En el Hogar Curapaligüe del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, la situación edilicia es de emergencia. Existen filtraciones de agua en las tomas de luz provocando paredes electrificadas, sumado a condiciones edilicias deplorables, ponen en riesgo a los residentes y a los trabajadores.
Patricio Abalos Testoni Redacción CABA - @ElPatoAT
Lunes 12 de diciembre de 2016 12:07
A solo días de la muerte de otro trabajador del subte electrocutado, el Hogar Curapaligüe para niñas, niños, y adolescentes, perteneciente al Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (GCBA), despertó el viernes 9/12 con filtraciones de agua en las paredes, haciendo que las mismas estén electrificadas, y con el peligro que eso significa tanto para los que están viviendo allí, como para los trabajadores del dispositivo. Los propios trabajadores filmaron esta situación mostrando en las condiciones en las que viven decenas de niños y como tienen que trabajar diariamente.
El Curapaligüe es uno de los tres hogares propios de la Dirección de Niñez y Adolescencia del GCBA. En el mismo residen aquellas niñas, niños y adolescentes privados de sus derechos sea por abandono, violencia familiar, situación de calle, etc.
El Hogar viene atravesando una situación alarmante desde hace tiempo, y ya hace varios meses que los trabajadores vienen reclamando tanto por la situación edilicia, como por el hacinamiento de las niñas, niños y adolescentes: siendo un hogar para 30, se encuentran hasta 50 personas alojadas allí. Esta terrible situación se agrava a partir de la precariedad laboral que tienen estos trabajadores, ya que con sueldos que promedian la mitad de la canasta básica, muchos se encuentran desamparados por los derechos laborales más mínimos, ya que abundan los contratos de locación desde hace años. A su vez manifiestan la falta de personal, ya que con los que son no llegan a cumplir con todas las necesidades de esta población tan vulnerada.
Actualmente incluso hay un medida cautelar del Juzgado Nº 20 para que el gobierno realice las obras de infraestructura que garanticen las condiciones de habitabilidad del hogar (aunque no toma la cuestión del hacinamiento, la falta de recursos para realizar el trabajo, ni de las condiciones laborales de los operadores y profesionales). Esta medida se llegó a partir de que los propios trabajadores del hogar y del ministerio salgan a denunciar (incluso con cortes de calle para ser escuchados) la situación con la que trabajaban: cables eléctricos colgando, cortes de gas y de agua, techos que se caen, desbordes de tanques, etc.
Nuevamente estamos expuestos con nuestras vidas a las condiciones que nos imponen desde las patronales. Como fue el caso de Matias Kruger trabajador electrocutado del Subte la semana pasada, pero que son miles de trabajadores los que pierden sus vidas o quedan incapacitados en sus lugares de trabajo por las condiciones impuestas. En este caso el propio gobierno de la ciudad más rica en recursos del país, pone en riesgo, no solo la vida de los trabajadores, sino también la de los sectores más vulnerados. Habiendo sido denunciada desde hace tiempo estas condiciones, y aun con una medida cautelar, la situación sigue siendo de urgencia. Muestra una vez más la necesidad de seguir organizándonos en nuestros trabajos, para enfrentar un sistema que expone nuestros cuerpos a situaciones de riesgo constante.
A raíz de este nuevo hecho en el hogar, desde la Junta Interna ATE de Promoción Social se publicó el siguiente comunicado:
Continúa la emergencia en el Hogar Curapaligüe
El Hogar de niños y niñas Curapaligüe (Curapaligüe 571) amaneció el día de hoy, viernes 09/12, con las paredes electrificadas por filtraciones de agua, poniendo en riesgo a los más de 50 niños/as alojadas/os cuya crianza depende del Gobierno de la Ciudad.
Pese a las reiteradas denuncias y la medida cautelar de la justicia ordenando la inmediata restauración del edificio, el GCBA continúa sin resolver la crisis que atraviesa este efector tan sensible del sistema de protección integral de derechos.
Una vez más, el Gobierno responsable de garantizar el cuidado de los/as niños/as es el que violenta los derechos humanos de la población alojada en incumplimiento de toda normativa vigente.
Desde la Junta Interna de Promoción Social de ATE denunciamos la situación ante los organismos de control y las autoridades correspondientes del Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat de la Ciudad, sin obtener respuestas concretas hasta el momento.
Hacemos de estado público la situación y continuamos en estado de ALERTA hasta tanto se restituyan los derechos vulnerados.