Nestlé, multinacional suiza dueña de más de 8 mil marcas de alimentos y bebidas es beneficiaria del proyecto anunciado por López Obrador para procesar 20 mil toneladas de café en el estado de Veracruz. Los productores ya se manifestaron en contra.
Axomalli Villanueva @1quiahuitl
Viernes 21 de diciembre de 2018
Hace unos días el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció en conferencia de prensa la inversión inicial de 154 millones de dólares por parte de dicha empresa, argumentando que creará empleos tanto en el campo como en la ciudad y que este proyecto convertirá a México en el principal productor de café en el mundo para Nestlé, posición que hasta ahora le pertenece a Brasil.
Por su parte diversas organizaciones y sociedades de producción rural de Coatepec, Zongolica, Huatusco, Ixhuatlán del Café, Totutla y Tlacotepec de Mejía, rechazaron en conferencia de prensa este proyecto de inversión pues, afirmaron, no beneficiará a los pequeños productores y hará daño al medio ambiente.
El presidente del Consejo Regional del Café en Coatepec, Cirilo Elothán Díaz, señaló que Nestlé y otras empresas, como Starbucks, han controlado los precios del café explotado y manipulado a los productores.
“Dan un anuncio que para nosotros no es nuevo porque desde siempre la empresa Nestlé ha controlado los precios del café, han explotado a los cafetaleros no sólo mexicanos sino a nivel mundial, por décadas”
aseguró, y condenó además que López Obrador pretenda mantener privilegios a empresas como Starbucks y Nestlé, a quienes acusó de ser dos de los principales causantes de la precarización del campo mexicano.
“De la manera en que va a entrar Nestlé, no va a beneficiar en nada, es una inversión millonaria, pero es para ellos, porque el productor no va a tener ningún beneficio”, puntualizó el productor.
La instalación de la procesadora de 20 mil toneladas de café no es algo nuevo. Mega corporaciones como esta siempre ha controlado los precios del café y han explotado a los cafetaleros no sólo mexicanos, sino de todo el mundo.
Según los productores, empresas como Nestlé compran el café por medio de intermediarios que mantienen los precios muy bajos y condenan a la pobreza a los campesinos, en este momento, por ejemplo, pagan entre cuatro y seis pesos por kilo, cuando deberían dar entre 14 y 15.
Además señalan que, mientras los productores locales buscan promover cultivos sustentables, estas multinacionales impulsan la producción de café robusta, una variedad de rápido desarrollo que no requiere sombra, lo que implica la deforestación de grandes extensiones.
Agregó que los gobiernos federal y estatal deben dejar de apostar por los grandes inversionistas y apoyar a los productores locales. En el Presupuesto 2019 se redujeron 50 por ciento los recursos destinados al Plan Integral de Atención al Café, pues este año fue de 783 millones de pesos y para el año entrante será de 346 millones de pesos.
Transnacionales voraces
Para dimensionar el peligro que se avecina recordemos que Nestlé es una mega corporación de origen suizo, dueña de más de 8 mil marcas comerciales de alimentos y bebidas, actualmente está enfrentando juicios en el mundo por esclavismo, envenenamiento y contaminación, muy conocida por el uso desmedido de transgénicos. Pero también por despojo de agua, siendo uno de los principales responsables de la destrucción de los mercados económicos locales, Recientemente su director ejecutivo propuso "privatizar el agua para hacer frente a la crisis hídrica mundial".
Empresas como Starbucks y Nestlé siempre han apostado por mega inversiones como estas, mientras que por un lado pagan certificaciones muy costosas en Europa y Estados Unidos para mantener los precios bajos a los pequeños productores. Por otro lado, estas corporaciones pretenden fusionarse para consolidar el "imperio del café", esclavizando así la cadena productiva.
