Viernes 18 de mayo de 2018
En marzo del 2013, 1300 delegados mineros, salud, fabriles y de diversos sectores daban origen al Partido de los Trabajadores (PT), entendido éste como la herramienta política de la Central Obrera Boliviana (COB) y de los sindicatos. El impulso dado desde el Sindicato Minero de Huanuni (SMTMH) y la Universidad Nacional Siglo XX (UNSXX) luego de años de discusiones y tentativas fallidas, empezaba a dar frutos en la lucha por una organización política independiente de las y los trabajadores. Durante el congreso se eligió una primera dirección encabezada por Guido Mitma y el abogado Gonzalo Rodríguez junto a grupos de izquierda como el Movimiento Socialista de los Trabajadores MST (Balderrama de la Juventud Socialista “JS” en ese entonces), La Protesta (Arenas) e Insurgentes (Gonzales), quienes debían dar impulso a la formación del partido. Sin embargo, lejos de este mandato, Mitma y sus amigos, decidieron empezar a elaborar otro programa, menos obrero y más “democrático”, menos combativo y más electoral, desvirtuando lo aprobado en Huanuni. Esta dirección se puso a prueba durante las huelgas de mayo y junio del 2013 logrando “esconder” el PT, aceptando la voluntad de la burocracia de Trujillo (COB), Pérez (FSTMB), Quispe y Mamani de fabriles, quienes querían evitar que la huelga contra el gobierno por la ley de pensiones se politizara y radicalizara a izquierda. Al realizar esta operación le dieron una estocada de muerte al PT que se reflejaría en el segundo congreso de Oruro, en el mes de julio, con la participación de 300 delegados. En ese momento fue elegido en la dirección el compañero de base Mario Martínez, que pese al intento de remontar la construcción del PT, era muy tarde para poder hacerlo. La burocracia oficialista vinculada al MAS ya había iniciado la cacería de brujas contra el sindicato de Huanuni, descabezando el sindicato en septiembre, procesando penalmente a más de 20 dirigentes y trabajadores, despidiendo a miembros de la UNSXX y amenazando con violencia a los dirigentes del PT en Huanuni. Así mismo, la burocracia estableció la separación definitiva entre el PT y los sindicatos, cortando de esta manera la savia vital que debía alimentar al partido. El resultado fue su virtual desaparición en pocos meses.
A fines del 2017, con el inicio de la pelea de sectores de clase media y de la vieja derecha contra el Código del Sistema Penal, algunos grupos resucitaron la sigla del PT con el objetivo de negociar con una mayor fuerza con los partidos de la oposición patronal, para intentar alcanzar algún puesto de candidatos para las elecciones del 2019. El Partido de los Trabajadores que había nacido como un paso en la lucha por la independencia política de las y los trabajadores para enfrentar al oficialismo y la oposición, de pronto renacía de la mano de estos grupos (la Protesta, Insurgentes y otros) ya no para pelear, sino para mendigar curules nada menos que de partidos y organizaciones burguesas. La bandera del Partido de los Trabajadores que pese a la derrota del 2013 era una referencia importante para miles de trabajadores y la juventud obrera, sin embargo, gracias a estos politiqueros oportunistas que subordinaron la sigla detrás de la CONADE, en este momento no significa nada.
Desde la LORCI, la organización que con más fuerza y energía peleó por esta herramienta política, afirmamos que no es posible dar pasos en la independencia política con esas banderas bajo la disciplina de la oposición patronal. Recogemos los elementos más avanzados del programa del PT del 2013, para impulsar la lucha por esta Alternativa Anticapitalista de los trabajadores. Llamamos a los honestos trabajadores que depositaron sus expectativas en el PT a continuar esa lucha juntos por esta AAT.
Javo Ferreira
Javo Ferreira nació en La Paz en 1967, es fundador de la LOR-CI en Bolivia. Autor del libro Comunidad, indigenismo y marxismo y parte del consejo editorial de La Izquierda Diario Bolivia. Fue docente de la Universidad Obrera de Siglo XX en Potosí e impulsor del PT de la COB el 2013.