El abogado laboralista y Coordinador del Observatorio del Derecho Social de la CTA Autónoma conversó en Alerta Spoiler sobre la situación del empleo y las propuestas de flexibilizar el trabajo por parte de las patronales. También sobre la perspectiva de la izquierda de reducir la jornada laboral y repartir las horas de trabajo.
Domingo 24 de octubre de 2021 22:58
📊 MERCADO DE TRABAJO, DESEMPLEO Y REFORMA LABORAL | Entrevista con Luis Campos, abogado laboralista - YouTube
Mientras algunos candidatos como José Luis Espert plantean en debates públicos que no les importa lo que las empresas puedan hacer con los empleados, el tema del empleo, la desocupación y la precarización laboral aparecen cómo una de las problemáticas centrales.
¿Cuál es la situación del empleo en Argentina? ¿Cómo está evolucionando en este momento de la pandemia a partir de la vuelta a una mayor actividad y cómo pueden impactar las distintas soluciones que están en debate?
En Alerta Spoiler entrevistamos a Luis Campos, Coordinador del Observatorio del Derecho Social de la CTA Autónoma.
A continuación presentamos las principales definiciones de la entrevista:
¿Hubo una recuperación del empleo? ¿Qué tipo de empleo se creó?
- Si, es así. Por un lado estamos comparando contra el segundo trimestre del año pasado, que fue el peor momento de la pandemia, con lo cual todas las comparaciones que se hagan de cualquier indicador, hay que tomarlo con muchas prevenciones porque es lógico y, era esperable que cayera la tasa de desocupación.
- Hay dos fenómenos que es importante tener en cuenta: por un lado, si bien efectivamente en comparación con el año pasado tanto la entidad económica como el mercado de fuerza de trabajo están empezando a recuperar ciertos niveles pre-pandemia, la actividad económica ya está más o menos en los niveles anteriores, la situación de los trabajadores todavía no los ha hecho.
- Si comparamos contra el 2019, todavía la tasa de actividad está por debajo y la tasa de empleo gran por debajo del 2019 y esto implica que básicamente hay muchos trabajadores y trabajadoras que durante la pandemia tuvieron que salir del mercado de fuerza de trabajo y no pasaron a estar desocupados sino pasarán a estar inactivos. Es una cuestión estadística pero de lo que da cuenta es que todavía no se recuperaron los puestos de trabajo que se perdieron durante la pandemia.
- El otro aspecto es que, y esto ya tiene más que ver con un movimiento de mediano y largo plazo en nuestro país, es que no parece ser que las crisis económicas vayan a impactar significativamente en aumentos muy importantes de la tasa de desempleo, como por ahí habían sido durante los años
90. Recordemos en los años
90 el plan de convertibilidad fue un ajuste que simplemente por entonces disparó la tasa de desocupación, casi el 20 % en 1995, e incluso superó el 20 % en el año 2002 y 2003.
- En este momento parece que estamos en una situación sustancialmente distinta de la economía argentina en el mercado la fuerza de trabajo. En nuestro país está funcionando de manera distinta, y lo que hace es no ajustar tanto por cantidad del empleo sino por precariedad.
- Muchos trabajadores y trabajadoras, cuando no pueden insertarse en el mercado formal de fuerza de trabajo, es decir los asalariados registrados, lo que terminan haciendo es salir a hacer lo que se pueda, y esto implica en las estadísticas con un aumento muy fuerte de la ocupación por cuenta propia y de los asalariados no registrados.
- No es que vayamos parece a un escenario donde vamos a ver subas significativas de la tasa de desocupación, pero si vamos a ver que ese mercado la estructura ocupacional se precariza cada vez más.
- Hay un incremento muy fuerte del trabajo por cuenta propia, que se registró tras unos 6/7 años en nuestro país.
Las propuestas de reforma laboral
- Por un lado, la conducta de los empleadores es esperable. Lo que van a hacer en contextos de crisis económica es tratar de impulsar su agenda. Y su agenda es avanzar sobre conquistas históricas de los trabajadores y los trabajadores.
- Claramente no va a funcionar, más que por flexibilizar las normas que regulan el mercado de fuerza de trabajo. Esto no va a redundar en un crecimiento de empleo. Es como pretender que si yo les saco derechos a un trabajador petrolero que está en el medio de la meseta patagónica en un pozo petrolero eso va a redundar una mejor empleabilidad de un joven del tercer cordón del conurbano bonaerense que ya es hijo de segunda o tercera generación de esos pagos.
- Para citar a uno de los candidatos, es una falacia, no tienen mucha razón de ser. Pero sí tiene un objetivo muy claro que es quitarle derechos a ese 50 % de trabajadores y trabajadoras que todavía hoy están insertos en relaciones asalariados formales, tanto en el sector privado como en el sector público (...) pero que de ninguna manera va a redundar en una mejora del empleo.
- Un fenómeno que se está dando que me parece también destacable es que los últimos datos de la vida económica muestran que ya estamos en los niveles pre pandemia pero al mismo tiempo todavía estamos casi cien mil puestos de trabajos registrados en el sector privado por debajo de los niveles de pandemia, es decir, con la misma plantea o con menos trabajadores estamos haciendo la misma cantidad de producto, y eso implica una ganancia extraordinaria de la productividad del trabajo que se están quedando esos empleadores, sin necesidad de avanzar con reformas de la legislación laboral.
- En un contexto de crisis es claro el objetivo que buscan, que es avanzar sobre esos derechos laborales, tanto por vía de la legislación general como por vía de la negociación colectiva.
- Hemos visto en los últimos días en la empresa Toyota donde a través de un cambio en el convenio colectivo de trabajo se ejemplo una modificación en la jornada laboral , que redunda en un incremento de la de la producción, y a cambio de eso los trabajadores van a perder la licencia del sábado.
- Las reformas legislativas son bastante más difíciles de impulsar en este contexto, pero mientras se va instalando este clima, se van generando las condiciones para avanzar en reformas laborales, parciales por vía de la negociación colectiva o directamente en los hechos, que hacen que los trabajadores y las trabajadoras, por el miedo a perder el puesto de trabajo, y en este escenario de incertidumbre general, acepten peores condiciones en su relación de trabajo para seguir manteniendo ese trabajo, que todavía tienen ciertos niveles de protección.
El proyecto de Massa, “puente al empleo”, y el decreto de Alberto Fernández
- La historia de nuestro país nos muestra que la reducción de las contribuciones de las patronales no necesariamente es impulsa a la creación de empleo, y sí genera problemas serios de financiamiento del sistema previsional.
- Al mismo tiempo también habría esta estaría esta intención de ir generando un "empalme", y uso la palabra empalme porque era la que había usado Jorge Triaca en su momento, para tratar de dar cuenta de un fenómeno muy similar.
- Lo cierto es que el decreto tiene muy pocas precisiones, se parece más a un intento de instalar un tema en campaña, pero vamos a tratar de tener algún tipo de respuesta discursiva en campaña frente a lo que había sido la avanzada muy clara, muy concreta de la oposición por el lado de la eliminación de las indemnizaciones por despido.
- Pero cuando uno se mete en la letra chica del decreto lo que encuentras son muchas normas que derivan su implementación en reglamentaciones posteriores, que van a tener que dictar el Ministerio de Trabajo, con lo cual todavía no hay ninguna precisión, más allá de este decreto que establece un marco muy general.
- Podría ser una reglamentación que avanza en sentido protector, y decir que genere condiciones para un pasaje de estas formas de inserción más complejas como trabajo a puestos de trabajos formales sin perder derechos, o también podríamos estar frente a una nueva avanzada de la flexibilización laboral, dependiendo mucho de cómo sean los detalles de esa reglamentación.
- Hay un intento del Gobierno de, por lo menos, meter algún tema de agenda en el marco de la campaña electoral.
La propuesta del Frente de Izquierda de reducir la jornada laboral para repartir las horas entre todos las manos disponibles
- La disputa por la jornada laboral es constitutiva del movimiento obrero, de las organizaciones sindicales. Desde el siglo XIX en adelante estamos discutiendo la jornada laboral, definitivamente avanzar por procesos de reducción de la jornada laboral y de reparto del trabajo socialmente existente entre la totalidad de los trabajadores y trabajadoras es importante de hoy es una dirección para avanzar.
- De todas maneras, hay que incorporar ese tipo de discusiones en el marco de otros procesos que se están dando en paralelo, porque no es sólo reducción de la jornada laboral. Si reducimos la jornada de 8 a 6 pero aumentamos los ritmos de trabajo y en seis horas hacemos lo que hacíamos en 8 en definitiva para el empleador puede ser lo mismo y puede implicar un mayor desgaste de los cuerpos, de las mentes de los trabajadores y trabajadoras a la cual hay también una discusión sobre jornadas y ritmos que me parece que hay que tener en paralelo.
- Algo de eso hemos visto con durante la pandemia con la introducción del teletrabajo. Hasta es muy difícil calcular cuántas horas efectivamente el trabajador o trabajadora está destinando a su jornada laboral, y en muchos casos hasta para los empleadores tal vez sea mejor pasar a un régimen más flexible de jornada pero con una puesta a disposición de la fuerza de trabajo de manera ininterrumpida por parte de ese trabajador.
- Un punto inicio interesante es plantear la reducción de la jornada y el reparto del trabajo existente entre la totalidad de los integrantes de la clase pero al mismo tiempo todos estos otros aspectos deberían integrar las discusiones.
- Son discusiones que nos debemos hacia el interior de nuestras propias organizaciones, parece que por lo menos nos dan una punta de por donde podría ir algún tipo de programa alternativo o algún tipo de programa que que no se limitara a defender lo ya existente.