OPINIÓN. Carta a la militancia kirchnerista luego del acto del 20 de Junio

Ayer cuando salía del Monumento, después de cubrir para La Izquierda Diario otro acto con vallas, militarizado a más no poder y antidemocrático, algo a lo que nos está acostumbrando Mauricio Macri y el gobierno de Cambiemos, me crucé a una militante kirchnerista que estaba haciendo prensa y presenció el momento en que la gendarmería avanzó sobre manifestantes opositores. Sintió impotencia y venía llorando. Le consulté qué le pasaba y si podía ayudarle y nos contestó: "Disculpen que estoy así, pasa que nunca viví una cosa así"...

Fue inevitable que sus palabras me generen un poco de pena pero también bronca, al recordar que siempre los palos los recibíamos nosotros cuando ellos gobernaban. Siempre. "Y no", pensé. "Nunca te pasó algo igual porque vos bancaste a un gobierno que mandaba a esa mismísima Gendarmería a agujerear a balazos a mis compañeros", pensé en que le diría cuando se tranquilizara.

Muchas, muchas veces. Nunca te pasó de estar el día entero esperando que te manden novedades de tus compañeros detenidos y heridos... o que te envíen un mensaje antes de un piquete diciendo que lleves DNI y zapatillas por si hay que correr. Porque a los gendarmes no les gusta hacernos correr solo cuando gobierna Macri, sino que perfeccionó ese deporte bajo entrenamiento kirchnerista. Sino fijate en Lear, Liliana, Casino Flotante, Garrahan, docentes, petroleros, tantos lugares donde se levantaron los palos contra el pueblo trabajador pero con conducción "nacional y popular". En cada una de esas represiones y en cada uno de esos silencios de los que bancaron al gobierno, se fue cocinando el crecimiento de una derecha como la de Cambiemos.

Nunca te pasó, pensaba, que veas vídeos de tus compañeros frente a frente con alguna fuerza de seguridad (porque "nos mandaron" varias) y que se coman todas las balas y que te de ganas de llorar del odio. O ver que se lleven detenida a una nieta recuperada como Victoria Moyano. Y eso no pasó (aún!) con Macri, sino con Cristina y con Berni.

Nunca te pasó tener que marchar porque te mataron a Mariano Ferreyra, nunca te pasó que la patota sindical de la UOM (sí, sí, esos mismos que el otro día marchaban "contra los despidos"), amenace al lado tuyo a compañeros obreros para que levanten el piquete.

Nunca te pasó tener que esperar en una comisaría hasta altas horas para que larguen a tus compañeros y nerviosa de no saber como está ahí adentro, (porque ya sabemos como se la pasa en las comisarias). En fin, cuando eras gobierno no te molestaba mucho la Gendarmería, Berni o Milani ¡Si de hecho fueron las organizaciones sociales K las que pidieron y trajeron gendarmes a Rosario! ¿O realmente creyeron que venían a hacer "progresismo"? No. Venían a meter palos a los pibes de los barrios, a los laburantes y a los que salgan a las calles. Ahora te pasó y, ojalá, estés entendiendo todo lo que vivió la izquierda durante 12 años que nos vendieron como un paraíso.

Si te dio impotencia, como nosotros la sentimos desde hace mucho, sería lindo que se enfrenten y se pronuncien contra el ajuste represivo de las gobernadoras del Frente para la Victoria, Alicia Kirchner Y Rosana Bertone, y luchen, como hacemos nosotros junto a los trabajadores, para que afloje con las balas en el sur. Son trabajadores luchando, pediles que no los repriman más, porque ellas hacen todos los días cosas que hacen quedar como un juego de niños los momentos represivos del Monumento. Porque quejarse de Macri mientras se comparte partido con esos funcionarios represivos, con gente como Omar Perotti que disfrutó plácidamente del acto en el Monumento suena, por decir poco, hipócrita. Una división de tareas que, nosotros, no compramos.

El silencio cómplice ya viste y ya vimos adónde nos condujo.

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Jazmín Levi es periodista y miembro del Centro de Profesionales por los Derechos Humanos de Rosario. Luchadora contra el gatillo fácil en la ciudad de Rosario