El pasado 8 de octubre se sancionó la prórroga de la Ley 27.507 en emergencia económica, productiva, financiera y social en las Provincias de Entre Ríos, Corrientes, Misiones, Jujuy y Salta, que incluye beneficios fiscales a los empresarios de toda la cadena productiva de la actividad citrícola. Además, este año, incorporaron a las provincias de Buenos Aires, Tucumán y Catamarca que no estaban en la Ley original.
Juan Rovere @juanroverepts
Sábado 24 de octubre de 2020 20:15
La prórroga fue festejada por la Federación de Citrus y las cámaras patronales que se dedican a dicha actividad. ¿En qué consiste la Ley? Centralmente en la prórroga, por un año más, de los vencimientos de impuestos impositivos y de la seguridad social, con el irrisorio interés del 1%.
A modo de ejemplo, un trabajador a quien le descontaron los respectivos aportes de seguridad social, la empresa en vez de depositar esos aportes al Estado se los queda durante todo un año, y luego puede puede acceder a un plan de pagos de hasta 90 cuotas para cancelar.
De la misma forma, el 21% por ventas de algún producto citrícola que la empresa le cobra al consumidor, en vez de abonarlo al Estado, puede pagarlo en cuotas. Eso sí, la primera cuota es luego de un año. Y con esta nueva prórroga tienen otro año de gracia.
El negocio de dicho beneficio está en que si, por ejemplo, esos fondos que mes a mes le descuentan al trabajador lo pusieran en la bicicleta financiera, obtendrían intereses de alrededor el 35% por año, mientras que al estado sólo tendrían que abonar anualmente un 12% y empezar a pagar en 2021. En los dos ejemplos citados, no se trata de plata del empresario que deja de aportar al Estado, sino de plata de los trabajadores y/o consumidores que los empresarios utilizan como forma de financiarse sus negocios.
Eso no es todo, por si fuera poco, la Ley establece la suspensión del pago de los aportes patronales por 2 años, desfinanciando aún más al ANSES.
Recorte a los trabajadores
Según las cámaras empresariales, el sector emplea a alrededor de 100 mil trabajadores en todo el país, los que en su gran mayoría tienen empleo estacional, por entre 3 y 6 meses. Son los llamados trabajadores golondrina ya que en su mayoría deben trasladarse de provincia en provincia buscando trabajo para poder sobrevivir los meses que no hay cosecha.
Sin embargo, la Ley de emergencia no se refiere a este verdadero drama que viven los trabajadores, ni trata de buscar una forma para que le aseguren ingresos durante el período interzafra o intercosecha.
De hecho, la resolución del Ministerio de Trabajo que rige el abono de los planes interzafra para los trabajadores temporarios del agro (del citrus, pero también del tabaco, la fruta, etc) tuvo un importante recorte. A modo de ejemplo, de los 100.000 trabajadores del cítrus en todo el país informado por la Federación de Citrus, este año el gobierno sólo realizará un aporte sólo a 19.950 trabajadores en todo el país, menos del 20%.
Dicho aporte, además, será de apenas $7.000, un tercio del salario mínimo vital y móvil establecido por el propio gobierno. Además, no se abonará durante los meses de inactividad como lo establece la resolución ministerial, sino que sólo durante 3 meses.
Por una Ley de planes interzafra
La prórroga Ley de emergencia fue promovida por gobernadores como Bordet de Entre Ríos, Juan Manzur de Tucumán y Gerardo Morales de Jujuy, entre otros. Una de las promotoras de la prórroga es justamente la diputada jujeña Carolina Moisés quien realizó publicitad en sus redes sociales de dicho beneficio a los empresarios que va en perjuicio de los jubilados del ANSES. El grupo Ledesma, el mayor productor de citrus de dicha provincia y que podría ahorrarse de pagar aportes patronales a más de dos mi trabajadores por dos años, agradecido.
En contraste, desde las bancas del PTS-Frente de Izquierda de Jujuy, mediante el diputado Alejandro Vilca, presentaron en el parlanoa un proyecto de declaración para que la cámara de diputados de la nación sanciones una Ley que otorgue el beneficio de plan interzafra a los trabajadores temporarios, equivalente al salario mínimo vital y móvil y financiado con impuestos a los empresarios agropecuarios y terratenientes.
Además, el reclamo de los trabajadores del citrus contra el recorte a los planes ya se hizo sentir primero en Tucumán y ahora en Jujuy, pero amenaza a transformarse en una crisis nacional atento los problemas para el traslado de los trabajadores golondrina, que se quedarán sin esos ingresos que les permiten sobrevivir los meses intercosecha.