La medida fue tomada sin previo aviso; la totalidad de la planta del canal "Vive Chile" se encuentra a la espera de nuevas noticias, y el Colegio de Periodistas regional declaró por los afectados.

Sebastián Castro Director Colegio de Periodistas Antofagasta
Lunes 11 de julio de 2016
Ataques laborales
Más de 17 trabajadores entre camarógrafos, periodistas y editores viven un incierto futuro laboral. Con la decisión por parte de Reinaldo Cabrera, nuevo dueño del canal “Vive Chile” de Antofagasta, de terminar los contratos, los comunicadores tendrán que esperar nuevas noticias por parte del empleador, quien definió este movimiento como “una reestructuración”.
El canal, perteneciente al consorcio “Medios del Norte S.A” (del grupo El Mercurio), viene pasando por un vaivén de momentos internos. La paradoja se encuentra en el futuro laboral de la totalidad de la planta, aunque aún no se sabe el paradero con certeza de cada trabajador.
Esta situación ya se había desarrollado con anterioridad con los dueños anteriores. A solo un mes de vender el canal, Mario Reygadas, ex dueño de la concesión, habría enviado una carta similar a sus trabajadores.
Esto deja en la mesa la precaria situación laboral de periodistas y trabajadores afines a los medios de prensa locales.
Necesidades de la empresa
La decisión, que afectó tanto a contrata como a honorarios, fue justificada mediante la exposición de las necesidades y el mal momento por el que pasa el mercado de la publicidad. Sin entrar en detalles se habla incluso de la posible reventa a agencias de comunicaciones ligadas a políticos criollos de la Derecha.
Aun así, solo quedan en rumores desmentidos sistemáticamente por Cabrera.
Y por abajo, el canal debe responder a un grande: VTR, empresa ligada a las comunicaciones es quien exclusivamente pone al aire cada programa de Vive Chile.
Los afectados
“Algunos nos dijeron que tendríamos contratos definidos”, “pasé de ser animador a ser camarógrafo”, “nos avisaron sin ninguna explicación”. Con estas declaraciones –y por razones de seguridad- un trabajador accedió a otorgar su testimonio a La Izquierda Diario.
“Yo entré a mediados de enero a hacer mi práctica al canal por un tiempo de un mes y medio y por un pago de 30 mil pesos por mes”, enfatizó el afectado. “Luego al pasar a febrero me pasaron a “plazo fijo” donde estuve boleteando esperando la promesa de que firmaría contrato por marzo abril y junio, a las finales no me hicieron firmar nada por distintas razones”, continuó.
“El 30 de junio, a los contrata les llegó una carta donde se exponía su desvinculación del canal; yo que era a honorario se me avisó mientras caminaba por el pasillo por el mismísimo dueño: ’tú trabajas hasta hoy no más, el lunes vienes a buscar tus honorarios’”, contó el trabajador, agregando que “las condiciones son precarias, el canal no se maneja como corresponde, yo trabajaba por 200 mil pesos de 9 de la mañana a 9 de la noche durante 4 meses, así no quiero seguir”.
Estas son las declaraciones de un trabajador, que al igual que los 16 restantes, está a la espera de una respuesta para este 5 de agosto próximo, donde se dará a conocer la decisión de reestructuración del medio televisivo.
Colegio de periodistas
Mientras se desarrollaron estos acontecimientos, y en reunión extraordinaria, el Colegio de Periodistas sesionó para ver una posible mediación como gremio profesional. Respondieron con una declaración pública la cual reproduciremos al final de esta nota.
La misiva tenía como fin exponer de manera cautelosa los acontecimientos para denunciar fuertemente las condiciones precarias de los trabajadores de la comunicación. Contratos precarios y desfavorables laboralmente son pan de cada día en medios de comunicaciones de cualquier rama.
La falta de un horario fijo también afecta de sobre manera y alienta la explotación del trabajo intelectual de periodistas, editores y camarógrafos.
“A través de esta declaración pública, queremos además insistir en que tanto el sector público como el privado deben resguardar y velar por las condiciones laborales de los periodistas, en cuanto a la forma de contrato, funciones de acuerdo a la profesión, medidas de seguridad en los desplazamientos, entrega de equipos de trabajos adecuados y en buen estado, respeto por los descansos legales y las actividades sindicales”, expresa la carta.
Esto pone al relieve la necesidad de fortalecer los canales de denuncia y organización como son los gremios entre trabajadores por fuera del “marco común".
Hoy más que nunca, con una legislación de reforma laboral que no responde a la modificación ni derogación del artículo 22 del Código del Trabajo, es que como trabajadores de la comunicación, periodistas y afines, deben tomar en sus manos la fuerza de la organización sindical y la colegiatura como una forma de nuclear fuertemente los intereses de los trabajadores de los medios.

Sebastián Castro
Periodista Audiovisual