El viaje a Canadá hace algunas semanas de Gabriel Boric no sólo fue para afianzar lazos en general con el gobierno de Justin Trudreau, sino que tenía como objetivo ofrecer mercancía a un país que ya posee concesiones en Chile con denuncias por vulneración de derechos y el medioambiente.
Miércoles 6 de julio de 2022
La decisión de la venta de 34 yacimientos mineros de Codelco al gobierno Canadiense, que se encuentran entre la región de Tarapacá y del Maule, se tomó antes del viaje de Boric a Canadá, lo cual -al parecer- se tomó entre 4 paredes entre el Presidente del directorio de Codelco Máximo Pacheco y Gabriel Boric. El objetivo es lograr recursos extranjeros para el Estado vendiendo yacimientos que actualmente no son explotados por Codelco.
Luego de promesas de campaña que plantearon la no privatización de Codelco, es decir, que se mantendría como una empresa estatal, a puertas cerradas decide la venta de estos yacimientos mineros. Luego de su viaje a Canadá, viajó a dicho país el subsecretario de Minería Willy Kracht, militante de Convergencia Social el cuál arribó a Toronto para concretar el plan de privatización y explotación de dichos yacimientos del Gobierno. Su itinerario se basó en la exposición de la explotación de todos estos yacimientos a inversionistas canadienses, con la “invitación de asociarse a Codelco” en la feria de proyección minera más grande del mundo (PDAC), donde ofreció 21 proyectos de cobre, 8 de oro, 4 polimetálicos y 1 de hierro.
Una medida de profundización del saqueo
Una de las grandes herencias de la Dictadura y de los 30 años que fueron impugnados durante la rebelión de Octubre del 2019, fue la privatización de los derechos sociales y recursos naturales que ingresaron a la lógica neoliberal del mercado, quedando en las manos de unos pocos que se han convertido en multimillonarios como es el caso de la familia Luksic, o han explotado los bienes naturales como los diversos capitales extranjeros tanto de EE.UU, Inglaterra y Canadá.
Hoy más que nunca en medio de un contexto económico que desfavorece al pueblo trabajador, por medio de una inflación que no da tregua y solo afecta a quienes han recibido los embates de la crisis, mientras los grandes empresarios continúan amasando sus ganancias. En vez de contribuir a profundizar el saqueo de los bienes naturales, es necesario pelear por la perspectiva de nacionalizar los recursos naturales, y que estos sean administrados por sus propios trabajadores en conjunto con las comunidades locales, para frenar la contaminación y el saqueo empresarial.
Elizabeth Fernández
Profesora
