Educación Superior. ¿Cómo enfrentar el recorte al presupuesto de las Universidades?

El Gobierno Federal a través de la Secretaría de Educación Pública (SEP) ha implementado diversas medidas que atentan contra la gratuidad, el carácter crítico y social de la educación.

Entre estas medidas se encuentran la Reforma Integral a la Educación Media Superior, el Sistema Único de Bachillerato que plantea la estandarización de los planes educativos a nivel nacional, el sistema de competencias y la mal llamada Reforma Educativa que se viene implementado a sangre y fuego.

Así mismo cientos de miles de jóvenes son excluidos de la educación, las universidades permiten y fomentan la inversión de empresas y se aprueban planes de estudio de acuerdo con la exigencia de los empresarios, para formar profesionistas especializados en aquellas carreras prioritarias para el capital y la producción fabril, mientras las carreras de sociales y humanidades son atacadas.

Movilizaciones en defensa de la educación

La privatización de la educación no sólo es el cobro de cuotas, el ajustar a las Universidades recortando el presupuesto, es la forma para justificar medidas como la entrada de capital proveniente de empresas, el recorte a la matrícula, la disminución de becas, la contratación de profesores con sueldos de miseria y el ataque a los derechos laborales de los trabajadores — reduciendo las conquistas establecidas en su contrato colectivo— así como la contratación bajo la figura del outsourcing. Pasos preliminares para entregar las escuelas públicas a la iniciativa privada.

Estudiantes de diversas universidades han protagonizado movimientos para exigir el pago del presupuesto por parte de los Estados. Ejemplo de estas luchas son las y los estudiantes en unión con los docentes de la Universidad Veracruzana (UV) que exigieron el pago del adeudo estatal de más de 2 mil millones de pesos y denunciaron el plan a largo plazo de Javier Duarte para desmantelar la universidad.

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También los estudiantes de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), se movilizan exigiendo el pago de 500 millones que debe el gobernador Graco Ramíreza esta institución. Los aspirantes excluidos de la Universidad de la Universidad Michoacana que mantuvieron tomadas las instalaciones hasta resolver el problema de la matrícula.

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También hay que considerar la lucha de los estudiantes politécnicos que vienen enfrentando la política de tecnificación y desmantelamiento del Instituto Politécnico Nacional (IPN) y la lucha de las y los estudiantes de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) que denunciaron los planes de privatización y desvío de fondos por parte de las autoridades. En la Facultad de Estudios Superiores Acatlán de la UNAM se movilizaron contra el recorte de matrícula en carreras pertenecientes a la área de Ciencias Sociales

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A estas luchas se suma la lucha de los maestros de la CNTE que enfrentaron al Gobierno Federal para abrogar la reforma educativa. Más de 70 sindicatos de las Universidades emplazaron a Huelga con el objetivo de no permitir el recorte al presupuesto a la educación y al sector de ciencia y tecnología.
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Ajuste al sector educativo.

El Presupuesto de Egresos de la Federación de 2017 aprobado. Estipula un recorte de más de 37 mil millones de pesos a la educación superior, los recortes van del 3 al 9% del presupuesto actual, la más afectada es la Universidad de la Ciudad de México (UACM) a la cual no se le destinó presupuesto, en la lista se encuentra el IPN y la UAM. La única Universidad que no tendrá un recorte será la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM)

Los rectores de diversas Universidades se han opuesto al recorte, en sus declaraciones exhortan a cerrar filas frente al recorte y llamaron a la sensibilidad de los diputados. En otros casos han sido partícipes de las movilizaciones. En este tenor, Enrique Graue rector de la UNAM advirtió que “difícilmente podremos con esa demanda en las condiciones actuales. Para las instituciones públicas, ya saturadas, crecer con calidad y con menor presupuesto es materialmente imposible”

Pero la lucha por la defensa y el aumento al presupuesto a la educación no puede estar encabezada por los rectores, ni por las autoridades universitarias, ya que su investidura y lo que representan, los intereses del gobierno al servicio de los grandes empresarios, no les permite ser parte de la lucha frontal contra el gobierno para defender la educación. Muchos de los y las rectoras son miembros de los partidos políticos patronales y se vuelven una correa de transmisión en las universidades de la política del gobierno federal o local. Incluso impulsan la antidemocracia en las universidades manteniendo estructuras de gobierno propias del medievo, donde como comunidad estudiantil no tenemos ninguna incidencia en la toma de decisiones.

¿Cómo enfrentar el recorte al presupuesto?

Las luchas que ha protagonizado el movimiento estudiantil están fragmentadas, se pelea por escuela, por universidad o por centro de estudio, tampoco se ha pugnado por la unidad entre docentes y trabajadores. Ninguna lucha en defensa de la educación ha sido capaz de lanzar una convocatoria a nivel nacional para unificar al movimiento estudiantil y hacerle frente al brutal ataque que el Gobierno Federal y los organismos internacionales vienen aplicando.

Desde la Agrupación Juvenil Anticapitalista sabemos que la lucha por la defensa de nuestra educación debe ser independiente de los partidos patronales, del gobierno y de las autoridades universitarias, los estudiantes debemos confiar en nuestras propias fuerzas y generar un movimiento por la defensa de la educación en unidad con los trabajadores administrativos y académicos de las universidades.

Es necesario convocar asambleas por escuela, facultad, universidad, para lograr la mayor organización y convocar a un gran Encuentro Nacional de estudiantes, académicos y trabajadores, donde se discuta y emane un pliego petitorio unificado que se plantee la lucha en defensa de la educación pública y gratuita, la defensa y aumento del presupuesto, el ingreso irrestricto a las universidades, la eliminación de exámenes estandarizados para la admisión, la construcción de nuevas universidades y/o planteles, condiciones laborales óptimas para profesores y trabajadores administrativos y medidas como becas, comedores, copias, transporte, dormitorios estudiantiles, transporte subsidiado por el Estado.

Para imponer estas demandas y lograr el aumento al presupuesto educativo, es necesario pelear por la exigencia de reducir los salarios millonarios de los funcionarios del gobierno, de las universidades y dejar de pagar las pensiones vitalicias de los ex-rectores ¡Que todo funcionario gane como una maestra! Se pueden garantizar suficientes recursos para la educación y mejorar la vida de todos los trabajadores y sus familias mediante el no pago de la deuda externa, así como aplicando impuestos progresivos a las fortunas de los grandes empresarios.

Es momento de generar un gran movimiento estudiantil nacional donde demostremos que somos una juventud sin miedo, la cual no le debe nada al capitalismo, una juventud dispuesta a pelear en las calles, a través de la movilización, nuestro derecho elemental a la educación.

¡Seamos realistas, hagamos lo imposible!