El miércoles 30 de septiembre, en la ciudad de La Plata, se llevó a cabo una jornada de lucha para exigir la reapertura inmediata del refugio municipal para mujeres víctimas de violencia de género organizada por las trabajadoras del sector.
Sábado 3 de octubre de 2015
El refugio municipal fue cerrado en 2013 cuando Flavia Centurión, directora en ese momento de la Dirección de Políticas de género (DPG), renunció luego de una intensa campaña de denuncia de las trabajadoras del sector por violencia laboral e institucional. Bruera cerró el refugio y el edificio comenzó a funcionar como una ONG: “Las Mirabal”. Esta organización está a cargo de ña ex funcionaria Centurión y recibe fondos del Municipio por un valor de $30.000 mensuales, sin que se le exija un informe público de las tareas que allí se desarrollan.
Astrid Baumann, delegada por la Junta Interna Ate Municipales comentó a La Izquierda Diario que fue una Jornada convocada colectivamente por la Campaña contra las violencias hacia las mujeres, organizaciones de mujeres, la Junta interna ATE Municipales y la Asamblea de Trabajadoras de la DPG, a la que adhirieron otras juntas internas combativas de la región.
La trabajadora expuso que a la reapertura del refugio, se le suma la exigencia al gobierno municipal de la incorporación de personal en la atención de mujeres en situación de violencia de género, y que se concrete el ingreso de las 17 personas que ya han sido capacitadas para trabajar en el refugio.
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Además planteó que vienen reclamando por las condiciones precarias en las que trabajan los municipales, que no llegan a cobrar un salario acorde a la canasta familiar. “Estamos hablando de salarios de 3000 pesos, 6000 pesos en el mejor de los casos para personas con 25 años de antigüedad” expresó Astrid. El resto de los trabajadores tienen contratos que deben renovar cada tres meses, solo hay dos trabajadores en planta permanente, por lo que tienen vulnerado el derecho a un salario digno para cumplir con esta tarea fundamental en la prevención de la violencia hacia las mujeres, sin contar con presupuesto “ni siquiera para los insumos básicos”.
Denunció que mientras se estaba preparando la radio abierta, personal de Bruera y su patota repartieron volantes contra la ex funcionaria Vedio y su familia, utilizando las firmas de las organizaciones que convocaron, con el objetivo de ensuciar la jornada y a las mujeres que se organizan para luchar por sus derechos.
Entre las participantes de la jornada, María Diaz Reck, secretaria de Prensa de Suteba La Plata y candidata a Senadora por el Frente de Izquierda, manifestó: “Desde las comisiones de mujeres de SUTEBA La Plata y Ensenada venimos a traer nuestra adhesión a esta actividad. La política de Bruera no tiene nada que envidiarle a la política de Scioli o del gobierno nacional en materia de defensa de los derechos de las mujeres. Una vez más decimos: El gobierno y el Estado son responsables. Para pelear contra los femicidios, contra todo tipo de violencia hacia las mujeres, por el derecho a decidir y por todos nuestros derechos es necesario organizarnos. Y con mucho entusiasmo nos preparamos para participar del ENM que se realizará en Mar del Plata.”
Luana Simioni, candidata intendente por el Frente de Izquierda, participó de la jornada junto a la delegación de Pan y Rosas y manifestó a LID que “A más de 3 meses de la gran movilización #Niunamenos donde los funcionarios posaron hipócritamente con el cartelito, el intendente Pablo Bruera destina recursos municipales para desplegar su gran campaña donde pretende que los platenses pensemos que Pablo es alguien distinto de aquel responsable del crimen social del 2 y 3 de abril, de la precarización laboral en el municipio y de cerrar el único refugio para mujeres víctimas de violencia en la región”. Y agregó “Por eso es muy importante seguir organizadas y sumar apoyos al proyecto de ley contra la violencia hacia las mujeres presentado por el diputado nacional Nicolás del Caño que contempla no solo la creación de refugios sino también un plan de viviendas basado en impuestos a la especulación inmobiliaria, un régimen de subsidios y de licencias laborales así como la creación de equipos interdisciplinarios de acceso gratuito para todas las mujeres víctimas de violencia machista”.