De origen humilde, su primer trabajo fue como operario de máquinas de hielo, al igual que su padre, que trabajaba en una fábrica. Abandonó sus estudios en busca de su sueño de ser cantante, inspirando fundamentalmente en Elvis Presley, Chuck Berry y Little Richard.
Viernes 19 de agosto de 2016
Su primera banda se llamó Garth Rocket and the Javellins y Gillan no solo cantaba sino que también tocó la batería. Luego recala en Episode Six para finalmente ser convocado junto a su amigo Roger Glover para sumarse a Deep Purple e integrar el inigualable Mark 2.
El debut de Ian Gillan con DP fue la histórica presentación en el Albert Royal Hall donde interpretaran el célebre Concerto para Grupo y Orquesta, y Ian inaugurara la impresionante Child in Time.
En esa época, casi no tenían para comer y el manager con los primeros dineros, les tuvo que comprar ropa y lo que ganaban se les iba todo en gastos y el propio Glover ha confesado que se ataba los pantalones con los cordones de sus zapatos.
Con la salida del disco IN ROCK, el mark 2 de DP comenzó a entrar en la historia grande, inventando un género que perdura hasta hoy y donde Ian Gillan no solo demuestra su enorme potencia y versatilidad sino que crea una forma de cantar, imitada por gente como Halford, Dickinson, etc.
En pocos años se suceden como un huracán, Fireball, Machine Head y el apoteótico Made in Japan, calificado como el mejor directo de la historia.
En medio de todo ello, Ian es convocado por los célebres Tim Rice y Lloyd Weber para grabar el disco original de la ópera rock Jesucristo Superstar en el personaje de Jesús, del cual se destaca la increíble interpretación en la canción Getshemaní.
Agotado por las giras y peleado con Blackmore, Gillan renuncia a la banda en 1973, debiendo ser reemplazado por Coverdale y Hughes, dado que su amigo Glover queda fuera de la banda al poco tiempo.
Al poco tiempo, Gillan inicia su carrera solista con una mezcla de jazz rock en la IGB y luego rotando hacia un perfil más rockero en la banda simplemente bautizada con su apellido, sacando discos como Scarabus, Future Shock, Magic y ganándose el apodo de Mr. Universe.
Luego de una operación de su garganta de plata, y sin esperar el reposo debido, y en medio de una noche de borrachera en un bar junto a su amigo Iommi, se une a Black Sabbath para el tan polémico como demoledor Born Again.
Llegado el año 1984, se produce la reunión más esperada y Deep Purple nos regala un discazo: Perfect Stranger. Luego se suceden The House of the Blue Ligth y el directo Nobodys Perfect, luego de lo cual, Gillan es expulsado de la banda por pedido de Ritchie Blackmore.
Gillan retoma su carrera solista y producto de esa etapa, son los discos Naked Thunder y Toolbox, cuyas giras tocaron nuestro suelo, siendo el primer miembro Purpura en pisar la Argentina en los años 91 y 92, haciendo temblar en varias funciones el mítico estadio cerrado de Obras, en una serie de noches inolvidables.
Mientras tanto, Deep Purple entraba en su etapa más oscura, con el fallido disco Slaves and Masters con Joe Lynn Turner. Producto de una gira que no convenció a los fans, a pedido de Lord, Paice y Glover, vuelven a llamar a IG, quien retorna a DP y sacan el disco The Battle Rages On.
Disgustado con tal situación, Blackmore abandona DP en medio de la gira, sumándose temporariamente a DP el guitarrista JoeSatriani quien luego recomienda a Steve Morse, quien se suma a DP en 1996 y hasta nuestros días, donde la DP saca los discos Purpendicular, Abandon, Bananas, Rapture of the Deep y Now What, llevando su música a todo el planeta, luego de giras exitosas de hasta 7 años de duración y visitando asiduamente la Argentina en shows memorables.
¿Qué podemos decir del gran Ian Gillan que no se haya dicho? Que es un tremendo vocalista, que aun a sus 71 años sigue rockeando, que jamás fue un poser, que le basta un jogging y cantar en patas para patear traseros solo con su voz, que compuso la letra de Black Nigth durante toda la noche sentado en la barra de un bar, mientras probaba todas las botellas de la vitrina, que fue capaz de cantar junto a Pavarotti Nessun Dorma y en dos ocasiones, que sus temas solo quedan bien cuando los canta él, que tuvo una potencia inalcanzable, un registro único, lleno de matices, capaz de cantar metal, rock, blues, pop, que nos ha hecho saltar, vibrar, llorar, reír y más con solo oírlo cantar. En definitiva, que IAN GILLAN es la voz que musicaliza nuestras vidas hace solo 53 años y sigue conmoviendo como entonces.
