Miércoles 4 de febrero de 2015
Los servicios de inteligencia, son organismos inseparables a las necesidades de los estados con el cual los capitalistas del mundo persiguen, espían y fabrican causas contra sus enemigos políticos y conspiran contra el pueblo trabajador.
Tras la muerte dudosa del fiscal Nisman, que investigaba el atentado a la AMIA, se reveló un entramado mafioso entre los servicios y el estado argentino.
El cine también da cuenta de ello desde hace décadas. Presentamos una serie de films sobre espionaje y conspiraciones.
En esta oportunidad vamos a presentar la primer parte de la trilogía de Jason Bourne, "El caso Bourne" ( The Bourne Identity), de Doug Liman, 2002.
Jason Bourne es un personaje de ficción creado por Robert Ludlum (fallecido en 2001 en la ciudad de Nápoles, Florida) para sus novelas de espionaje, conocidas como El caso Bourne, El mito de Bourne y El ultimátum de Bourne.
Jason Bourne, es un miembro élite de los cuerpos especiales de la CIA, sufre episodios de "amnesia traumática" a raíz de un incidente en una operación secreta en Europa, y mientras lucha por descubrir su identidad, se ve involucrado en una red de espionaje y manipulación de gobiernos por parte de los Estados Unidos donde será perseguido por asesinos profesionales, mercenarios paramilitares, y ex compañeros de la CIA.
La primera de la trilogía:
El caso Bourne (The Bourne Identity)
Basado muy libremente en la novela de Robert Ludlum, Un hombre amnésico es rescatado por una tripulación de un barco pesquero italiano cuando flota a la deriva en el mar. No lleva nada consigo, sólo las balas que lleva clavadas en la espalda y un número de cuenta de un banco suizo que lleva adherido a la cadera. Carece de identidad y de pasado, emprende una búsqueda para descubrir quién es y por qué su vida ha tomado un giro tan peligroso.
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