La candidata del Frente de Izquierda volvió a marcar una agenda distinta frente a los candidatos del ajuste y la agenda represiva. Llamó a prepararse para enfrentar lo que viene y fortalecer la izquierda de cara al 22 de octubre.
Domingo 8 de octubre de 2023 23:01
El segundo round nuevamente fue para la izquierda. Myriam Bregman volvió a marcar una agenda diferenciada del conjunto de los candidatos patronales. Mientras Massa, Bullrich, Milei y Schiaretti compitieron por marcar una agenda represiva y al servicio de los intereses empresarios, la candidata del FITU apareció defendiendo abiertamente los intereses de la clase trabajadora; denunciando la demagogia punitivista que se expresó en el punto Seguridad y planteando una defensa activa del ambiente y el apoyo a las luchas que enfrentan la destrucción ambiental.
Después de su gran participación en el primer debate, la expectativa por la participación de Myriam Bregman era muy importante. Así, en todo el país y más allá de sus fronteras, hubo reuniones y juntadas para bancar a la Rusa. Ese apoyo también se vio en las redes sociales. Nuevamente tanto su nombre como algunas de las definiciones y chicanas que tiró en el debate ocuparon algunos de los principales lugares en las tendencias de la red social X (antes Twitter).
Apertura
En las presentaciones, al abordar las cuestiones nacionales, no hubo grandes novedades. Milei volvió a diagnosticar un enorme desequilibrio monetario y fiscal. Bullrich atacó “lo más brutal de la corrupción kirchnerista”. Schiaretti denunció el “desastre de los gobiernos de la grieta. Massa, como si no fuera responsable del ajuste en curso, afirmó “venimos a contarte como va a ser la Argentina después del 10 de diciembre”.
Myriam Bregman fue la última en tomar la palabra en la ronda de apertura. La candidata del Frente de Izquierda Unidad, empezó agradeciendo el “apoyo que recibimos estos días porque muestra que somos muchas y muchos los que no nos resignamos a que esta crisis la paguen las grandes mayorías”. Además, planteó que “las actuales coaliciones políticas están estalladas, Y aparecen otros que se presentan como lo nuevo y son la vieja derecha, ahora despeinada”. En ese marco, planteó que es necesario “poner en pie una gran fuerza política de izquierda, de la clase trabajadora. Una nueva fuerza política que sirva para unir a los de abajo, para pelear por una sociedad sin opresión ni explotación, donde gobiernen los que nunca gobernaron: los trabajadores y las trabajadoras”.
El inicio del debate también estuvo marcado por los posicionamientos alrededor de la crisis que tiene lugar en Medio Oriente. Tal como lo habían hecho, Milei, Bullrich, Massa y Schiaretti se ubicaron del lado del Estado de Israel. En este punto Bregman señaló: “Nos duelen las víctimas civiles, que tienen como base la política del Estado de Israel de ocupación y apartheid contra el pueblo palestino”.
Seguridad
El punto Seguridad no marcó sorpresas por parte de los candidatos de las coaliciones capitalistas. Bullrich y Milei repitieron el libreto que vienen desplegando en campaña, concentrado en darle mayor poder a las fuerzas represivas y proponer cárcel y bala para los sectores de la juventud más humilde. Massa y Schiaretti no quisieron quedarse atrás, reivindicando sus propias iniciativas. Las grandes ausencias en estos planteos fueron, como siempre, la profunda crisis social y las complicidades de sectores del poder con el delito organizado.
Bregman fue la primera en replicar a la candidata de Juntos por el Cambio, que se había enorgullecido de la presencia del policía Chocobar: “Patricia Bullrich, fracasaron. Usted y todos los que promueven la mano dura. En una década incrementaron la población carcelaria en un 97%. Endurecieron todas las leyes, generando una verdadera inflación penal. ¿Y tienen algo para mostrar? Porque cuando era ministra mostraba que secuestraba 25 porros, literal. Amenaza con la baja de la edad de imputabilidad, ¿hasta qué edad? ¿hasta 12, hasta 8, hasta el jardín de infantes?”.
Las intervenciones y cruces posteriores siguieron en el tono que había marcado inicialmente Bullrich. Schiaretti repitió el latiguillo de “la puerta giratoria” y Massa habló de conformar “un FBI argentino”. Luego siguieron réplicas de Bullrich y Milei, donde los candidatos de la derecha jugaron a las chicanas.
En el momento de su intervención, Bregman denunció la demagogia punitiva que se venía desplegando en el debate. Señaló que “el gran delito está organizado desde arriba e implica hablar de las complicidades con sectores de las fuerzas de seguridad, judiciales y políticas”. Además, planteó que “muy importante pensar cómo llegamos hasta acá. Desde la Ley de Entidades Financieras de la dictadura, que ablandó cualquier control, fueron creando un andamiaje jurídico que facilita el lavado de dinero sucio. Durante los 90, con las privatizaciones de puertos, aeropuertos, le dieron también la infraestructura para que entren y salgan los cargamentos”. En ese marco, sostuvo que “hay que nacionalizar los puertos bajo control de los trabajadores y derogar toda la legislación que facilita el lavado y el blanqueo”.
La candidata de la izquierda también criticó a quienes presentan los problemas de seguridad como cuestiones aisladas: “Hoy miles son empujados a vivir en la más absoluta marginalidad, donde la vida no vale nada y, como me dijo Darío, un joven metalúrgico de Rosario, nos ofrecen más que como ‘soldaditos de la droga’ que como trabajador en la fábrica”. En ese marco, planteó que es necesario cuestionar “las condiciones estructurales que sostienen este sistema y garantizamos trabajo, educación y cultura para que la juventud tenga futuro”.
Trabajo y Producción
En el segundo punto temático, con excepción de la izquierda, los diversos candidatos realizaron una defensa explícita de intereses de sectores patronales. Así, Schiaretti habló de inversión y seguridad jurídica, además de pedir la eliminación de las retenciones del campo. Massa habló: trabajo eje central. Mejora en el ingreso: paritaria libre y reducción de impuestos. Al mismo tiempo, todos y todas se encargaron de recordarle a Massa que es el ministro de Economía y responsable de la crisis económica y social actual.
La diferencia la marcó, nuevamente, Bregman. En su primera réplica cuestionó a Massa señalando que “él ya firmó con el FMI para después de las elecciones, más tarifazos, más aumento de combustible, es decir, menos salario y menos jubilaciones”. En ese marco denunció la precarización que sufren amplios sectores de la clase trabajadora: “hoy una enfermera a la mañana trabaja en el hospital, a la tarde corre a la clínica y el fin de semana hace inyecciones a domicilio”. Finalmente, interrogó a Massa si puede vivir con lo que cobra un jubilado, una cifra que apenas llega a $124 mil pesos al mes como los jubilados, con bono incluido.
Posteriormente, luego de otros cruces más, la candidata a presidenta de la izquierda sostuvo en su intervención: “Voy a decir la palabra que parece prohibida: los que laburan. Nos quieren hacer creer que los problemas laborales que tenemos son culpa de que hay trabajadores que tienen muchos derechos. Que, si les sacamos a ellos todos vamos a ser más ‘felices’. De eso te hablan cuando te hablan del modelo UOCRA”.
En ese marco, denunció que “que los que laburamos estamos completamente fragmentados en: monotributistas, tercerizados, bajo convenio, informales, temporarios o con programas sociales. Esa división la crean para explotarnos cada día más y la dirigencia sindical traidora es la que garantiza esa fragmentación”. En ese marco, planteó una cuestión central: “Tenemos que recuperar los sindicatos para que sean una verdadera herramienta de lucha. Unir lo que ellos desunen porque así podemos mostrar que somos la inmensa mayoría y dar vuelta la historia”.
En este marco, la candidata del Frente de Izquierda sostuvo “nosotros desde la izquierda tenemos una propuesta que es una verdadera bandera de lucha para unir a los trabajadores y trabajadoras en una pelea común. Reducir la jornada laboral a 6 horas, 5 días a la semana y repartir esas horas que quedan libres o vacantes, entre aquellos que no tienen un trabajo o tienen un trabajo informal”. Finalmente, afirmó: “La salida no es pisándole la cabeza al de al lado, es con unidad, desde abajo, y que gobiernen los que nunca gobernaron. Siempre le dijeron a la clase trabajadora que era la columna vertebral del movimiento, nosotros queremos que sea la cabeza de una nueva sociedad”.
Bregman también replicó a Milei, que había defendido abiertamente los beneficios para los sectores capitalistas. “Cuando Milei te habla en difícil lo hace ocultar que su verdadero plan: indemnizaciones ¡afuera!, vacaciones pagas afuera, licencias afuera, terminar con la brecha entre varones y mujeres afuera, aguinaldo afuera. La libertad que Milei defiende es la libertad de que te puedan explotar sin límites”.
El candidato derechista usó una réplica para contestar a Bregman. Lo que hizo fue una defensa abierta de los intereses de las patronales, atacando la idea de reducir la jornada laboral, tal como lo hacen las mismas patronales. Además, cuestionó que el salario tenga que superar el valor de la canasta familiar porque eso haría “quebrar a las empresas”.
Desarrollo humano, vivienda y protección del ambiente
El punto Ambiente estuvo marcado por el discurso demagógico de Massa, las acusaciones de Bullrich contra el candidato-ministro y generalidades por parte de Milei.
En su primera réplica, Bregman criticó al candidato oficialista, señalando: “Massa dice que no tendría que haber una ley nacional de alquileres. Eso es muy peligroso porque implica borrar cualquier garantía mínima para los inquilinos”. En ese marco, sostuvo que son necesarias medidas urgentes como “establecer impuestos progresivos a la vivienda ociosa, créditos hipotecarios accesibles y un plan nacional de vivienda”.
Posteriormente, en su intervención, Bregman afirmó que “el sistema capitalista está destruyendo el planeta. Sequías, inundaciones, olas de calor, incendios y más y más contaminación. Aun así, los demás candidatos proponen profundizar el extractivismo y saqueo de nuestros bienes comunes naturales. En eso están todos de acuerdo”. En ese marco, denunció que “prometen ‘un modelo de desarrollo’, pero con ese cuentito a las multinacionales les permiten hacer lo que quieran, destruir lo que quieran, incluso llevarse los dólares sin problema. Otra vez, las penas son de nosotros, las vaquitas son ajenas”. La candidata del Frente de Izquierda recordó que “en Jujuy lo dejaron claro: para que las megamineras se lleven el litio están dispuestos a todo. Este es el secreto económico que está detrás del llamado a un “gobierno de unidad” de Massa a Gerardo Morales y otros gobernadores”. Finalmente planteó: ¡Ley de humedales ya! Todos se pusieron de acuerdo para cajonearla”.
Posteriormente, en su réplica a Milei, Bregman sostuvo que “la destrucción del planeta es una de las expresiones más claras de la irracionalidad de este sistema. Pero Milei defiende la libertad de las empresas de contaminar los ríos y llega a decir que el cambio climático es un invento del socialismo. Qué cacaree lo que quiera, nosotros vamos a seguir acompañando a los pueblos que luchan como Mendoza en defensa del agua, como todo Chubut en contra de la mega minería contaminante”.
Preguntas
En la ronda de preguntas abundaron las chicanas y las frases hechas. Sin embargo, el momento sirvió para volver a evidenciar lineamientos políticos generales de las distintas fuerzas.
Bregman volvió a marcar distancia con los distintos candidatos. Así, interpeló a Schiaretti por sus coqueteos con Milei; criticó a Bullrich por la doble vara al momento de hablar del espionaje de conversaciones; le recordó a Massa su llamado a un “gobierno de unidad nacional” junto al represor Gerardo Morales y la derecha del partido de Milei y Villarruel. Por último, volvió a interrogar a Milei sobre su absoluto desconocimiento del patriarcado, algo que lo lleva a negar los femicidios. Al mismo tiempo, en ese apartado desarrolló una gran intervención, enfrentando las críticas de Milei, explicando como sería una sociedad de tipo socialista, algo que el candidato de la derecha parece incapaz de entender.
Cierres
En el final no hubo sorpresas. Milei repitió las críticas a “la casta”; Bullrich volvió a cargar contra Massa y el kirchnerismo; el ministro-candidato volvió a hablar del país que vendrá “luego del 10 de diciembre”. Schiaretti no quiso salirse de su libreto y defendió la “experiencia en gestión” que tiene en Córdoba.
En su cierre, Bregman planteó: “Tenemos un desafío enorme por delante y tenemos que dar un mensaje contundente. No somos ni sometidos ni cómplices. Este 22 de octubre hay cinco fórmulas presidenciales y te pedimos que elijas según tus convicciones, según tus valores. Que no te resignes”. Además, recordó la “importancia de tener diputados y diputadas de izquierda en el Congreso que no se van a vender, no se van a dar vuelta”. En un llamado explícito, agregó: “No vamos a salir de esta con salvadores individuales. Esta lucha necesita que te involucres. A trabajadores, mujeres y jóvenes les pido eso, porque necesitamos enfrentar lo que viene, defender nuestros derechos e ir por más. Así que esta campaña tomala en tus manos. Vos sabés que hacemos todo a pulmón. Difundámosla por todo el país. Llevémosla cada lugar. Y te propongo algo: levanta la izquierda, levantemos la izquierda”.
Redacción
Redacción central La Izquierda Diario