Con un aumento acotado del presupuesto de 4,2% por debajo de la proyección de inflación que se ubicará en torno al 6% para 2023, este jueves el presidente Boric presentó el proyecto de presupuesto con foco en una mayor inversión pública y seguridad. Para 2023 se prevé una recesión y caída histórica de la inversión. Boric planteó que más de la mitad del aumento es para financiar la PGU. No hubo grandes anuncios en ayudas sociales.
Viernes 30 de septiembre de 2022
Foto: Prensa presidencia
Durante la noche de este jueves y en cadena nacional, el presidente Gabriel Boric presentó los ejes principales de la ley de presupuesto 2023 que ingresará al Congreso este viernes. Se trata de la ley anual más importante del gobierno y donde se señalan sus prioridades de gasto. Pese al anuncio de Boric de que se trataría de un presupuesto "contra cíclico", lo cierto es que el crecimiento de 4,2% se ubicará por debajo de la proyección de inflación realizada por el Banco Central (6,1%) para el próximo año (este año se ubicará en torno al 11%). Así, el proyecto que debe tramitarse en los próximos 60 días, tendrá un efecto acotado para hacer frente a la recesión que se pronostica para 2023 y cuyas consecuencias ya se comienzan a sentir. Para tener en consideración, el gasto fiscal este 2022 bajará 25% según pronostica Hacienda, es decir, que el crecimiento de 4,2% para el próximo año estará muy por debajo del gasto fiscal de 2021 y todo, con un escenario recesivo. Este jueves, el INE señaló que durante agosto se destruyeron más de 7 mil empleos, la primera baja en 15 meses.
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En su discurso Boric mencionó que el proyecto tendrá tres ejes: i) Promover "el crecimiento, la inversión pública y privada, y la generación de empleo"; ii) Seguridad pública; y iii) Seguridad social. El presupuesto se "expandirá en un 4,2% el gasto para el año 2023 en relación al presupuesto anterior, y está pensado para resolver concretamente los problemas de las personas con una sólida base de responsabilidad fiscal".
En cuanto a la inversión pública, detalló que se destinarán $1,6 billones de pesos, unos US$1.660 millones de dólares (la mitad del plan Chile Apoya), construcción de obras públicas generando unos 200 mil empleos. También anunció que se aumentará "en un 6,2% los fondos de inversión municipal y en un 2,9% la inversión regional que se entrega directamente a los Gobiernos Regionales". De los fondos destinados a inversión pública, cerca de un cuarto ($403 mil millones) se destinarán al plan Buen Vivir (Araucanía y provincias de Arauco y Biobio en la VIII Región). En torno a ciencia y tecnología, Boric anunció un aumento de 9,6% nominal (3,5% real), algo que calificó como "histórico".
En torno al segundo eje de seguridad, anunció que el "presupuesto asociado a Orden Público y Seguridad aumentará en 164 mil millones de pesos, es decir, un 4,4% más respecto de este año". De eso, cerca de un cuarto ($38 mil millones) irán a financiar una política "Contra el Crimen Organizado". $25 mil millones irán como financiamiento adicional a la policía corrupta de Carabineros.
Por último, en el terreno de las ayudas sociales, Boric enumeró las políticas actuales (IFE laboral, subsidio Protege, Ingreso Mínimo Garantizado, Copago Fonasa cero, etc). Anunció que en salud se destinarán $19 mil millones a salud mental, y un poco más de $28 mil millones para achicar las listas de espera. Como se ve, el monto para ese ítem es bastante menor comparado con el aumento de seguridad. Anunció otro aumento pequeño de $5 mil pesos a la beca de alimentación BAES. Mencionó también que la mayoría del aumento del presupuesto nacional es para financiar la PGU (60% del total).
En los próximas horas y días, se irán conociendo en mayor detalles las partidas concretas de la ley de presupuesto. Pero con estos anuncios se prevé un aumento acotado que no tiene grandes gastos para hacer frente a la precaria situación económica y social que se vivirá el 2023, y menos para recuperar lo perdido con la inflación desatada que estamos viviendo este año. No podemos esperar que de este gobierno o el proceso constituyente que están negociando con la derecha salga una solución favorable a la clase trabajadora y el pueblo.
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Necesitamos un aumento general de sueldos ahora para proteger y recuperar el salario perdido, estableciendo reajustes automáticos según la inflación; establecer un sueldo base mínimo de $650 mil, porque el sueldo mínimo del gobierno apenas alcanza a cubrir las necesidades más básicas; establecer el control de precios y medidas de fondo para acabar con la fuga de capitales y la especulación financiera de los capitalistas, cuyos costos los paga todo el pueblo. Es urgente un plan de lucha hacia un paro nacional, convocado por las principales organizaciones sindicales como la CUT, en contra de las alzas y en defensa del salario, como lo vienen haciendo sindicatos en diversos países del mundo, como los portuarios en Inglaterra y Alemania.