El estreno de "Juan de los muertos" en Argentina, la película de zombis cubanos, es de esas gratas sorpresas que dan aire fresco entre tanto cine hiperindustrial que abarrota las pantallas nacionales. Con un guión bien planteado, humor acido, crítica social y política.
Javier Gabino @JavierGabino
Jueves 11 de diciembre de 2014
De golpe La Habana se llenará de zombis cumpliendo el ciclo del género, de manera viral el contagio de uno se multiplicará en decenas, centenas y luego miles de infectados por mordidas y ataques hasta cubrir la ciudad. Pero a diferencia de la mayoría del cine zombi, nuestros antihéroes Juan y Lazaro no verán en ello nada más raro que mucho de lo que han vivido. "Sobreviví al Mariel, sobreviví a Angola, sobreviví al período especial y a eso otro que vino después... ¿no voy a sobrevivir a esto?" dirá Juan con absoluta idiosincrasia cubana.
Como es debido, el gobierno controlando los medios de comunicación ocultará el hecho, señalando que el caos es generado por "disidentes" apoyados por Estados Unidos. Mientras la cosa se va de madres, ellos se tendrán solo a sí mismos para enfrentar la situación, y montarán un negocio para sobrevivir bajo el slogan: "matamos a sus seres queridos". Juan junto a su hija Camila, con quien lleva una dura relación sentimental; Lazaro junto a su hijo "California"; y la tropa se completará con "la china" y su novio, un negro gigante que es claramente "chocolate pa’ to’ el invierno".
Juan de los muertos tiene todos los tópicos del género, pero a la manera del buen cine cubano: con un guión bien planteado, humor ácido, crítica social y política. Aunque la historia se desarrolla en la superficie de este tipo de films, siguiendo un esquema predecible, se vuelve profunda al arraigarse en Cuba, en sus problemas internos, el desarraigo familiar, la lucha por la supervivencia, las fantasías del escape a Miami, el bloqueo económico, el antiimperialismo. Con los zombis en La Habana se construye una sátira como solo los cubanos pueden hacer, explotando su espíritu auto paródico y riéndose de sus propios problemas de manera descarnada.
Es de destacar que todo esto se logra tomando un género nunca explotado antes en la isla, lo cual no es nuevo, puesto que desde los comienzos de ICAIC en pleno proceso revolucionario, los cubanos se apropiaron de los estilos hollywoodenses para darles una impronta propia, nacional. Juan de los muertos se puede disfrutar en cualquier parte del mundo, pero será más sensible al pueblo de Cuba. Hasta el contexto secundario del film, por ejemplo los derrumbes de edificios que son "parte del paisaje" de la invasión zombi, son algo lamentablemente real en la vida de La Habana, será por eso que ni Juan, ni Lazaro reparan en ello como algo terrible. La película está repleta de estos guiños. "¿Ves algo distinto?" se preguntan ante una calle llena de zombis, "nada" responde otro.
Una de las líneas de interpretación sobre el "cine zombi", alude a la crítica de la sociedad de consumo, en este análisis: los zombis somos nosotros, entre otras cosas, llevados al paroxismo y comiéndonos unos a otros en el mercado. El nacimiento de este subgénero de terror estuvo ligado a la crítica social y política, en especial por quien es considerado su "padre", el director George A. Romero. Sus films de muertos vivientes se abren con lo que es considerado un cuestionamiento a la guerra de Vietnam (La noche de los muertos vivientes -Night of the living dead- de 1968), pasando por el ataque al militarismo de la era Reagan (El día de los muertos -Day of the dead- 1985), y llegando hasta nuestros días. "Juan de los muertos" se inscribe a su manera bizarra en esa línea, la mejor de un genero imposible de medir en todas sus variables mundiales.
Otra línea de interpretación propia ante el cine zombi, es que el atractivo de "el caos" generado por una invasión que destruye el mundo cotidiano, reside en que obliga a resetear todos los valores podridos de este sistema, y a su puesta en marcha nuevamente, con posibilidades de hacerlo de manera genuina. En esta línea de análisis, el grupo que se forma para enfrentar la invasión (por lo general entre gente que no se conocía previamente) es el eje del deseo y la atracción. Bajo la imposibilidad de cambiar el mundo de conjunto, al menos un grupo reducido puede reencontrar los valores de amistad, amor, solidaridad, y vivir aventuras, aunque sea en un mundo distopico. Si bien "Juan de los muertos" cumple al pie de la letra la formación del grupo resistente, aquí la distopía parece no existir, la invasión es solo una variante de la vida cotidiana.
El estreno de "Juan de los muertos" en Argentina, la película de zombis cubanos, dirigida por el argentino Alejandro Brugués, es de esas gratas sorpresas que dan aire fresco entre tanto cine hiperindustrial que abarrota las pantallas nacionales. Incluido obviamente el cine zombi en esta apreciación, como la fascistoide "Guerra mundial Z" ("War World Z", 2013) dirigida por Marc Forster y protagonizada por Brad Pitt.
Como es normal en una película cubana (aunque cuenta también con financiamiento español), llega a nuestro país casi cuatro años después de su realización en la isla (2010), ya que no cuenta con el inflador de una distribuidora multinacional. Recibió varios premios en festivales, personalmente había podido ver una copia pirata hace dos años. Al igual que "7 cajas", el thriller paraguayo del mercado cuatro, quizás demuestra que el film de género, nacido en Estados Unidos, en la decadencia del imperio encuentra vitalidad allende las fronteras, en las "exóticas" tierras donde el polvo de oro no tapa los ojos de los realizadores, que lo que quieren es solo hacer cine, y si es posible divertirse. Que el cine es eso: un divertimento de feria ¡Para ir a ver!
Título original: Juan de los Muertos (Juan of the Dead)
Año: 2011
Duración: 94 min.
País: Cuba
Directo: Alejandro Brugués
Guión: Alejandro Brugués
Música: Sergio Valdés
Fotografía: Carles Gusi
Reparto: Alexis Díaz de Villegas, Jorge Molina, Andrea Duro, Andros Perugorría, Jazz Vilá, Eliecer Ramírez, Antonio Dechent, Blanca Rosa Blanco, Elsa Camp, Luis Alberto García, Susana Pous
Productora: Coproducción Cuba-España; Producciones de la 5ta Avenida / La Zanfoña Producciones / ICAIC / Canal Sur / TVE
Javier Gabino
Nació en Santa Rosa, La Pampa, en 1972. Grupo de Cine Contraimagen. Codirector, guionista y montajista de La internacional del fin del mundo (2019), la serie Marx ha vuelto (2014), Memoria para reincidentes (2012) y diversos materiales audiovisuales sobre revoluciones y luchas obreras.