NO MÁS AFP. Cara dura: Piñera busca restituir el 10% a las AFP y financiarlas con el nuevo bono de $200.000

El gobierno ingresó el viernes en la noche con carácter de suma urgencia, el proyecto de ley que contempla un bono para quienes quedaron con saldo cero en sus ahorros previsionales e insiste en la idea de “reintegro” de los dineros con la fórmula del 2%, 1% con cargo a las empresas y el otro 1%, con cargo al Estado.

Melero en sus declaraciones del fin de semana, intentando posar malamente como un gobierno “preocupado por el futuro de las cotizantes”, planteó ante la prensa que "Es importante que los chilenos hagamos un esfuerzo por recuperar el dinero que se ha sacado de las cuentas individuales para el ahorro previsional". Lo que llega a ser irritante ya que queda a la vista la maniobra del gobierno para seguir subsidiando a las repudiadas AFP.

Ante estas declaraciones de supuesta preocupación por la pérdida de los fondos previsionales de casi 3 millones de cotizantes, cabe preguntarse, ¿Por qué no muestran esa “responsable” preocupación cuando son las AFP las que pierden parte de los fondos de los cotizantes?, ¿Por qué ese esfuerzo que Melero nos pide que hagamos los y las trabajadoras para devolver el dinero, no se lo pide a los dueños de las AFP para que devuelvan lo que han perdido de nuestros fondos durante todos estos años?. Claro, ahí guardan silencio, justificándose en los supuestos vaivenes del mercado.

Cuando la plata va donde tiene que ir, es decir a los bolsillos de los trabajadores, ahí nos dicen desvergonzadamente que tenemos que devolverla. Pero cuando las AFP nos hacen perder dinero, en esos casos estaría todo en orden ya que serian parte de las “reglas del juego”. Queda a la vista de que lado están.

El 3er retiro no puede terminar siendo un préstamo blando “con aval del Estado”, que es en lo que Piñera, con la venia de la “Oposición parlamentaria” encabezada por la DC Yasna Provoste, quiere convertir el proyecto, mas aun, luego del vergonzoso acuerdo nacional que intentaron establecer el viernes 30 por la tarde, posterior al paro sanitario y que contó con el respaldo de Barbara Figueroa y la directiva de la CUT.

Que a Piñera, Melero y compañía, les quede claro, el pueblo de Chile despertó, ya no se traga ni las cocinas de la oposición con el gobierno, por lo que se peleó en las calles, con cacerolazos, barricadas en las poblaciones y con el paro portuario a la cabeza, fué por el retiro íntegro del 10 %, por No más AFP y por fuera Piñera.

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Por su parte, el diputado del PPD, Raúl Soto, avizorando el descontento que puede provocar esta medida tramposa, planteó que su bancada rechaza que se inyecten recursos a las administradoras de fondos de pensiones. Lo cual es una posición mínimamente aceptable, pero de un oportunismo tremendo del PPD ya que ellos durante los gobiernos de la concertación y en especial en su gobierno con Lagos, fueron unos de los principales defensores del sistema previsional. Además plantean algo que es obvio, a saber, que el gobierno debiera transferir el dinero directamente a las cuentas de las personas. Soto advirtió que no aceptarán “ni un peso más para las AFP”. Lo cual está por verse el día de hoy.

A su vez, incluso desde el oficialismo salieron voces a advertir que esta movida para inyectar recursos frescos a las administradoras de pensiones, podría generar rechazo en la población. El RN Jorge Durán, intentó advertir al gobierno de que "Lo que no es bien visto por las personas es que se les sigan inyectando recursos por fuera a las AFP". Lo que es correcto, pero él lo advierte para evitar que siga aumentando el repudio a su gobierno, no por no creer en los nefastos subsidios estatales a las empresas privadas.

Por otra parte Melero plantea que:"Espero que encontremos puntos de acuerdo, y en el nuevo ánimo que hoy día se ha instalado, espero que podamos convertir en ley esto a la brevedad y millones de chilenos puedan recibir este bono de $200 mil".

Sin embargo esta frase aparentemente inofensiva, es la que esconde la trampa del gobierno, ya que es engañoso al plantear genéricamente que ese bono podrán recibirlo las personas, dado a que según su propuesta va directamente a las AFP, no a las cuentas de las y los trabajadores y por otra parte, al también saber que puede ser una medida impopular, intentan que pase por secretaría rápidamente, para que no haya tiempo de que sea cuestionada por la población.

Lo dijimos fuerte y claro: No Mas AFP!

Aquí lo que hace falta, no es que con plata pública se busque poner un colchón financiero a las AFP, lo que necesitamos es que los empresarios de los fondos de pensiones “reintegren” todo lo que han perdido invirtiendo en la bolsa y todo lo que han ganado administrando nuestros fondos y con ese dinero levantar un nuevo sistema de pensiones público, de reparto, solidario y gestionado por los propios trabajadores y pensionados. Son ellos quienes tienen que devolver la plata perdida, no nosotros, ya que es dinero ahorrado con nuestro trabajo, es decir que nos pertenece. No más AFP.

El problema es que en el discurso corto, en la cuña periodística, lo que han intentado dejar los grandes medios asociados al poder empresarial, es la idea de un bono de $200 mil en general, lo cual ha hecho creer a mucha gente que será un bono de ayuda directa en sus cuentas, sin embargo lo que no se ha explicado, a mi juicio intencionalmente, es que esos $200 mil pesos que en total serían unos $900 millones de dólares, no irán a las cuentas de las personas, sino que irán directamente a los fondos de las AFP, para desde ahí puedan ser retiradas por la gente, una vuelta burocrática que lo único que busca es generar una beta de rentabilidad en las AFP.

Aquí lo que necesitamos a corto plazo, es el 3er retiro íntegro y sin devoluciones, los $200 mil depositados, no en los fondos de las AFP, sino en las cuentas directas de los cotizantes sin fondos, y además un plan de emergencia que contemple una renta básica universal igual a la canasta familiar ($550 mil), en base a un impuesto a las utilidades de las grandes fortunas nacionales y transnacionales, las llamadas “familias Forbes”.

A mediano plazo necesitamos un plan de nacionalización, sin pago, de los recursos naturales y las empresas estratégicas bajo gestión de sus trabajadores, para financiar salud, educación, vivienda y alimentación pública. Lo cual no podrá ser conquistado sin lucha, los portuarios marcaron el camino, ahora es preciso continuarlo. Vamos por no más AFP, por fuera Piñera y por una Asamblea constituyente libre y soberana, es decir, sin el TC ni el parlamento encima y que pueda resolver medidas de fondo que apunten a proteger y beneficiar realmente a las grandes mayorías obreras y populares.