Luego de que la carta presidencial para fiscal nacional fuera rechazada en dos ocasiones en el Senado, esta semana el presidente Gabriel Boric ha revelado su siguiente candidato al Ministerio Público: Ángel Valencia, el abogado que ha defendido al represor Bruno Villalobos, a Luis Barría por delitos sexuales, al estafador Rafael Garay y a traficantes de armas del Ejército. Resurge de manera pasiva la división de opiniones entre el oficialismo.
Viernes 6 de enero de 2023
Esta semana, el gobierno de Gabriel Boric dio a conocer su carta a la fiscalía nacional luego de que el Senado rechazara anteriormente a sus candidatos en dos ocasiones, primero a José Morales y luego a Marta Herrera.
Resultó que el candidato ahora es el abogado Ángel Valencia, quien desde un inicio fue marcado como uno de los favoritos entre la Cámara Alta, pero que también es centro de varias críticas, principalmente por los casos que ha defendido como penalista privado.
El penalista candidato al Ministerio Público ha sido defensor de personajes como el estafador Rafael Garay, el exgeneral de carabineros Bruno Villalobos (pieza clave en la llamada “Operación Huracán”) y ha sido defensor de inculpados por delitos sexuales, como el exfiscal Luis Barría, y de traficantes de armas del Ejército, por nombrar algunos casos.
Ángel Valencia ha sido propuesto tres veces en la quina por la Corte Suprema, y el gobierno ya lo había rechazado en dos ocasiones, principalmente por la defensa que ha hecho de inculpados por delitos sexuales. Esto cambió ahora, se propuso como la carta por parte del ejecutivo mientras al gobierno se le cae la careta de feminista y sus personeros comienzan a dar volteretas para justificar una “opción de consenso” y poder salir del impasse de 90 días sin Fiscal Nacional.
Por su trayectoria, Valencia se ha convertido en uno de los candidatos preferidos para la derecha y la ex Concertación, lo que ha generado comentarios dentro de la oposición. Sin embargo, las críticas no pasan más allá de meros comentarios. Senadores como Alejandra Sepúlveda (FRVS), Juan Ignacio Latorre (RD) o Loreto Carvajal (PPD) han mostrado un tibio rechazo que a lo más se expresa en un voto en contra.
No obstante, la elección de Valencia como carta presidencial a la Fiscalía Nacional ha sido la más cercana a los partidos de los 30 años y vendría a dar ese tinte al Ministerio Público durante los próximos 8 años de ser votado a favor en el Senado. Luego de haber dado indulto a una decena de presos políticos de la revuelta (una excepción en su mandato), el gobierno se apresura a dar un gesto en la línea de lo que viene haciendo hace un año: arrodillarse ante los deseos de la derecha y la ex Concertación.
En cuanto a Apruebo Dignidad, el senador Daniel Núñez (PC) criticó durante la jornada que Valencia es un nombre puesto sobre la mesa por parte de la “derecha dura”. Y aunque parta con esta crítica, es probable que, como en las dos votaciones anteriores, los dos senadores del PC voten a favor de la carta presidencial, aunque sea el nombre puesto por la “derecha dura”. Y es que ya hemos visto cómo el Partido Comunista ha apoyado al gobierno en todos sus gestos importantes que hacen a la derecha y ha puesto su fuerza en defender esas políticas y al gobierno mismo del que forman parte.
Las probabilidades de que Valencia sea electo en esta ocasión son bastante altas considerando sus vínculos políticos, la composición del Senado y el comportamiento de los senadores oficialistas en las votaciones anteriores. Pareciera que el candidato ya está casi asegurado como Fiscal Nacional y que la única sorpresa que nos espera será ver las justificaciones del oficialismo para apoyar la decisión del mandatario Gabriel Boric.