Sectores de las Iglesias Evangélicas presentaron un proyecto para que la ciudad de Cipolletti sea declarada “provida y profamilia”. El movimiento de mujeres rechaza ampliamente la medida y exige que las Iglesias evangélicas y católicas dejen de meterse en la vida de las mujeres.
Lunes 6 de mayo de 2019 11:55
El 10 de mayo de 2018, se presentó ante el Concejo Deliberante una iniciativa por el Consejo de Pastores de Cipolletti, que busca declarar a la ciudad “provida y profamilia” y adherir al Decreto Nacional 1.406/98 que propone declarar el 25 de Marzo como Día del Niño Por Nacer. Éste proyecto, según sus autores, tiene como fin de mostrar “un claro compromiso desde el municipio y de toda la comunidad para el cuidado y respeto de toda vida humana desde la concepción hasta la muerte natural”.
El Intendente Aníbal Tortoriello, ha mostrado su compromiso con los sectores providas, participó de actos y eventos impulsados por las iglesias locales contra el aborto cuando se discutía en el congreso la ley de interrupción voluntaria del embarazo. Desde Pan y Rosas y el Frente de izquierda estuvieron en la vereda opuesta, juntos a las y los jóvenes de la marea verde exigieron por el aborto legal, la separación de la Iglesia del Estado y para que se sancione la ley de emergencia contra la violencia machista. En medio de una crisis económica profunda por la que atraviesa el país el proyecto es una provocación a las mujeres y a las familias trabajadoras.
Ana Morero, referente de la agrupación Pan y Rosas y candidata a Intendenta sostuvo que “es una declaración polémica llamar próvida a la ciudad de los 2 triple femicidios que aún continúan impunes, la ciudad donde hay desaparecidas por redes de trata. Es una provocación hacia el movimiento de mujeres que salió a pelear por el aborto legal seguro y gratuito. No vamos a permitir que la iglesia se siga metiendo en nuestras vidas y decimos claramente que la Iglesia y el Estado son asuntos separados” afirmó Ana.
Río Negro está entre las 10 primeras provincias con la tasa más alta en femicidios, en Cipolletti se registraron 14 casos en los últimos 30 años. Muchos aun continúan impunes, mientras que la única casa refugio para más mujeres que buscan salir de la violencia machista ya no tiene lugar. El cuidado y respeto por la vida que dicen defender esos sectores es una hipocresía cuando siguen muriendo mujeres por la violencia machista y por la clandestinidad del aborto.
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En medio de una crisis económica profunda por la que atraviesa el país, el proyecto es una provocación también para las familias trabajadoras que sufren la falta de empleo, los tarifazos y ven como día a día se deterioran más sus condiciones de vida. Se estima que unas 4.000 familias viven en tomas, donde las obras públicas y los servicios básicos como la luz y el gas no llegan. Decenas de pibes no estudian ni trabajan y muchas familias se ven obligadas a vivir debajo del puente o en la ladera del basural.
Ana Morero aseguró también que “la marea verde va a seguir luchando para que ni los pañuelos celestes ni los dinosaurios nos arrebaten nuestro derecho a decidir, pero también vamos a estar en las calles junto a nuestros compañeros enfrentando éste régimen de hambre y pobreza que viene aplicando Cambiemos de la mano del FMI y el Peronismo cómplice.”
La avanzada de los sectores celestes se da en el marco del agravamiento de las condiciones sociales y de vida de un gran número de personas. Proponernos un futuro digno, no puede ser de la mano de las Iglesias que son cómplices de los gobiernos de turno que aplican el ajuste en curso. Hay que construir una gran fuerza social para derrotar el régimen del FMI. La plata se tiene que destinar para garantizar el acceso a la salud, a educación a la creación de empleos y planes de vivienda.
Desde el PTS en el Frente de Izquierda peleamos por una vida libre de mandatos religiosos y de opresión. Nos organizamos para terminar con el sistema capitalista que condena a la miseria absoluta a miles de personas todos los días. Impulsamos la más amplia movilización de las y los trabajadores, para imponer una salida en ruptura con el capitalismo y por un gobierno de trabajadores, por una vida que merezca ser vivida sin oprimidos ni explotados.