Este viernes 22 de julio se realizó una nueva audiencia, en la pelea que están llevando adelante las trabajadoras y los trabajadores de FyRSA contra los despidos ilegales y el cierre de la planta que realizó la patronal. El conflicto, que se inició el 6 de julio ante el no pago de la quincena, el aguinaldo y otras deudas que se acumulaban desde las vacaciones, continúa. Es necesario rodear de solidaridad esta lucha.
Viernes 22 de julio de 2022 19:54
A las 11.30 de este viernes 22 de julio se inició una nueva audiencia en la subsecretaría de trabajo de Trelew entre el sindicato, la secretaría de pesca y la patronal de FyRSA (quién no participó en la reunión de forma presencial).
Recordemos que el pasado martes 19 de julio se había firmado un acta donde la empresa que ese día se hizo presente iba a enviar los telegramas reincorporando al total de los despidos, iba a mantener la planta abierta y Newsan se comprometía a pagar la quincena adeudada, si se permitía salir al pescado procesado.
Al iniciarse la reunión, solo se había cumplido la parte que le tocaba a hacer a los trabajadores, es decir, dejar salir el pescado procesado en un camión que envió Newsan y que salió hacia la planta de Mar del Plata el jueves 21 después de las 19 horas. Pero, de parte del compromiso de la patronal, no había noticias. No habían llegado los telegramas reincorporando a los despedidos, ni los cheques o deposito de la quincena adeudada.
Al salir de la reunión, desde el STIA, se informó que “al llegar el camión a Mar del Plata, Newsan estaba enviando, vía área, a una persona para que haga efectivo los pagos, que se harían el lunes o martes depende como se efectivice el pago” y sobre los telegramas de reincorporación se señaló que “se volvió a reclamar que se haga efectivo ese punto del acta del martes”.
Tras 16 días de lucha, las trabajadoras y los trabajadores se mantienen firmes en la pelea, pero también crece la bronca por nuevas promesas incumplidas de parte de la patronal. Está claro que las necesidades de unos y otros son diametralmente opuestas.
Unos, los empresarios disfrutan de su vida lujosa con los millones que ganan de la explotación de los recursos naturales y de la explotación del trabajo humano, con bajos salarios y en pesos, cuando ellos amasan sus fortunas en dólares. Los otros, los trabajadores, viven al día, tienen la presión de pagar el alquiler, la luz, el gas y bancar la olla de la casa. Si cuando trabajan y les pagaban (por debajo de la canasta familiar), la quincena apenas alcanzaba para pagar el alquiler y la comida, ahora sin el salario de dos quincenas, la situación se agrava día a día.
A ellos lo protegen la justicia, la policía y el gobierno para que hagan lo que quieran. Y hasta mandan a la policía para hacer espionaje ilegal a las y los 300 trabajadores que ocupan y acampan en la planta de Rawson en medio de este crudo invierno.
Nosotros, los trabajadores, que somos los que generamos la riqueza y somos la única clase productora de esta sociedad, en este caso en FyRSA, es necesario buscar las formas de ganar para la lucha el apoyo popular, de los trabajadores, de la juventud, de las asambleas ambientales, de otros sindicatos como el de los docentes que este lunes 25 no inicia las clases y lanzó un paro de 48 horas. Ahí están las fuerzas para derrotar este ataque de la patronal y el gobierno.