un impacto en nuestra salud mental. En las instituciones de investigación que nos financian se invisibilizan estas situaciones y por lo tanto se privatiza cómo se gestionan esos riesgos, cada uno debe autogestionar los riesgos psicosociales del trabajo, yendo al psicólogo si puede pagarlo, hablándolo con algún compañere, etc", agregó la becaria.
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