Clases, trabajos prácticos y mesas de exámenes. Detrás de la virtualidad se esconde la elitización creciente de la universidad y nuevas formas de precarización docente
Viernes 26 de junio de 2020 15:38
“Yo no deje la facultad, la facultad me dejó a mí. Si estudias y laburas como yo, que soy precaria, estas re jodido para el ritmo que exigen”. “Votan cosas en contra de que pueda seguir estudiando”. “Estamos haciendo mil cosas para poder transmitir los contenidos, pero no puede ser solo nuestra voluntad”. Estas frases recorren redes sociales y grupos de WhatsApp de muchas facultades de la UNT. Las autoridades responden algo así: “no tenemos, ustedes tienen el problema”
El gremio de los docentes universitarios, ADIUNT (Asociación de Docentes e Investigadores de la UNT), sacó hace unos días una solicitada en el diario La Gaceta, donde plantean como la modalidad virtual ligada a ningún tipo de acompañamiento de medidas de emergencia está haciendo avanzar la precariedad y un aumento en la carga de horas de trabajo no reconocidas por nadie. Aproximadamente el 40% de los estudiantes de algunas facultades de la UNT no tienen posibilidad de acceso a computadoras e internet permanente, frente a esta brecha enorme que muestra las desigualdades dentro de la Universidad, las autoridades hacen oídos sordos. Una política que solo puede significar mayor elitización.
Algunos ejemplos que le dan voz a muches que tanto las autoridades Universitarias como los Centros de Estudiantes se vienen negando a levantar:
“Estudio Psico, me echaron del call center, obvio con todo eso tuve problemas para cursar y en la facu me dicen que el problema es mío”
“La sensación es que te están diciendo que ya no es tu lugar, que vos sos otra cosa, no un miembro de la Universidad, sino un individuo que se la tiene que arreglar. Uno esperaría otra cosa”.
La crisis está pegando, solo hace unos días se conoció el dato de que Tucumán es la provincia donde más creció la desocupación, son montones de estudiantes y familias quienes se están quedando sin laburo. La precarización que vive la juventud y que en estos momentos de crisis afecta con despidos o con peores condiciones laborales es una realidad que no existe para las autoridades universitarias. Para ellos todo el problema es técnico, no social. Lo niegan, por eso hasta el momento se han negado a hacer público del dato de cuantos estudiantes han abandonado sus estudios.
Las conducciones de los Centros de Estudiantes hasta el momento se han negado a decir algo respecto de la preocupación que hay. Todo se resume a ir a los Consejos Directivos y decir que se rechaza formalmente. La pasividad que muestran frente a estos problemas es enorme.
Desde la Juventud del PTS y las agrupaciones que formamos en muchas Facultades de la UNT, planteamos que la vida de los estudiantes precarizados, que están siendo obligados a abandonar sus estudios como la de los docentes que están cargando con el peso de la virtualidad y la precarización importan. Queremos proponernos dar una lucha en común, exigiendo a las autoridades y al gobierno que garanticen un conjunto de medidas de emergencia. No podemos quedarnos de brazos cruzados cuando les estudiantes denuncian que es la Universidad quien los está abandonando.
Ellos ya decidieron, ahora nos toca decidir: docentes, estudiantes y no docentes juntos contra la deserción y la precarización
Hasta el momento, las autoridades de la UNT demostraron que no les interesa escucharnos, ni a lxs cientos que se quedaron afuera, ni a lxs que frente al alto nivel de exigencia y las múltiples restricciones hacen de todo para poder seguir estudiando, ni a lxs que en sus laburos y en sus familias la situación empeora cada vez más. Demostraron que no les tiembla el pulso para votar medidas que nos ponen aún más obstáculos, y sobre todo, demostraron que no nos representan, quedó en evidencia que la manera en la que las decisiones se toman en la universidad, es de todo menos democrática.
¿Si nosotrxs somos quienes hacemos funcionar la universidad, entonces por qué quienes eligen qué medidas tomar son otros? Nosotrxs sabemos que lo que se viene es una enorme crisis, y sabemos también que si dejamos todo en manos de los responsables de la elitización de la universidad, lo que le espera a la educación pública no es nada bueno. Los estudiantes, junto a los docentes y no docentes podemos darle una salida a esto. La única manera de que no salgamos perdiendo es conquistando espacios en donde debatir y votar nuestras propias medidas en instancias comunes, como Asambleas Interclaustro. Organizar la fuerza para enfrentar una orientación que viene trayendo deserción y mayor precarización laboral sobre docentes y no docentes. Porque si nosotrxs no nos preparamos para lo que se viene, nos organizamos ya y luchamos en defensa de la educación y de nuestros derechos, nadie mas lo va a hacer. Tenemos la fuerza, ahora hay que organizarla.